Sánchez ya se ve en La Moncloa y abre la puerta a dar la Vicepresidencia a Iglesias

Pedro Sánchez mueve ficha tras su investidura fallida. El secretario general del PSOE apuesta por un Gobierno de coalición argumentando que el PSOE, con 90 diputados, "no tiene la fuerza suficiente como para tener un Gobierno monocolor" y sin cerrar la puerta a que el líder de Podemos, Pablo Iglesias, sea su vicepresidente.

En declaraciones a 'Las mañanas de Cuatro', Sánchez no descarta esta "formulación" ni un giro a la izquierda tras la firma de un acuerdo con Ciudadanos. De esta manera, el socialista ha recalcado que "nunca" se ha "cerrado" a los gobiernos de coalición, sobre todo cuando los españoles "han querido" que el PSOE no gobierne en solitario a través de su voto el 20-D. "No me cierro a ninguna formulación", ha afirmado, sin aclarar quién cree que puede ser su socio de gobierno, pero sin rechazar, en ningún momento, que Iglesias sea la opción elegida y sin descartar más de una Vicepresidencia para tener en cuenta a Ciudadanos.

Ante esto, Ciudadanos, a través de sus secretario de Comunicación, Fernando de Páramo, ha advertido a los socialistas de que en el acuerdo que ambas formaciones han firmado "es imposible" que entre Podemos.

"La potestad la tengo yo"

De ser así, Sánchez cumplirá con la primera exigencia de Iglesias, que tras su primera reunión con el Rey el pasado 22 de enero pidió este cargo como garantía de un Gobierno del cambio, pero deja muy claro que será él quien elija quién le acompaña en el Gobierno. "El presidente es quien decide el organigrama de ese Gobierno", ha dicho, insistiendo en que "la potestad la tengo yo" y que no aceptará chantajes desde Podemos ni líneas rojas como la petición de Podemos de "controlar el CNI, el CIS, RTVE y la Vicepresidencia".

En esta línea, ha destacado que quien ha "perdido el tiempo" es Pablo Iglesias "con sus vetos", que Albert Rivera "nunca me ha hablado de sillones" y que no está dispuesto a romper el acuerdo que firmó con Ciudadanos, ya que el objetivo principal es "sacar España adelante". Aun así, y dispuesto a abrir la puerta a Podemos, Sánchez ha insistido en que quiere "llegar a un acuerdo con Podemos a pesar de que hablen de cal viva y voten como el PP y Bildu". "Tenemos que ver la formulación, los contenidos y las políticas", ha destacado, desvelando que el futuro Gobierno será "paritario", con "independientes de prestigio" y "transversal" para que represente al centro derecha y a la izquierda.

No se reunirá con Mariano Rajoy

A la espera de recibir la llamada de Mariano Rajoy que él mismo prometió esta semana, Sánchez ha dejado claro que no se sentará "en ningún caso" con él para negociar. "De eso se encargan los equipos negociadores", ha sentenciado, para recordar al presidente del Gobierno en funciones que ha tenido "20 meses" para hablar con él "y me ha hecho muy poco caso".

Muy seguro de que será presidente del Gobierno en las próximas semanas, Sánchez ya se ve en La Moncloa y augura que "no va a haber elecciones", siempre y cuando Pablo Iglesias recapacite. "Estoy convencido", ha dicho. Además, ha defendido los acuerdos en política y ha recalcado que "se puede llegar a territorios comunes" entre diferentes formaciones "sin traicionar" los principios de cada uno, defendiendo, en este punto, lo que el PSOE ha hecho en su pacto con la formación de Albert Rivera.

Estas declaraciones de Sánchez llegan apenas 24 horas después de que el PSOE advirtiera a Podemos de que no negociaría sin Ciudadanos, una vez que la formación morada exigiera a los socialistas que rompieran cualquier acuerdo con ellos antes de sentarse a negociar. De hecho, Podemos ha cancelado la reunión de la mesa a cuatro que había convocado para este miércoles y que pretendía retomar las conversaciones entre ellos, PSOE, Compromís e Izquierda Unida, ya que los socialistas se negaron a sentarse ante el veto a Ciudadanos.

Compromís sí se sentará con PSOE y C's

Las exigencias de Podemos tampoco gustan a sus socio de Compromís. Su portavoz en el Congreso, Joan Baldoví, ha criticado la decisión de Pablo Iglesias e Íñigo Errejón de suspender la reunión alegando que "con un 'no' no se llega a ningún sitio" y señalando que su equipo negociador había viajado precisamente a Madrid para acudir a este encuentro.

Sobre el rechazo frontal de Podemos a sentarse con el PSOE si mantiene su acuerdo con Ciudadanos, Baldoví ha dejado claro que sí se sentará con ambas formaciones. "A donde se nos convoque, iremos, aunque sea para decirles lo que pensamos", ha advertido.