Iglesias convoca a sus líderes territoriales para reducir las fugas al partido de Errejón

Entre el último Consejo Ciudadano Estatal de Podemos, el máximo órgano de decisión del partido, y el que se celebrará este sábado han pasado más de tres meses y medio. Durante este período, las negociaciones para la conformación de Gobierno y la incertidumbre sobre el alcance fuera de Madrid de la escisión liderada por Íñigo Errejón taponaron las fugas hacia este nuevo proyecto. Conatos de salidas que ya dejaron entrever las voces críticas en aquel cónclave de la dirección reclamando un Vistalegre III para renovar liderazgos y "enmendar el rumbo de la organización". Ahora, con el salto a la arena estatal de Más País tras la repetición electoral, la amenaza de fugas se ha vuelto a hacer protagonista en esta reunión de la dirección. El objetivo, una vez más, será el de cerrar filas para taponarlas.

La dimisión del secretario general de Murcia, Óscar Urralburu, a escasas horas de la reunión de la dirección para pasarse a las filas de Más País, liderando su candidatura en la Región, ha abierto la veda e incrementado el temor de que contagie a otros territorios. Su marcha se daba por descontada hace unos meses, precisamente porque ya fue la voz más crítica con el liderazgo de Iglesias en la última cita del CEE y vinculó su fidelidad a las siglas a que recuperase el espacio político de 2015, en alusión al papel que jugaba entonces Errejón. Sin embargo, el hecho de que a estas alturas no hubiese dado pistas sobre sus intenciones había hecho bajar la guardia en el cuartel general de Podemos. Y es que su renuncia para saltar de Podemos a Más País se produjo solo cuatro días antes de que rematase el plazo para registrar las coaliciones electorales.

La dimisión del secretario general de Murcia para pasarse a las filas de Más País ha incrementado el temor de que contagie a otros territorios

La necesidad de Pablo Iglesias de escenificar la unidad interna no se debe tanto a la posibilidad de que haya más salidas entre las direcciones de los aparatos autonómicos, sino entre cuadros medios o bases de estas. Urralburu fue uno de los nueve secretarios autonómicos que impulsaron la denominada 'Declaración de Toledo', un intento de crear una dirección colegiada para forzar cambios orgánicos aprovechando la brecha interna abierta tras la marcha de Errejón. De momento, ha sido el único que ha abandonado la organización y desde la dirección estatal se asegura que no existe la mínima constancia de que otros líderes territoriales vayan a seguir sus pasos. Las dudas, sin embargo, crecen a medida que se baja en el escalafón orgánico.

Durante los últimos días, han saltado a la luz las diferencias respecto a la hoja de ruta electoral entre Madrid y las direcciones autonómicas de Aragón y Andalucía, pero sin que ninguna de estas últimas haya barajado la posibilidad de escindirse con Íñigo Errejón. El secretario general aragonés, Nacho Escartín, incluso negoció con la Chunta Aragonesista una alianza electoral para cerrar el paso a Errejón, aunque finalmente la formación liderada por José Soro ha anunciado este viernes que concurrirá en coalición con Más País. Lo hará a cambio de que sea la CHA quien encabece la lista por Zaragoza.

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En este proceso han vuelto a saltar las costuras entre Madrid y Aragón. Escartín llegó a trasladar a Iglesias que el principal escollo para cerrar el acuerdo con la Chunta era Pablo Echenique, el cabeza de lista por Podemos en Zaragoza que la formación morada no estaba dispuesta a ceder para preservar sus primarias. Unas diferencias personales manifestadas en público que no siempre comparte el resto de la dirección del partido en Aragón.

En Andalucía, Teresa Rodríguez también elevó las presiones para concurrir a las elecciones con la marca Adelante Andalucía, incluso abriendo la puerta a integrar al nuevo partido de Errejón en una alianza amplia que también incluyese a IU y los andalucistas. La negativa tanto de Podemos como de IU descartaron estos planes, mientras que Más País, un proyecto frente al que los anticapitalistas andaluces remarcan sus distancias, ya había avanzado su intención de presentar listas, al menos, en las circunscripciones de Málaga y Sevilla.

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Entre los cercanos a Errejón antes de su escisión destaca el secretario general de Podemos Euskadi, Lander Martínez, quien también participó en el impulso de la 'Declaración de Toledo'. Al confirmarse la decisión de Errejón de presentarse a las elecciones y hacerlo en más circunscripciones que la madrileña, todas las miradas se dirigieron hacia él. La intención del entorno de Errejón de presentarse en la circunscripción de Vizcaya hizo crecer las especulaciones. El propio Martínez disipó las dudas al descartar cualquier ruptura, destacando además que Elkarrekin Podemos, la candidatura unitaria entre Podemos e IU, tiene "un espacio muy asentado en Euskadi" y que la irrupción de Más País solo interesa al PSOE para "debilitar" a la formación morada.

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Así las cosas, el efecto Errejón en Podemos se reduciría a cuadros intermedios, exdirigentes o sectores críticos, como los afines a Carolina Bescansa en Galicia que perdieron la batalla de las primarias internas. Más perjudicial está siendo para Equo su cambio de socios. La decisión de integrarse en las candidaturas de Más País ha provocado la dimisión de su fundador y único representante en el Congreso, Juantxo López de Uralde y la de otros cuatro miembros de la dirección. Asimismo, Equo Catalunya se ha desmarcado de la política de alianzas de la dirección calificando de "error histórico" la coalición con Más País, por lo que mantendrán su confluencia con los 'comuns'.