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La fidelidad al PSOE sigue en máximos y consolida su amplia ventaja sobre el PP
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QUINTA OLA DEL 'TRACKING' DE EL CONFIDENCIAL

La fidelidad al PSOE sigue en máximos y consolida su amplia ventaja sobre el PP

Sánchez alcanzaría 136 actas y podría sumar mayoría absoluta con Podemos, PNV y Compromís, sin necesidad del sí o la abstención de los separatistas. La derecha sigue lejos del umbral necesario

Foto: Pedro Sánchez, este 7 de abril, en el Palacio de Congresos Expo de Zaragoza. (Eva Ercolanese | PSOE)
Pedro Sánchez, este 7 de abril, en el Palacio de Congresos Expo de Zaragoza. (Eva Ercolanese | PSOE)

Los últimos metros de la carrera electoral del 28 de abril ya están encima. El viernes próximo, arranca una campaña de 15 días que tiene un claro favorito. Pedro Sánchez. El PSOE no solo se mantiene como primera fuerza, sino que su voto es bastante sólido y la fidelidad de los suyos, altísima, insólita en una formación cuyos electores suelen ser, así ha sucedido tradicionalmente, más perezosos o menos movilizados. A la fortaleza de los socialistas contribuye su amplia ventaja sobre el segundo, el PP. Así, habrían avanzado en los últimos cuatro días nueve escaños, hasta los 136, por los 76 del PP. Once puntos y medio de distancia, y 60 parlamentarios. Se abriría además la opción de gobernabilidad más cómoda para Sánchez: PSOE, Unidas Podemos, PNV y Compromís alcanzarían la mayoría absoluta del Congreso, sin necesitar ni la abstención ni el apoyo de los independentistas catalanes.

Estos son los brochazos de la quinta oleada del 'tracking' de IMOP Insights para El Confidencial, el penúltimo antes de que dé comienzo oficialmente esta campaña de generales. Un estudio que viene a aquilatar las posiciones respectivas de cada partido —el orden en la parrilla de salida se mantiene estable—, pero que de nuevo demuestra que un pequeño movimiento en la estimación de voto puede cambiar la distribución de escaños. Esta técnica demoscópica, que se actualiza con 200 entrevistas diarias, hasta un máximo de 1.400 semanales, permite rastrear la evolución del voto conforme se acercan las urnas.

Y no solo las subidas o bajadas de partidos. También otros elementos fundamentales en unos comicios. Como la participación. Del entorno del 65% de las primeras oleadas se pasa a una movilización que ahora se calcula del 72%, una marca ya por encima de la que se registró en las generales del 26 de junio de 2016 (69,83%) y ya muy cerca de la que las urnas arrojaron en las elecciones precedentes, las del 20 de diciembre del 2015 (73,2%), en ambos casos sin contar con el voto de los residentes españoles en el extranjero (CERA).

El PSOE cosecharía, si las elecciones se celebraran ahora mismo, el 31,5% de los votos, lo que se traduciría en 136 escaños. Es el valor más alto de toda la serie de IMOP para este 28-A. Los socialistas arrancaron su camino en este 'tracking' con un 30,5% (131 diputados), de ahí se estiró medio punto (133), y luego se contrajo hasta el 30%, que en la tercera entrega suponían 130 actas y en la cuarta 127. Es decir, que con cuatro días de diferencia, los socialistas avanzarían un punto y medio y ganarían de golpe nueve representantes. Los 136 asientos en el Congreso son 52 más que en las generales de junio de 2016. Un salto de 8,87 puntos respecto a aquellos comicios, cuando logró el 22,63% de las papeletas.

Foto: Pedro Sánchez, el pasado 5 de abril durante la entrevista con El Confidencial. Al fondo, su director de Gabinete, Iván Redondo. (Jorge Álvaro Manzano)

A la casilla de salida

11,5 puntos más abajo del PSOE quedaría el PP de Pablo Casado. En el 20% de los sufragios, con 76 diputados. Nada que ver con el 33,01% y los 137 parlamentarios de hace tres años. Los populares han seguido una trayectoria zigzagueante. Primero experimentó un pequeño avance: del 19,5% y 75 escaños de la primera oleada se pasó al 20% (77), más tarde saltó al 21,6% y 89 sillones y en la cuarta entrega bajó hasta el 20,8% y los 83 representantes. Ahora, el PP volvería prácticamente a la casilla de salida.

