La privatización de ATLL encarecerá el agua un 9% en Cataluña entre 2013 y 2014

La privatización de la distribuidora en alta Aigües del Ter Llobregat (ATLL) encarecerá el agua un 9,1% entre 2013 y 2014, según han explicado fuentes del sector. La nueva subida se aprobará hoy mismo en una reunión del consejo de esta empresa, que recientemente fue privatizada en régimen de concesión a la constructora Acciona y al banco brasileño BTG.

Esta subida cuenta con el beneplácitode la Generalitat.Está previsto que el Consejo de la Red de Abastecimiento de Ter Llobregat avale mañana la decisión del consejo, una subida del 0,7% adicional calificada de incremento tarifario y que recoge correcciones como la inflación. En este organismo participa la conselleria de Territorio y Sostenibilidad, que encabeza Santi Vila.

Esta subida es discrecional pero se recogía en el pliego de condiciones de la concesión, con lo que resulta perfectamente legal. Otra cuestión es que el aumento que se ha llevado a cabo en el 2013, del 4,2%, ya supone triplicar la inflación prevista para el año en curso, con lo que resulta irónico aplicar un suplemento que refleje la subida de los precios.

Este 0,7% más se añadiría al 4,2% previsto. Con lo que en total, en Cataluña el agua subiría en 2014 un 4,9%. Pero esta subida sería acumulativa a la que ya se registró en 2013, otro 4,2%. Por tanto, la consecuencia para los usuarios en dos años de privatización se reflejará en un incremento del 9,1% en sus recibos del agua.

Esta escalada tarifaria ha de garantizar las inversiones previstas. Sin embargo, la Generalitat asumió la deuda pendiente de ATLL, unos 1.000 millones que, en teoría, debería cancelarse a largo plazo con los ingresos de la privatización. Esto permitió a Acciona y sus socios hacerse con ATLL limpia de polvo y paja.

El incremento del 4,2% corresponde a la aplicación escalonada de la tarifa media comprometida por el consorcio que lideró Acciona en su oferta, de 0,70 €/m3. Esta aplicación escalonada supondrá un ahorro aproximado de 50 millones de euros en dos años frente a la oferta rival, de 0,79€/m3 desde el uno de enero de 2013, según informó en su día la propia compañía. Es decir, el agua también hubiera subido aunque hubiese ganado Agbar ya que el aumento es efecto de las condiciones de privatización.

Pantano legal

La privatización sigue empantanada legalmente con la Generalitat, Acciona y Agbar, que resultó perdedora en el concurso, luchando a brazo partido por lo que no está claro cuál puede ser el desenlace final. La batalla judicial en este momento se está dando en el Tribunal Supremo.

Por ahora, la Generalitat se ha comprometido con Acciona y BTG Pactual a compensarle en caso de un giro judicial adverso, lo que tendría un enorme coste para las arca públicas catalanas.

La privatización se llevó a cabo de manera polémica. Lo hizo el gobierno de la Generalitat en funciones a finales del 2012, apurado de caja y se desmontó como una castillo de naipes cuando días después el organismo interno de la administración catalana que tutela los contratos públicos OARCC tumbó la adjudicación y dictaminó que debía entregarse a Agbar.