Las mejores prácticas en el nuevo entorno laboral, según el mayor 'hacker' de España

El covid-19 trajo nuevas formas de trabajar, cambiando la percepción que tenían muchas empresas acerca de cómo se debe gestionar el trabajo. Para Chema Alonso, 'chief digital officer' (CDO) de Telefónica, miembro del comité ejecutivo de la compañía y reconocido ‘hacker’, ahora existe una nueva cultura empresarial, a la que tanto las compañías como los trabajadores deben adaptarse.

Son cada vez más las empresas que están optando por un modelo flexible, en el cual el horario y las condiciones de trabajo varían en función de la persona. Y es que, como dice Alonso, "al final se trata de clavar clavos, si un trabajador clava más clavos en cuatro horas, es preferible a uno que clava menos en 10 horas, ¿no?".

En su opinión, para que la flexibilidad laboral y el teletrabajo funcionen es preciso que el trabajo en equipo sea bueno, facilitando las conexiones personales, el respeto y empatía entre todos los empleados, desde el responsable de coordinación hasta el empleado más júnior. Para ello, acabar con la 'reunionitis' es fundamental. En palabras del CDO, "en muchas organizaciones se tiene la creencia de que cuantas más reuniones y más extensas sean, mejor". Nada más lejos de la realidad: debemos tener en cuenta que una reunión de una hora de ocho personas implica una jornada laboral, por lo que si esta puede ser concreta, mucho mejor. También es importante valorar si se puede prescindir de ella y suplirla por una llamada o un correo.

Entorno laboral híbrido y desarrollo profesional

Cada vez son más las empresas que buscan un entorno laboral híbrido, sin dejar de lado la presencialidad, pero buscando la máxima flexibilidad y mejores condiciones de trabajo para sus empleados. Esto se consigue, según Alonso, "adaptando las condiciones laborales de cada empleado a sus necesidades personales, de modo que se encuentre más feliz con su trabajo, y con su vida en general, logrando con ello ser más productivo". Para todo ello, es importante:

• Contar con un horario flexible. Poner el foco en la consecución de objetivos en lugar de en la cantidad de horas dedicadas a ello. De este modo, el trabajador será más eficiente y, además, podrá conciliar mejor su vida personal con la laboral.
• Deslocalización del puesto de trabajo. Es innegable que hay determinados puestos de trabajo que requieren ir al lugar concreto, como un almacenero o un transportista, pero, gracias a las herramientas tecnológicas, existe una gran cantidad de puestos que pueden ser desarrollados desde cualquier parte, lo cual contribuye positivamente a la conciliación de la vida laboral y personal.
• Trabajo personalizado. Al final, cada persona es un mundo. No se trata de que una empresa adopte un modelo totalmente flexible, o totalmente remoto, sino de buscar la combinación de elementos que mejor resulten para cada empleado, y que, así, cada persona pueda dar lo mejor de sí misma.

Hasta ahora hemos visto cómo afecta este cambio de un modelo 100% presencial a uno híbrido desde el punto de vista empresarial, pero ¿cómo afecta al desarrollo profesional? En relación con uno continuo, tratando de mejorar la eficiencia y empleabilidad, estos nuevos elementos pueden suponen una oportunidad para destacar como un empleado eficiente y con variedad de recursos, adaptados a nueva metodología ágil. Además, como indica Alonso, "lo importante no es centrarnos en lograr la perfección, sino en ir mejorando día a día, adaptándonos de la mejor manera a estos cambios y tratando de ser lo más eficientes posible":

Cómo adaptarse al teletrabajo

En cualquier caso, no es fácil pasar, de la noche a la mañana, del tradicional trabajo en la oficina a un trabajo en remoto. Para ello, hay varias palancas que resultan útiles:

1. Tecnología. Hoy en día es la mejor aliada. Si queremos desarrollarnos a nivel profesional, no queda otra que estar al día en cuanto a las nuevas herramientas tecnológicas. Seguro que hay algunas adaptadas a nuestras necesidades, bien sea para gestionar el tiempo, comunicarnos con nuestros compañeros, compartir archivos y documentos de forma ‘online’... Se trata de probar y quedarse con lo que mejor funcione en cada caso.