Los populares obtendrían 76 diputados, por los 53 de Cs, los 32 de Unidas Podemos y los 20 de Vox. ERC sacaría 14; JxCAT, 4; Bildu y Compromís, 3

El retroceso de los conservadores se corresponde con una pequeña subida de Ciudadanos. La que le hace pasar del 14,8% y las 52 actas del cuarto 'tracking' al 15,5% y los 53 asientos de esta última medición (32 consiguió en 2016). Es el porcentaje más alto de estimación de toda la serie. Los registros son los siguientes: 14,4% (52 diputados) en la primera ola; 14,9% (53) en la segunda, y 14% (y 47 diputados) en la tercera. Vox, desde luego, no recupera los números de las primeras entregas. Se situaba en el 11% inicial (29 parlamentarios), de ahí bajó al 10,1% (27) y al 9,5% (18 representantes). En el cuarto barómetro la formación de ultraderecha pasaba al 9,6% y las 20 actas. Ahora, cae hasta el 9,3%, pero se mantendría en los mismos 20 parlamentarios.

El descalabro de Unidas Podemos se podría dar por bastante afianzado. Hace tres años obtuvo 71 diputados y un 21,15% de los votos. La coalición de Pablo Iglesias se estabiliza... pero en la mitad de su representación. En la primera entrega tenía un 12,4% (31 sillones), luego descendió al 11,9% (28), de ahí creció hasta el 13,7% (35), y en el cuarto 'tracking' se colocó en el 13,9% y los 35 diputados. En la quinta ola cae al 12,9%, y se quedaría con 32 actas.

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En las formaciones minoritarias hay pocas diferencias. ERC baja de 15 a 14 parlamentarios, mientras que Compromís gana uno (pasa de dos a tres). Los números de los otros pequeños partidos se mantienen: cuatro para Junts per Catalunya, seis para el PNV, tres para EH Bildu, uno para Coalición Canaria y dos para Unión del Pueblo Navarro (UPN). En la Comunidad foral, UPN se presenta en coalición con PP y Cs bajo la marca Navarra+, pero los dos primeros de la lista pertenecen a la fuerza regionalista, que ya ha advertido de que sus representantes se integrarán en el Grupo Mixto. El Partido Animalista Contra el Maltrato Animal (Pacma), como en las tres últimas entregas, no obtendría ningún acta.

Foto: Albert Rivera y Pedro Sánchez, el pasado 12 de febrero durante el debate de totalidad de los Presupuestos de 2019. (EFE)

Un voto ya muy decantado

La composición del Congreso que arroja esta quinta ola abre un escenario que hasta ahora no emergía. Socialistas (136), Unidas Podemos (32), PNV (6) y Compromís (3) suman 177 diputados. Uno más, por tanto, que la mayoría absoluta. Eso supone que Sánchez no necesitaría ni la abstención ni el apoyo de ERC y JxCAT. En esta ecuación, los independentistas serían irrelevantes.

Casi el 79% de los votantes del PSOE en 2016 repetirá papeleta. El índice de fidelidad del resto de grandes formaciones no llega ni al 49%

La combinación con UP, PNV y Compromís sería la más cómoda para Sánchez y la que probablemente saldría adelante. La opción transversal, de PSOE con Cs arrojaría una mayoría más abultada, de 189 parlamentarios. Pero los naranjas la rechazan por completo, al menos por ahora. La suma de las derechas —PP (76), Cs (53), Vox (20) y UPN (2)— da 151 representantes, a 25 de la mayoría absoluta. En porcentaje, PSOE y Unidas Podemos aglutinarían el 44,4% de los sufragios, por el 44,8% de conservadores, naranjas y Vox. En la primera oleada, los primeros concentraban el 42,9% de las papeletas y los segundos, el 44,9%. Las izquierdas, por tanto, han avanzado un punto y medio y las derechas han decrecido una décima. Ambos bloques están, pues, muy empatados.

