El CIS publica este jueves las coaliciones preferidas en plena negociación poselectoral

El Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) vuelve a los titulares por una decisión que puede resultar polémica. El organismo que preside el exdirigente socialista José Félix Tezanos publica este jueves, a las 12:30, el barómetro de mayo de 2019 en el que incluye una batería de preguntas sobre las coaliciones preferidas de gobierno.

Y ahí puede estar la cuestión conflictiva. El estudio llega cuando los partidos comienzan a moverse para trenzar pactos en distintos niveles, una vez finalizado el ciclo electoral este pasado domingo. Ahora está en juego todo el reparto de poder institucional para los próximos cuatro años: ayuntamientos, diputaciones provinciales, comunidades autónomas y el Gobierno central. Además de la renovación de los principales cargos en la Unión Europea. El CIS, por tanto, aportará una primera foto de qué quieren los ciudadanos, de cuáles son sus preferencias.

El trabajo de campo, previsiblemente, es posterior a las generales del 28-A, pero anterior a la triple urna del pasado 26-M: locales, autonómicas y europeas

El estudio de campo del barómetro se extendió, a falta de conocer las fechas concretas, en los primeros días de este mismo mes, como sucede con las encuestas mensuales del CIS. Así que en esta ocasión recogerá la opinión de los españoles una vez conocidos los datos de las generales del 28 de abril, que el PSOE ganó con holgura: 123 diputados y un 28,78%, por los 66 escaños y el 16,70% del PP —un descalabro histórico—. Por detrás, se sitúan Ciudadanos, con su 15,86% y 57 actas; Unidas Podemos, con un 14,32%, y Vox, con un 10,26%.

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¿Interferencia?

La gobernabilidad del Estado está por despejar, aunque no hay ninguna alternativa a la presidencia de Pedro Sánchez. Pero lo que no está nada claro es con qué apoyos —más allá de los morados, Compromís, PNV y el Partido Regionalista de Cantabria, que no son suficientes— y, sobre todo, cómo se configurará el próximo Gabinete. Pablo Iglesias reclama entrar en él. Pero el presidente en funciones entiende que la posición negociadora de Unidas Podemos se ha debilitado tras las autonómicas, municipales y europeas del pasado domingo.

Sánchez ha enfriado casi de manera decisiva toda posibilidad de Gobierno de coalición con Podemos, opción que sigue defendiendo Iglesias

Ayer mismo, en Bruselas, a su llegada a la cumbre informal de líderes de la UE, Sánchez pidió a Iglesias y Ciudadanos que reconsideren sus estrategias tras lo ocurrido el 26-M. Y "lo importante es la estabilidad", que ve posible, dijo, con un Ejecutivo del PSOE "abierto y progresista" en el que no se miré "el carné político" de sus miembros sino lo que comparten, y que integre a "independientes de reconocido prestigio incorporados al Gobierno". "Es la línea en la que vamos a seguir trabajando. Es más, con más convicción porque los ciudadanos han validado esta perspectiva y esa orientación de gobierno", añadió. Es decir, que las urnas han validado en todas las convocatorias que se han agrupado en un mes la oferta y el propósito de los socialistas de construir un Ejecutivo monocolor.

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Por tanto, el barómetro de este jueves probará si, vía encuesta, los españoles validan ese planteamiento o prefieren un cogobierno con los morados o bien otra alternativa. Pero puede interpretarse como una interferencia del instituto público en plena negociación. Pero el estudio también aterriza cuando todas las miradas están puestas en Ciudadanos, llave en muchos territorios. Los naranjas han de decidir si inclinan la balanza siempre hacia el PP —en muchos casos, con el concurso de Vox— o equilibran ayudando a algunos candidatos socialistas. Quedan semanas hasta que la foto quede nítida.