2. Gestión del tiempo. En un entorno laboral híbrido, la gestión del tiempo es un aspecto capital. Ser capaz de mantener toda la atención en la labor que estamos realizando marca la diferencia. Para gestionar correctamente el tiempo, podemos recurrir a tres herramientas.

En primer lugar, el ‘método Eisenhower’, que consiste en hacer una tabla, en la que distinguiremos, por filas, entre el trabajo importante y no importante; y por columnas, entre lo urgente y no urgente. Una vez acabada, se asignan a cada espacio las distintas tareas. Este método de gestión de tiempo ayuda a priorizar las distintas tareas. Segundo, el uso de calendario. Para una persona tecnológica, Google Calendar resulta una gran herramienta para tener en un mismo sitio reuniones y tareas por hacer. En cambio, para los más tradicionales, la agenda se convierte en la gran aliada. Por último, otras plataformas como Trello ayudan a poner en común con los compañeros la carga de cada uno, así como el estado en que se encuentra cada tarea, contribuyendo a mejorar el trabajo en equipo.

Nuevas formas de trabajo

Hemos conocido, de la mano de Chema Alonso, tres elementos fundamentales de las nuevas formas de trabajo, la flexibilidad horaria, la posibilidad de trabajar de forma remota y los contratos por objetivos en lugar de horas, pero hay otros a tener en cuenta que determinan nuevas formas de trabajar:

• Holocracia. Se trata de un modelo de trabajo en el cual nadie tiene un cargo superior al de ningún compañero. Suele darse en trabajos cuyo objetivo principal es el refuerzo de las competencias y habilidades de los trabajadores.
• ‘Smart working’. Se trata de un modelo donde priman la responsabilidad, la empatía y la confianza, ya que se traslada al empleado toda la responsabilidad que sus tareas conllevan. De este modo, el empleado asume más responsabilidad, pero también una mayor satisfacción con la buena realización del trabajo.
• ​‘Freelance’. Se trata del modelo más conocido de estos tres mostrados. Se trata de uno en el cual una persona presta sus servicios especializados a distintas empresas. Con este, la empresa logra externalizar un volumen de trabajo considerable y el 'freelance' tiene la posibilidad de autogestionar su tiempo y su trabajo.

Mejor Conectados

Mejor Conectados es una plataforma de contenidos de Telefónica donde personalidades de éxito como Ferran Adrià, Teresa Perales, Javier Gómez Noya o Nacho Azofra, u otros personajes como el emprendedor Javier Perea o el violinista Kamran Omarli, retratan la idea de que “cuando conectamos, somos capaces de hacer cosas increíbles”, que es el lema sobre el que se lanza.

El objetivo es poner en valor el poder de las conexiones humanas: “Queremos hacer nuestro mundo más humano conectando la vida de las personas”, afirma José María Álvarez-Pallete, presidente de Telefónica. “Creemos en un mundo más humano. Un mundo que se mueve gracias al talento de las personas. Por eso apoyamos el talento como mejor sabemos: conectándolo. Mejor Conectados quiere ser un lugar donde inspirarse, encontrarse, conectar y lograr cosas increíbles”, explica Rafael Fernández de Alarcón, director de Marca, Patrocinios y Medios de Telefónica.

En el apartado 'Inspírate' se visualizarán testimonios de algunos embajadores de la marca, como Rafa Nadal, la nadadora paralímpica Teresa Perales o el exjugador de baloncesto Nacho Azofra. Además, también cuentan su historia Javier Perea, de Smart Protection, una 'startup' apoyada por Wayra, o Kamran Omarli, violinista de la cátedra de violín Telefónica de la Escuela Música Reina Sofía.

Asimismo, junto a las historias de estas personalidades, en Mejor Conectados podemos encontrar 'Aprende'. Se trata de una serie de pequeñas 'clases magistrales' en que grandes figuras como Perico Delgado, Pablo Laso, Iñaki Gabilondo, Toni Nadal, María Zabala o Amaya Valdemoro ofrecen, en primera persona, consejos y reflexiones que nos pueden servir de inspiración y aprendizaje. En definitiva, para establecer mejores relaciones en nuestro día a día.