Novacaixagalicia despacha al último de los Méndez de la alta dirección tras 30 años

Después de 30 años en los que el apellido Méndez ha estado presente en la alta dirección de Caixa Galicia, ahora Novacaixagalicia, el último de los vástagos del ex dierector general de la entidad con sede en La Coruña dimitió ayer de sus cargos. José Luís Méndez Pascual ha dejado sus funciones como director y consejero de la CXG Corporación, el holding de inversiones financieras e industriales.

 

Méndez Pascual, que durante siete años fue consejero delegado de la sociedad de cartera, presentó ayer su dimisión apenas un mes después de que fuera apartado de la gestión. A finales de mayo, José Luís Pego, actual director general de la caja, y Maria Victoria Vázquez, responsable del área de finanzas y mercados, tomaron las riendas de la corporación como presidente y consejera delegada, respectivamente. Ambos procedían de Caixanova, la entidad de Vigo, y mantenían y mantienen grandes diferencias con los de La Coruña.

El hijo del que fuera desde 1981 director general de Caixa Galicia ha optado por abandonar el grupo financiero en el que ha trabajado los últimos quince años. Bajo su gestión, la caja construyó una cartera de participadas valoradas en 3.000 millones de euros. Aunque falló en alguna inversión inmobiliaria, como la de Astroc, lo cierto es que la compraventa de empresas permitió a la matriz obtener unas plusvalías de 1.300 millones de euros entre 2005 y 2010.

Sin embargo, desde la fusión entre Caixanova y Caixa Galicia, a Méndez Pascual se le fue apartando del día a día del holding. Los encontronazos fueron tales que varios de los consejeros impidieron aprobar una inversión de 40 millones de euros en un proyecto eléctrico en Perú en el que estaba involucrado un exalto directivo de la caja de Vigo y el que fuera consejero delegado de Unión Fenosa, Honorato López Isla.

 Esta situación y el cambio de estrategia de CXG Corporación llevó a Hierros Añón a solicitar la recompra de su participación en la sociedad, en la que en otoño de 2007 inyectó 100 millones a cambio del 5,5% del capital. Su apuesta era impulsar la industrialización de Galicia, fomentar que la corporación ampliase su participación en otras empresas y colaborar para que la cartera industrial de Caixa Galicia saliese un día a Bolsa. Pero eso no ocurrió por lo que el empresario Manuel Añón prsentó una demanda contra la nueva caja.

La salida de José Luís Méndez Pascual se produce apenas tres meses después de que su hermano, Yago Méndez Pascual, también abandonara la entidad en abril. Éste era el responsable del área de empresas fuera de Galicia y se encargaba desde Madrid de las relaciones con los grandes grupos industriales y financieros. Meses antes había sido apartado de sus funciones anteriores.

Tras estas marchas, el único vínculo de unión entre las cajas gallegas y el apellido Méndez reside en que el padre, José Luís, se mantiene como presidente de la Fundacón Caixa Galicia. Un cargo aparentemente honorífico tras salir derrotado de la lucha de poder con Julio Fernández Gayoso.