Es noticia
Rajoy ordena movilizarse a sus ministros y al partido para extremar la presión al PSOE
  1. Elecciones Generales
hacia una gran coalición o empezar la campaña

Rajoy ordena movilizarse a sus ministros y al partido para extremar la presión al PSOE

Después del fracaso de Sánchez, el jefe del Ejecutivo en funciones intentará recuperar la iniciativa a favor de 'su' Gobierno constitucionalista con llamadas al socialista y a Rivera

Foto: El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy. (Reuters)
El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy. (Reuters)

Después del fracaso de Pedro Sánchez en su intento de ser investido jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy intenta recuperar la iniciativa política con una mayor presencia pública personal, de sus ministros y de los dirigentes del PP. El primer objetivo del presidente de los populares es aumentar la presión sobre el PSOE con el fin de que acceda a la formación de un Gobierno constitucionalista y, en última instancia, engrasar los mecanismos y los mensajes de su formación ante una previsible repetición de elecciones el 26 de junio.

El pleno de la investidura del secretario general de los socialistas, el primero fallido que conoce el Congreso desde 1978, ha confirmado tanto el afán de Pablo Iglesias por culminar la ocupación del espacio político de la izquierda a costa del PSOE, como la pretensión de Albert Rivera de conseguir la retirada de Rajoy. Los jefes de las nuevas formaciones lo han planteado con tal crudeza durante su estreno en la tribuna del Congreso que en los dos grupos mayoritarios predomina la idea de que cualquier pacto de gobierno es aún más difícil que el 20-D.

La aportación de Sánchez a la situación de bloqueo previo consiste en que ya han empezado a correr los tiempos que fija la Constitución, los dos meses tasados para que los partidos se pongan de acuerdo para investir a un nuevo jefe del Ejecutivo antes de tener que volver a las urnas. En el PP han pasado el trago de quedarse como actor secundario durante el mes que el dirigente socialista se tomó para buscar una mayoría que apenas pasa de un tercio de la Cámara, 130 escaños. Ahora parecen más animados después de la intervención de su jefe en el pleno, a la contra en papel de opositor, pero irónico y mordaz. Dicen que fue "el auténtico Rajoy", parlamentario brillante y ocurrente cuando se sale de la política económica.

Quedan por delante dos meses de actividad parlamentaria teórica, hay que buscar contenido y abrir conversaciones con los demás grupos pese al rechazo generalizado a los populares. Rajoy prefirió que primero fracasara el aspirante del PSOE porque él no tenía apoyos y los acontecimientos posteriores, el acuerdo de Sánchez y Rivera, dicen en fuentes gubernamentales que le han dado la razón: no podía contar ni con Ciudadanos para ir a su investidura porque el plan de Rivera y los sectores económicos que le apoyan es el mismo de la última campaña electoral, lograr la salida del presidente del Gobierno a cualquier precio.

En el Partido Popular consideran que queda claro el cierre de filas con su jefe y que es el PSOE el partido que debe aclararse a partir de ahora sobre si el "no es no" a hablar con ellos de su secretario general se mantiene hasta el final, aunque lleve a la repetición de elecciones. La exigencia de Rivera de que se vaya Rajoy les importa menos, solo sorprendió la claridad con que lo dijo en el debate. En medios del Grupo Popular, dan por hecho que la próxima semana empezarán los contactos con Ciudadanos, y dirigentes de la formación naranja aclararon que siguen dispuestos a buscar acuerdos con el PP aunque el presidente del Gobierno en funciones siga en todos sus cargos.

Crónica de una investidura fallida anunciada

De momento, los dirigentes populares se aprovecharán de que el socialista Sánchez sea el candidato oficial de Rivera a jefe del Ejecutivo, un apoyo que en el PP consideran que desconcertará a buena parte de los votantes de la formación 'centrista' que proceden de sus propias bases electorales. Luego llegarán las llamadas pertinentes para insistir en la necesidad de explorar los cinco pactos de Estado propuestos en su día por Rajoy para levantar un Gobierno constitucionalista que evite nuevos comicios, sostenga la recuperación económica y lleve adelante las grandes reformas institucionales pendientes.

El plan de Rajoy consiste en 'reactivar' al Gobierno en defensa de esas ideas. Los ministros en funciones han recibido la instrucción de volver a la palestra y acudir a todos los medios de comunicación con cualquier pretexto. El objetivo es recuperar la iniciativa y dar imagen de equipo, de solvencia y estabilidad política, después del fiasco de Sánchez y el posible intento del dirigente socialista de volver a negociar con Podemos y el resto de la izquierda para buscar una alternativa 'progresista' al acuerdo con Ciudadanos.

Moragas y Serrano sí toman café

Rajoy arrancará esa ofensiva este fin de semana en un acto de partido, en principio en Salamanca, para volver a la carga con su idea de gran coalición, pese a que hasta Rivera parezca apuntado al 'frente anti-PP' de la izquierda, los nacionalistas y los independentistas. El jefe del Ejecutivo viaja el lunes a Bruselas para asistir al Consejo Europeo, donde se abordará el problema de los refugiados y las consecuencias de la guerra de Siria, una cita que le devuelve protagonismo internacional.

Pese a la aparente ruptura total de relaciones con el PSOE, el jefe de gabinete de la Presidencia, Jorge Moragas, y José Enrique Serrano, uno de los principales 'negociadores' de Sánchez y exjefe de gabinete de Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero, ya han intercambiado información. Lo hicieron en pleno debate y con café de por medio, algo que Rajoy no consiguió el día 23 de diciembre pasado cuando invitó a Sánchez a La Moncloa para acercar posiciones.

Después del fracaso de Pedro Sánchez en su intento de ser investido jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy intenta recuperar la iniciativa política con una mayor presencia pública personal, de sus ministros y de los dirigentes del PP. El primer objetivo del presidente de los populares es aumentar la presión sobre el PSOE con el fin de que acceda a la formación de un Gobierno constitucionalista y, en última instancia, engrasar los mecanismos y los mensajes de su formación ante una previsible repetición de elecciones el 26 de junio.

Mariano Rajoy Campañas electorales Ciudadanos Pedro Sánchez
El redactor recomienda