Fichajes, despidos y piques entre los grupos audiovisuales Secuoya y VSA
Un verano sin tregua. Mientras otros cerraron en agosto, la industria auxiliar del sector audiovisual preparó un convulso arranque de temporada.
Verano sin tregua. Mientras otros echaron el cerrojo en el mes de agosto, los principales operadores de la industria auxiliar del sector audiovisual han estado preparando un convulso arranque de temporada. El golpe de efecto lo dio, sobre la bocina, el fondo de capital riesgo HIG, que a finales de julio se quedó con la filial de servicios de Vértice 360 (VSA) y al tiempo cerró la contratación de José Jiménez, un peso pesado de su máximo competidor, el Grupo Secuoya, donde era director general de B&S, la filial de “gestión integral de servicios para producciones de televisión”.
El cambio de bando es la comidilla del sector. Sobre todo después de que ambas compañías estuvieran a punto de fusionarse hace un año y medio. Ahora, sin embargo, el fichaje revuelve aún más todo. Por el momento, HIG confía su inversión en VSA a este experimentado ejecutivo, que fraguó gran parte de su carrera profesional dentro de Telecinco, donde llegó a ocupar la dirección de Compras y Servicios Generales, y al mismo tiempo desestabiliza a Secuoya, con quien se disputa la hegemonía del negocio en los servicios auxiliares con permiso de la menguante Mediapro.
El golpe de efecto de HIG ha sido doble. Además del fichaje, el fondo gestionado por Jaime Bergel ha comenzado la temporada con cambios en forma de despidos en todo el grupo de compañías que forman VSA. Y algunas de las bajas son de campanillas, como los que afectan a Sol Quijano, directora general de Telson, o a Rosa Solano, directora de Estilismo de Vértice 360. Estas salidas han revolucionado el inicio de curso dentro de la compañía, donde se teme que el nuevo equipo gestor precipite más ajustes en otras divisiones como Videoreport o Apuntolapospo.
Además, la tensión generada con Secuoya ha generado expectativas sobre una posible respuesta. Según fuentes del sector, el grupo presidido por Raúl Berdonés baraja la posibilidad de devolver el golpe con algún fichaje de campanillas entre las filas de su competidor, aprovechándose de la incertidumbre generada con los recientes despidos. No en vano, los últimos movimientos de calado en esta industria los había protagonizado siempre la pujante Secuoya, que hizo hueco en su equipo directivo, por ejemplo, a Santiago González, exdirector general de RTVE.
Tras estos tiras y aflojas, ambas compañías pelean por hacerse con el negocio que las televisiones autonómicas van externalizando, desde producción de informativos a espacios divulgativos o culturales.La fusión entre Secuoya y VSA barajada a principios de 2012 pretendía, entre otros factores, formar unoperador imbatible para ese tipo de servicios. Sin embargo, las diferencias de criterio valorandoactivos y la llegada del Manuel García Durán como nuevo presdiente de Ezentis, primer accionista de Vértice 360, periclitó cualquier esfuerzo. La partida se juega de nuevo.
Verano sin tregua. Mientras otros echaron el cerrojo en el mes de agosto, los principales operadores de la industria auxiliar del sector audiovisual han estado preparando un convulso arranque de temporada. El golpe de efecto lo dio, sobre la bocina, el fondo de capital riesgo HIG, que a finales de julio se quedó con la filial de servicios de Vértice 360 (VSA) y al tiempo cerró la contratación de José Jiménez, un peso pesado de su máximo competidor, el Grupo Secuoya, donde era director general de B&S, la filial de “gestión integral de servicios para producciones de televisión”.