Es noticia
Malestar entre los barones con Sánchez por no haber sido prevenidos de su cita con Rajoy
  1. Elecciones Generales
TRAS LA PRESENTACIÓN DE LA PROPUESTA DE REFORMA CONSTITUCIONAL

Malestar entre los barones con Sánchez por no haber sido prevenidos de su cita con Rajoy

En el partido algunos dirigentes se duelen por no haber recibido información previa del secretario general. Este les llamó posteriormente para comentarles los detalles de su encuentro en La Moncloa

Foto: Foto de familia de Pedro Sánchez con sus barones en la escalinata del Congreso tras la presentación de la propuesta de reforma constitucional del PSOE, este 28 de octubre. (EFE)
Foto de familia de Pedro Sánchez con sus barones en la escalinata del Congreso tras la presentación de la propuesta de reforma constitucional del PSOE, este 28 de octubre. (EFE)

La foto de familia en la escalinata del Congreso se deshizo y el grupo de barones socialistas se fue despidiendo, poco a poco. La andaluza Susana Díaz y el catalán Miquel Iceta sí aguantaron algo más para hacer declaraciones a los medios. Pedro Sánchez marchó antes. Luego se supo dónde: a su almuerzo en el palacio de La Moncloa con Mariano Rajoy. Un encuentro del que su gabinete no había informado, ni él se lo había confiado, al menos, a los secretarios autonómicos de mayor peso. Una falta de información que a algunos dolió, porque consideraban que el líder y candidato tendría que haberles prevenido. Sánchez, no obstante, sí habló con todos los jefes territoriales a posteriori, para darles cuenta de su entrevista con el presidente del Gobierno.

Pocos detalles han trascendido de ese encuentro, el cuarto que Rajoy y Sánchez mantienen en la residencia presidencial desde el ascenso del primero a la cúspide del PSOE, en julio de 2014. Tanto Ferraz como La Moncloa emitieron dos comunicados idénticos, de apenas dos párrafos. Ambos líderes habían "acordado trabajar coordinadamente en defensa de la Constitución, la unidad nacional, la soberanía nacional y la igualdad de los españoles". Eran las cinco de la tarde. Los medios conocían la noticia al tiempo que muchos de los barones con los que Sánchez había estado prácticamente toda la mañana, en la reunión del Consejo de Política Federal, que preside Díaz, encargado de alumbrar este miércoles la propuesta definitiva de reforma constitucional, y en el acto posterior de presentación pública del documento. Aparte de la foto de familia.

En algunos barones cundió la sorpresa y un cierto malestar, aunque todos actuaban desde la cautela, para no incendiar el patio socialista a dos meses de las generales y en una cuestión tan delicada como el desafío soberanista, agravado tras el registro de la resolución de Junts pel Sí y la CUP. Resolución que, cuando se apruebe -aún no hay fecha-, sancionará el inicio del camino de la escisión con España. O eso quieren los independentistas.

Sánchez ya tomó la "iniciativa"

"No lo sabíamos ninguno de los barones. O al menos, ninguno de los presidentes autonómicos. Ninguno. Allá Pedro. Pero no quedamos mal todos, queda mal él por no informar a sus secretarios autonómicos", señala uno de los siete presidentes socialistas, y de los más poderosos. Falta de información que recriminaban, en términos semejantes, otros compañeros, que pedían refugiarse en el anonimato. En el partido se recuerda que Alfredo Pérez Rubalcaba confiaba a sus barones en ocasiones temas espinosos o que no podían trascender, y se reprocha por contraposición a Sánchez que actúe sin informar previamente de sus pasos. "No es momento de andar con estas cosas a hurtadillas. O te reúnes de verdad y convocas a la prensa o lo haces de forma discreta y no dices nada, pero no distribuyes un pequeño comunicado en el que todo son lugares comunes y distribuyes una foto", indicaban por su parte fuentes próximas a la baronesa andaluza, críticas a su vez con el proceder de Rajoy.