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Este último 'tracking' refleja que el voto al PSOE está ya muy asentado. Por varias razones. Primero, porque la distancia respecto al segundo es amplia, lo que hace que la diferencia en escaños sea muy abultada y que el partido de Sánchez aproveche el 100% de sus sufragios —todos se traducen en diputados—, mientras que la fragmentación de la derecha es castigada por el sistema electoral. En segundo lugar, porque es la formación con la intención declarada de voto más elevada: el 35% de los encuestados manifiesta que apostará por las siglas del puño y la rosa. Otro 16,3% se inclina por el PP, un 13,8% por Cs y otro 11,8% por Unidas Podemos. No obstante, sigue siendo muy bajo el volumen de encuestados que dice que tiene decidido ya el voto: era del 56,7% en la cuarta entrega y de un 55,1% en esta última medición.

Rivera llama a votar al grito de '¡Vamos, Ciudadanos!' para derrocar a Sánchez

Además, el PSOE es la fuerza política que tiene más amarrado a sus electores. El 78,8% de sus votantes de 2016 repetirá papeleta el 28-A. Apenas sufre fugas relevantes. El PP, en cambio, solo retiene al 48,7% de los suyos, mientras un 15% se le escapa hacia Cs (1,19 millones de votos) y otro 15,5% (1,23 millones) se le marcha hacia Vox. Albert Rivera también tiene un electorado muy volátil. El 48,4% se queda en la misma casa naranja, pero un 11,5% de sus votantes prefiere ahora a Vox y otro 8% al PP. La fidelidad de voto a Iglesias es asimismo muy baja (48,3%), porque un 29% de sus electores de hace tres años se fuga hacia el PSOE.

Ficha técnica

-Universo: personas de 18 años y más residentes en el territorio nacional peninsular, Baleares y Canarias. 

-Tamaño muestral: 1.440 entrevistas, aproximadamente 200 diarias. 

-Diseño muestral: 'tracking' diario a través de encuestas telefónicas a fijos y móviles. 

-Técnica de entrevista: telefónica asistida por ordenador mediante el sistema CATI. Un 45% de las entrevistas se realizaron a individuos localizados a través de teléfono móvil.

-Equilibraje: con el fin de minimizar posibles errores de campo y ajustar los datos al universo, el fichero se ha sometido a un equilibraje a partir de las siguientes matrices: sexo x edad; tamaño de municipio x CC.AA.; sexo x edad x comunidades autónomas y equipamiento telefónico en el hogar.

-Margen de error de muestreo: ± 2,7 puntos porcentuales para p=q=50% y nivel de significación del 95%, siempre en el supuesto de un muestreo aleatorio simple.

-Fechas de campo: del domingo 31 de marzo al sábado 6 de abril de 2019.

-Instituto responsable de la investigación: IMOP Insights, SA.

*IMOP Insights se acoge al código internacional CCI-ESOMAR para la práctica de la investigación social y de mercados. IMOP Insights cumple con los requisitos establecidos en la Norma UNE-ISO 20252.

Los últimos metros de la carrera electoral del 28 de abril ya están encima. El viernes próximo, arranca una campaña de 15 días que tiene un claro favorito. Pedro Sánchez. El PSOE no solo se mantiene como primera fuerza, sino que su voto es bastante sólido y la fidelidad de los suyos, altísima, insólita en una formación cuyos electores suelen ser, así ha sucedido tradicionalmente, más perezosos o menos movilizados. A la fortaleza de los socialistas contribuye su amplia ventaja sobre el segundo, el PP. Así, habrían avanzado en los últimos cuatro días nueve escaños, hasta los 136, por los 76 del PP. Once puntos y medio de distancia, y 60 parlamentarios. Se abriría además la opción de gobernabilidad más cómoda para Sánchez: PSOE, Unidas Podemos, PNV y Compromís alcanzarían la mayoría absoluta del Congreso, sin necesitar ni la abstención ni el apoyo de los independentistas catalanes.

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