Roig se librará de la subida fiscal que planeaba la Generalitat para Mercadona

Buenas noticias en Cataluña para Juan Roig, el presidente de Mercadona: su grupo se librará de la subida fiscal que planeaba la Generalitat y que iba a afectar directamente a Mercadona. Finalmente la conselleria de Economía se inclina por no ampliar a estasgrandes superficies la tasa autonómica, según han explicado fuentes cercanas a la administración catalana.

Tras haberse planteado lo contrario, la Generalitat no ampliará la base imponible del impuesto sobre grandes superficies, tal y como planeaba y había pactado con ERC. En los Presupuestos del 2014 el ajuste de este impuesto se limitará a una subida del tipo, pero no se aplicará a los centros de menos de 2.500 metros cuadrados, tal y como se preparaba desde la conselleria de Economía.

Desde el departamento de Economía se ha señalado que todavía es pronto para comentar quéimpuestossubirán en la Ley de Acompañamiento de los Presupuestos de 2014, donde se prevé que se incluya esta modificación.

Si se hubiera extendido el impuesto a puntos de distribución de menos de2.500 metros cuadrados,Caprabo y Mercadona hubieran sido las empresas más perjudicadas. Pero los continuos retrasos en la presentación de los Presupuestos han jugado a favor de Roig. Finalmente la Generalitat optará por mantener las bases imponibles para evitar nuevos recursos legales de los grupos afectados. Y la subida del tipo se prevé moderada.

La caja por encima de los principios

En la conselleria de Economía han preferido priorizar la caja a los principios. Gravar con el impuesto a otro tipo de superficies hubiera supuesto nuevas batallas legales, después de los diez años en que los pleitos con los socios de la patronal de grandes superficies Angedacabaron con una sentencia del Tribunal Constitucional favorable a la administración catalana.

Tras esta decisión, la Generalitat ha empezado a ingresar dinero, ingresos contantes y sonantes en un momento de fuerte tensiones de caja. Es verdad que los grandes grupos comerciales están fraccionando los pagos adeudados, ya que ellos también están sufriendo la caída del consumo, pero los fondos llegan y no se quiere correr el riesgo de otra batalla legal que abriese la mínimagrieta con los gigantes comerciales que ahora están pagando.

Por lo tanto, se optará por subir los tipos. La subida será pequeña y se justificará porque el impuesto no se ha actualizado desde su creación, en 2001. Pero la subida no será relevante para los ingresos de la administración catalana. Lo que será clave es cobrarlo.

Esto lo prueban los últimos datos de ingresos fiscales publicados por la Generalitat. El Impuesto sobre Grandes Establecimientos Comerciales ha recaudado en los seis primeros meses del año 16 millones, cuando en el mismo período del año anterior por ese concepto no entró ni un euro. De hecho, sin los nuevos impuestos, como este tributo o Patrimonio, los pagos a la Generalitat por tributos propios no se hubiesen estancado, sino que se habrían derrumbado.

Rectificar es de sabios

El impuesto sobre grande superficies no es la única rectificación. También se prevé hacer marcha atrás en el de las bebidas azucaradas. Como en el caso de las grandes superficies, el papel de los lobbys bajo cuerda ha sido clave.

El impuesto sobre las bebida azucaradas había sido una iniciativa del conseller de Economía, Andreu Mas-Colell. Después ERC abrazó la propuesta. Ahora, las dos partes asumen que será mejor no dar pasos en falso.