La promesa de reabrir Canal 9, una patata caliente para PSOE y Compromís

Posiblemente la decisión más polémica del Consell de Alberto Fabra fue el cierre de Ràdio Televisió Valenciana (RTVV), Canal 9. Una medida drástica que chocó con una fuerte contestación social y contra la que se posicionaron todos los partidos de izquierdas, entre ellos el PSOE y Compromís, las dos formaciones llamadas a formar gobierno tras el 24-M.

En los programas electorales de los dos partidos consta la reapertura de Canal 9. Es una de las promesas más repetidas, pese a que la presión social sobre este tema ha caído con el paso del tiempo. Lo que síse mantiene es la presión del comité de empresa, que pocas horas después de conocerse el resultado electoral ya exigió la paralización de la liquidación de RTVV hasta que el nuevo Consell tome posesión.

Ximo Puig, líder de los socialistas valencianos y principal candidato a asumir la presidencia de la Generalitat, ha repetido en numerosas ocasiones que una de las primeras decisiones que tomará el nuevo Consell es la reapertura de la televisión autonómica y le ha puesto fecha al reinicio de las emisiones: el 9 de octubre de este mismo 2015. Es una fecha emblemática, ya que es el día de la Comunitat Valenciana y el día en que empezaron las emisiones de la anterior Canal 9 en 1989.

Pero lo que no ha especificado Puig es cómo lo hará. Hay dos posibilidades: o aprovechar la antigua RTVV parando la liquidación e incluso anulando el ERE y recuperando a todos los empleados (para hacer uno nuevo después), que es lo que pide el comité de empresa, o empezar desde cero.

Vídeo: Últimos segundos de emisión de Canal 9

El número dos de Compromís, Enric Morera, abogó el pasado lunes por las tesis de los trabajadores, convertidos en un lobby de presión. Sin embargo, la líder de la coalición, Mònica Oltra, se ha mostrado mucho más prudente.

Oltra, reabrir pero sin prisas

Oltra, si bien también es partidaria de la reapertura, prefiere estudiar la situación actual de la RTVV en liquidación y decidir después. Incluso ha llegado a considerar sensato el documento elaborado por la asociación profesional Unió de Periodistes, que aboga por empezar desde cero, aunque teniendo en cuenta la experiencia de los extrabajadores. Incluso la diputada de Compromís ha reflexionado en alguna ocasión sobre si la reapertura inmediata es o no una prioridad.

Tanto PSPV-PSOE como Compromís parecen presos de una promesa electoral –o preelectoral, porque anunciaron en su día que si gobernaban reabrirían Canal 9 inmediatamente–que tiene muchas aristas. La liquidación está en marcha pero embarrancada por su complejidad (tanto que han dimitido varios liquidadores durante este año largo). El ERE está a punto de concluirse (los últimos despidos son para junio). Pararlo podría provocar una causa de nulidad o al menos de inseguridad jurídica. Y todo con el modelo de RTVV de fondo.

Lo que parece desprenderse de las palabras de estos días de Puig y Oltra es que el futuro Consell tomará alguna medida, siquiera simbólica, para que el próximo 9 de octubre haya una emisión de una televisión propia. Pero las dudas sobre cómo será finalmente la nueva RTVV y el coste que será capaz de asumir la Generalitat por ello son una incógnita.

Otras dos dimisiones de 'liquidadores' ayer

Dos de los tres abogados que forman la comisión liquidadora de Ràdio Televisió Valenciana (RTVV, Canal9) han presentado su dimisión a la Generalitat Valenciana. El pleno del Consell de este viernes aceptará la renuncia de Enrique Blasco y José Vicente Hernández. A la espera de que se conozca si la Generalitat nombra sustitutos, de momento sólo quedará al frente de la empresa pública que gestionó Canal 9 Carlos Cervantes.

Desde que la Generalitat puso en marcha la liquidación de RTVV han dimitido cinco liquidadores en algo más de un año y medio, incluyendo los dos que cesarán mañana. Las dificultades para liquidar el ente, reflejadas incluso en los informes de los auditores, han provocado la marcha de todos ellos.

El comité de empresa de RTVV pidió precisamente este lunes, tras la celebración de las elecciones autonómicas, la paralización de la liquidación, habida cuenta que todos los partidos de la izquierda, que gobernará la Generalitat, han prometido reabrir la cadena.