Duro enfrentamiento entre Rivera e Iglesias a la caza del voto universitario

La expectación era máxima y los protagonistas no defraudaron. Recibidos como si de estrellas de cine se tratasen, Albert Rivera, líder de Ciudadanos, y Pablo Iglesias, secretario general de Podemos, protagonizaron en la Universidad Carlos III el primer debate entre ambos candidatos, un encuentro que Iglesias tildó de “histórico” y en el que faltaron Mariano Rajoy y Pedro Sánchez, quienes a pesar de estar invitados, declinaron asistir al debate. Otros partidos que sí cuentan con representación parlamentaria como UPyD e IU no fueron invitados. “Sólo hemos llamado a los cuatro principales partidos en las encuestas”, explican desde Demos, la asociación que ha organizado el encuentro. El debate electoral ha estado vertebrado en torno a cuatro grandes temas: educación, sanidad, economía y regeneración democrática.

El encuentro contó con el periodista Carlos Alsina como maestro de ceremonias, quien no dudo en recordar las sonadas ausencias de los candidatos del PP y del PSOE. “Cuando vean el éxito de convocatoria se van a arrepentir”, señaló. Pese a que el debate ha comenzado pasadas las 12:30, más de 150 personas han hecho cola desde las 8 de la mañana para intentar conseguir un sitio. "Este debate es importante para nosotros", explica una estudiante especialmente madrugadora.

El encargado de abrir el debate, previo sorteo, fue Albert Rivera. El candidato naranja comenzó su discurso señalando la “necesidad” de crear “un nuevo proyecto común” entre todos los ciudadanos. “No es cuestión de quitar simplemente al PP y al PSOE, tenemos que hacer más”, explicó.

Enfundado en una camisa blanca al igual que el líder de Ciudadanos, Pablo Iglesias comenzó su intervención dando las gracias a “los y las” estudiantes presentes en el auditorio. Con un tono mucho más beligerante, el líder de Podemos criticó con dureza la politización de la justicia o la corrupción que gangrena los partidos políticos tradicionales. Igualmente, no pasó de puntillas por temas espinosos como los ataques a Siria o la actualidad internacional. “Los bombardeos no son la solución. Hay que acabar con los financiadores del terrorismo como Arabia Saudí”, afirmó Iglesias ante un público entregado.

Aumento del gasto público, mayor recaudación y políticas activas para combatir el fraude son algunas de las líneas maestras que desgranó Iglesias y que ya publicó El Confidencial. Respecto a Rivera, el líder de Ciudadanos tejió un discurso con apelaciones directas a los estudiantes, los autónomos y “las clases medias trabajadoras”, esas que, según el líder catalán, han sido las más perjudicadas por la crisis económica

Más que un debate, el encuentro entre ambos candidatos se convirtió en una atropellada catarata de promesas y medidas electorales en las que los dos se interrumpieron mutuamente para explicar sus propuestas. “No te pongas nervioso y no me interrumpas”, le espetó Iglesias a Rivera en más de una ocasión.

El debate contó con un turno de preguntas de los asistentes. Más allá de becas y medidas universitarias, los estudiantes también se interesaron por conocer en profundidad las propuestas fiscales de ambos partidos, la reforma electoral o la posibilidad de suprimir el Senado. En el plano internacional, Rivera e Iglesias coinciden en que no hay que criminalizar a los refugiados de Siria: "No son terroristas, y si se cuela alguno, es responsabilidad del Ministerio de Interior controlarlo", señaló el líder de Ciudadanos.

A raíz de la polémica eliminación de la filosofía de las aulas, un asistente pidió a ambos líderes que recomendasen un libro de la materia que les gustase. Iglesias no dudó:"Crítica -aunque dijo "ética"-de la razón pura" de Kant frente a un Rivera que fue incapaz de citar un título."Kant es un referente político y filosófico pero no me he leído nada suyo".

Como conclusión final, ambos dirigentes pidieron a los jóvenes su apoyo el próximo 20-D con estudiadas frasescomo "vosotros sois los protagonistas de esta nueva etapa" o "cuento con vosotros". No se equivocan: la demoscopia es clara y las papeletas de Podemos y Ciudadanos serán las que los jóvenes mirarán con especial interés el día de las elecciones.

La educación, eje central del debate

Los candidatos eran conscientes de dónde estaban y no fue baladí la importancia que Rivera e Iglesias concedieron a la educación. Ambos coincidieron en la necesidad de lograr un pacto nacional en la materia y abogaron por bajar las tasas universitarias. El líder de Ciudadanos dio un paso más y afirmó que “lo nuestro es un programa de Educación" porque "es la base para cambiar las cosas".

Durante el debate se repitieron algunas medidas que ambas formaciones ya habían anunciado con anterioridad como la derogación de la LOMCE o la creación de un MIR de profesores. Ambos candidatos se tuvieron que enfrentar a preguntas inesperadas como la posibilidad de estudiar en bable –lengua regional asturiana-, cuestión que resolvieron con la "necesidad" de proteger todas las lenguas del territorio nacional.

“Ir con Bildu no es forma de luchar contra el terrorismo”

La crisis humanitaria de los refugiados y la guerra en Siria facilitaron que el terrorismo se hiciese un hueco en el debate. “Ir con Bildu en las listas no es una forma de acabar con el terrorismo, Pablo”, afirmó el líder de Ciudadanos. Iglesias respondió al líder naranja recordando la ocasión en la que Ciudadanos fue con Libertas, un partido de ultraderecha, a las elecciones europeas de 2009, un error que Rivera siempre ha calificado como “catastrófico”.