Los partidos se preparan para el plan B: acortar la campaña y votar el 18-D
La propuesta de reforma para reducir la campaña de las dos semanas actuales a una y evitar así comicios el 25-D, que lanzó el PSOE, ha calado entre la mayoría de formaciones
Unidos Podemos ha recogido el guante lanzado por el PSOE para evitar que, en el caso de repetirse las elecciones, tengan que celebrarse el día de Navidad. La prioridad de la formación que lidera Pablo Iglesias pasa por buscar una alternativa de gobierno junto a los socialistas si se consuma el fracaso de Mariano Rajoy en lainvestidura, pero están dispuestos a apoyar una reforma que reduzca la campaña electoral de las dos semanas actuales a una y que, por tanto, permita adelantar al 18 de diciembre una hipotética repetición electoral.
La necesidad de un plan B que acorte la campaña electoral una semana y permita que las elecciones se celebren el 18-D en vez del día de Navidad no solo ha calado en las filas del PSOE o de Podemos. En el propio PP, pesos pesados de la formación se han pronunciado de manera favorable. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, se ha mostrado partidaria de "acortarla por ley y para siempre, no porque a un partido le venga bien o mal o se sienta presionado". Además, ha pedido que en esa reforma se recorten legalmente también los gastos de las campañas.
Para el PP, la prioridad es la investidura y censura, en referencia al PSOE, que haya partidos que estén pensando en las terceras elecciones. A pesar de ello, el vicesecretario general de Organización y diputado popular Fernando Martínez-Maillo, ha explicado que, "cuando llegue el momento", y si finalmente se produce esa propuesta, "entonces hablaremos". Un sentir que comparten la mayoría de grupos parlamentarios, que rechazan el hecho de que haya que acudir a las urnas, de celebrarse unas hipotéticas terceras elecciones, el día de Navidad.
👉 @ccifuentes plantea acortar "para siempre" las campañas electorales. https://t.co/oDV4N4aLTB
— Cifuentes Presidenta (@cifupresidenta) 25 de agosto de 2016
Las lagunas planteadas durante los últimos días a la pretendida reforma exprés de la ley electoral, tanto por el escaso margen temporal para sacarla adelante como por el necesario respaldo mayoritario de la Cámara, no han echado atrás al PSOE. El portavoz en el Senado, Óscar López, insistía este jueves que es "de sentido común" y "razonable" que su partido estudie fórmulas para "enmendar la chapuza o la burrada que ha hecho Rajoy" y permitir que los comicios se celebren una semana antes de Navidad.
Para el dirigente socialista, el calendario marcado por la presidenta del Congreso, Ana Pastor, es una "herramienta de presión" al resto de formaciones políticas para que apoyen la investidura del candidato popular. Un argumentario al que también ha recurrido el portavoz parlamentario de Unidos Podemos, Íñigo Errejón, al considerar como una "amenaza" y una forma "de chantajear al resto de formaciones" el dilema de que o se apoya a Mariano Rajoy o se acude a votar en esta señalada fecha.
La oposición de Unidos Podemos a que se "trampeen los tiempos institucionales" tampoco impide a la formación emergente remarcar que su prioridad es agotar todas las posibilidades para que se forme un Gobierno de progreso. Coinciden con el PSOE en que ahora es el tiempo de Rajoy, pero que si fracasa, como todo apunta, debe abrirse una alternativa. Desde Ferraz se niegan, al menos de momento, a explorar esta vía, por lo que Errejón ha emplazado a Pedro Sánchez a que se decida. "Si el PSOE no quiere que haya que votar el 25 de diciembre, la forma más efectiva es que si Rajoy fracasa, intente un Gobierno alternativo", zanjó el dirigente de Podemos.
"Hablamos muy frecuentemente"
Las relaciones entre Unidos Podemos y el PSOE siguen con sus característicos altibajos. Si este miércoles se enfrentaban públicamente Rafael Simancas y Rafael Mayoral, pues el primero afirmó que la formación emergente "no tiene credibilidad" y el segundo le contestó que hiciese "examen de conciencia", al día siguiente Errejón volvió a recuperar la manida expresión durante la última campaña electoral de "mano tendida".
El portavoz de Unidos Podemos ha asegurado que "hablamos muy frecuentemente" y que la comunicación entre ambas formaciones nunca ha llegado a romperse. Estas afirmaciones chocan con el desmentido de los socialistas a Pablo Iglesias la pasada semana, cuando explicó que había hablado con Pedro Sánchez y que ambos habían coincidido en la necesidad de abrir un diálogo en caso de que el candidato popular fracase. Horas después, el PSOE emitía un contundente comunicado: "En ningún caso, el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha abordado con ninguna otra formación política la negociación para la formación de un Gobierno alternativo ante el hipotético fracaso del señor Rajoy".
Menos contundente respecto a la maniobra para adelantar la hipotética repetición electoral ha sido la diputada del PSOE y vicepresidenta segunda del Congreso, Micaela Navarro. Para la socialista, todavía "no toca" presentar una reforma que evite la celebración de unos comicios el día de Navidad si la investidura falla, puesto que "el PSOE quiere que se forme Gobierno". En unos términos similares se ha manifestado el secretario tercero de la Mesa, el también socialista Juan Luis Gordo, quien ha dicho "no contemplar" el escenario de unas terceras elecciones y que, por tanto, "no estamos en el tiempo" de plantear una reforma de esas características.
El mero planteamiento de esta posible reforma da oxígeno a un Pedro Sánchez acuciado por las presión de cara a la investidura para evitar que recaiga sobre su persona toda la responsabilidad de que las urnas se vuelvan a abrir y lo hagan con el añadido de hacerlo un 25 de diciembre. Mientras tanto, sigue sorteando la presión del flanco conservador para que se abstenga y del progresista para que dé un paso al frente e intente una alternativa a Rajoy.
Unidos Podemos ha recogido el guante lanzado por el PSOE para evitar que, en el caso de repetirse las elecciones, tengan que celebrarse el día de Navidad. La prioridad de la formación que lidera Pablo Iglesias pasa por buscar una alternativa de gobierno junto a los socialistas si se consuma el fracaso de Mariano Rajoy en lainvestidura, pero están dispuestos a apoyar una reforma que reduzca la campaña electoral de las dos semanas actuales a una y que, por tanto, permita adelantar al 18 de diciembre una hipotética repetición electoral.