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Del millón de Podemos a los 700€ de Vox: el precio de la carrera a la Moncloa en Facebook
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PP y PSOE están lejos de estas cifras

Del millón de Podemos a los 700€ de Vox: el precio de la carrera a la Moncloa en Facebook

La formación liderada por Santiago Abascal estuvo sin promocionar contenidos desde el pasado 16 de octubre, pero este mismo jueves ha lanzado 17 anuncios de golpe

Foto: Santiago Abascal. (EC)
Santiago Abascal. (EC)

La perfecta ingobernabilidad que hoy domina la política española ha dado lugar a una paradoja nunca antes vista: la campaña electoral más corta de la democracia ha tenido como antesala la precampaña más larga. Dos elecciones generales en apenas medio año dan buena cuenta de que los tiempos de estabilidad han llegado a su fin y, con ellos, las estrategias clásicas de comunicación.

La pegada de carteles y la organización de actos de campaña siguen copando gran parte del presupuesto que los partidos destinan a propaganda electoral, pero la inversión en redes sociales se come una parte del pastel cada vez mayor. Así lo demuestra la biblioteca de anuncios de Facebook, una herramienta que detalla el gasto de cada formación en anuncios difundidos a través de esta red social y de Instagram —también propiedad de Mark Zuckerberg— con el fin de mejorar la transparencia de las plataformas.

Foto: Santiago Abascal, presidente de Vox. (EFE)

Desde la víspera de los pasados comicios y hasta el pasado 4 de noviembre, Unidas Podemos sobresale como el partido que más ha pagado por anuncios en Facebook e Instagram. Sólo desde la página oficial de Podemos, los morados han gastado 867.000 euros, a los que habría que sumar 102.826 desde la cuenta de Irene Montero y 80.629 desde la de Pablo Iglesias. En total, más de un millón de euros invertidos en mensajes segmentados como arma de promoción, lo que se traduce en una cantidad mayor a la del resto de partidos juntos.

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Gasto de Podemos.

Ciudadanos es el segundo grupo que más fondos emplea a este respecto. En el mismo período, ha gastado 359.511 euros —34.364 en la última semana de la que se tiene registro— con publicaciones que destacan, especialmente, el "impulso a la inversión" y el "apoyo a las 'startups'". En este caso, apenas se publicitan anuncios desde las cuentas de Albert Rivera e Inés Arrimadas,en detrimento de impulsar las páginas de la organización política en cada comunidad: 41.211 euros desde Ciudadanos Andalucía, 1.463 desde Ciudadanos Aragón y 892 desde Ciudadanos Madrid, por ejemplo, aunque en ninguno de estos casos existen ya anuncios activos.

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Pago de Ciudadanos.

PP y PSOE están muy lejos de estas cifras. Los populares han destinado 263.790 euros en este ciclo electoral y no promocionan un mensaje desde el pasado 7 de noviembre, cuando compartieron un eslogan destinado a los jóvenes: "¿Universidad o FP? Futuro". Por su parte, los socialistas han gastado 47.724 menos en estos meses, pero han dado un arreón de 37.825 euros en los últimos días de los que se tienen registros, con el acto de cierre de campaña como principal ariete.

Resulta llamativo el bajo importe que, en teoría, sale de las arcas de Vox, sólo 709 euros en seis meses (suponiendo el mismo coste por cada segmento de un anuncio). Pero este dato tiene truco. La formación liderada por Santiago Abascal estuvo sin promocionar contenidos desde el pasado 16 de octubre, si bien este mismo jueves ha lanzado 17 anuncios de golpe —con hasta siete versiones de algunos de ellos en función de a qué público se dirigen—. Tales apuestas, en su mayoría vídeos en los que un representante de Vox confronta con la izquierda, no constan por el momento en el registro, pero si se toma cada publicación por separado se observa que en muchos casos el desembolso ya supera los 300 euros.

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Pagos de Vox.

La herramienta de Facebook no es infalible si lo que se busca es la transparencia, de acuerdo a José Ramón Fernández, CEO de TheSocialAudience, y a cargo de la campaña digital de un partido. Bajo su punto de vista, es posible burlar el recuento oficial de anuncios promocionados a través de "cuentas gestionadas desde máquinas que alteran el algoritmo". No sólo en esta red social, sino además en Twitter, plataforma tradicionalmente inundada por marketing político en vísperas de citas electorales, al menos hasta el pasado 30 de octubre, cuando su CEO, Jack Dorsey, anunció que pondría freno a la posibilidad de promocionar cualquier mensaje político "de forma global".

La perfecta ingobernabilidad que hoy domina la política española ha dado lugar a una paradoja nunca antes vista: la campaña electoral más corta de la democracia ha tenido como antesala la precampaña más larga. Dos elecciones generales en apenas medio año dan buena cuenta de que los tiempos de estabilidad han llegado a su fin y, con ellos, las estrategias clásicas de comunicación.

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