El PP duda de la disciplina del PSOE madrileño para entregarse a Carmena

La dirección del Partido Popular hace un seguimiento permanente de las negociaciones en las 19 capitales de provincia donde ganó por mayoría clara en los comicios del 24-M, pero depende de los pactos con otros partidos (básicamente Ciudadanos) para alcanzar las alcaldías correspondientes. Hasta ahora, sólo da por encarrilados 5 de esos gobiernos municipales: Badajoz, Almería, Santander, Jaén y Logroño. Pero tampoco consideran en el PP que el PSOE vaya mejor en la carrera de los pactos, por ejemplo en Madrid, donde ponen en duda la disciplina de los socialistas a la hora de entregar la alcaldía de la capital ala candidata de Podemos, Manuela Carmena.

En fuentes del PP reconocen que el compromiso de Pedro Sánchez con Carmena para hacerla alcaldesa está cerrado, y ratificado además con Pablo Iglesias; pero también apuntan que les llega la seria preocupación de los socialistas en Madrid ante el encumbramiento institucional de Podemos en la capital de España. Al secretario general del PSOE le viene bien para lograr el apoyo de las demás marcas de Iglesias en comunidades como las de Extremadura o Castilla-La Mancha, pero el ascenso de Carmena puede ser letal para el futuro electoral de los socialistas en la circunscripción, para las generales de noviembre de entrada.

Esperanza Aguirre guarda desde hace una semana un silencio que ha sembrado la inquietud entre los partidarios de plasmar en Madrid la alianza PSOE-Podemos como primera piedra para preparar una gran coalición de partidos de izquierdas, de ámbito nacional ycon nacionalistas periféricos, que opte a colocar a Pedro Sánchez a la Moncloa en los próximos comicios legislativos. Para algunos dirigentes socialistas, los más veteranos y con escaño en el Congreso, esuna apuesta que puede ser suicida y empieza por poner en peligro la posición de su partido en Madrid como segunda fuerza política.

Más que sobre la posibilidad de fugas o ausencias socialistas a la hora de la constitución del Ayuntamiento de Madrid el próximo día 13 al estilo del “tamayazo”, con lo que se especula en medios parlamentarios es con la posibilidad de que los socialistas madrileños prefieran estudiar fórmulas de pactos alternativosa la entrega de la alcaldía a Carmena.

Esperanza Aguirre, con un 34,5 por ciento –la más votada en los comicios–, dijo desde el primermomento que estaba dispuesta a dar un paso atrás si era un obstáculo para la gobernabilidad; e incluso que podía apoyar al candidato socialista, Antonio Miguel Carmona, con tal que de que la extrema izquierda no entrara en el ayuntamiento. A esta tesis se suman ahora algunas fuentes cercanas a la lista de Ciudadanos en Madrid: los 7 concejales naranjas estarían dispuestos a apoyar a Carmona con su voto siempre y cuando tuvieran la seguridad de que los 21 concejales del PP lo harían y de que el PSOE estaría dispuesto a aceptarlo. En la dirección de Ciudadanos se entiende que evitar la llegada de Carmena a la Alcaldía –más por algunos de los miembros "radicales" que le acompañan en las listas que por la exjueza–bien valdría un frente a tres con Carmona como alcalde, algo que Aguirre insiste en ofrecer desde hace días apartándose ella.

Para llevar a efecto esa jugada poselectoral, bastaría con que los concejales del PP votaran al candidato socialista. Y si sumaran sus votos a los de Ciudadanos se llegaría al mismo tipo de acuerdo de “cordón sanitario” que Sánchez aplica al PP en toda España, pero en este caso para aislar a la plataforma de Podemos en la capital. Además, Ahora Madrid ni siquiera fue la opción más votada (quedó a 3 puntos del PP), aunque Carmena insista en proclamarse vencedora y alcaldesa por derecho.