“No lo sabíamos ninguno de los barones. O al menos, ninguno de los presidentes. Ninguno. Allá Pedro“, se quejaba un jefe de un Ejecutivo regional

Desde el entorno del secretario general, en cambio, se defendía que ya Sánchez había "tomado la iniciativa" el martes, nada más conocerse el registro de la propuesta de JxS y la CUP, pues llamó a Rajoy y quedaron en mantener una "vía directa de diálogo". Y además, recalcaban, el presidente ya había advertido en la Ser, el miércoles por la mañana, de que convocaría en La Moncloa a los líderes del PSOE y de Ciudadanos, siempre informando a posteriori de la cita. Un miembro de la dirección que asistió al Consejo de Política Federal, con todos los barones, reconocía que Sánchez no había anticipado su entrevista con Rajoy, pero sí "se valoró de forma muy positiva que le telefonease". "Es verdad que el formato es raro pero da igual. Discreción no es secretismo", indicaba esta fuente, muy próxima al líder.

En cualquier caso, Sánchez sí llamó posteriormente a "todos" sus barones para darles cuenta de su cita en La Moncloa. Incluida Susana Díaz. "Lo hizo no para calmarles, sino porque es su obligación, y como siempre hace. Y todos le contestaron en la misma línea. Que respaldaban ese trabajo coordinado en las cuatro cosas: defensa de la Constitución, de la unidad de España, de la soberanía nacional y de la igualdad de los españoles. Todos apoyan esto, claro", sostenían desde Ferraz. En la dirección subrayan que la actuación coordinada con el Gobierno se refiere a la respuesta inmediata al desafío soberanista, pero no a la "solución", porque para los socialistas es la reforma de la Carta Magna, un melón que Rajoy no está dispuesto a abrir ahora, como ha afirmado reiteradamente.

En el partido también se oyen quejas por el "batiburrillo de fotos" de este miércoles, porque el secretario general, creen, no consiguió centrar la atención en una instantánea: "¿Con qué nos quedamos, con la foto de los presidentes, con la de Rajoy, con la presentación de la reforma?". En Ferraz rebaten ese argumento: la actualidad es la que manda y lo que se demuestra, arguyen, es que "Pedro actúa ante los desafíos".

Presentación "deslucida"

En la reunión del Consejo de Política Federal también se oyeron "lamentos" por que quedase "deslucida" la puesta de largo de la propuesta de remodelación de la Carta Magna, porque se sabía de antemano que la agenda la marcaba Cataluña. Otros elevan el tono y hablan de disconformidad con la decisión de Sánchez de mantener sus planes intactos. "Sí hubo intervenciones en el sentido de que la situación en Cataluña restaría protagonismo a la reforma, pero no críticas directas. Hoy [por este miércoles] todo el mundo sabía a lo que venía. Todo el mundo entendía que era compatible fijar posición sobre Cataluña y presentar la reforma, que son cuestiones con puntos de conexión evidentes", indican fuentes próximas al primer secretario del PSC, Miquel Iceta. "Los independentistas no van a marcar la agenda del PSOE", coincidían desde el círculo de Sánchez.

Díaz fijó públicamente su posición en declaraciones a los medios. Y con ella intentó marcar el paso del partido. Primero, aplicar la ley, dijo, y después, diálogo. Pidió a Rajoy expresamente que convocara a "todas" las fuerzas políticas, a "todos los demócratas" para responder a Artur Mas y la CUP. Los colaboradores de la presidenta andaluza decían este miércoles que la reunión del jefe del Ejecutivo y Sánchez no desvirtuaba ni desmontaba su reclamación, porque ella sigue creyendo que es la solución, y que hace falta una "política de altura", y de que se trata de "sumar aliados" al bando constitucionalista, incluido Podemos, IU o UPyD. "Si Pablo Iglesias suscribe la declaración soberanista, vale, entonces habrá que decir que él se sale de la Constitución y se pone con los del disparate. Pero si no es así, habrá que sumarle", explican fuentes próximas a Díaz.

En Ferraz defienden que todos los barones compartieron la posición del líder después de que les telefoneara para hablarles de la entrevista

"Lo que dijo Susana no choca ni molesta. Pero Pedro no va a decirle al presidente con quién se tiene que reunir. Lo que creemos imprescindible es que debe reunirse. Lo que consideramos que tiene que hacer ya lo hemos dicho, aparte de que hemos reiterado que en cuatro años no ha hecho nada y ha dejado pudrir este asunto", oponen desde el lado del secretario general.

La dirección cree que ha de actuar de forma coordinada con el partido hermano, con el PSC. De modo que la prioridad es procurar que no se debata la propuesta de Junts pel Sí y la CUP, y si es así, entonces acudir al TC, "y que se atengan [los soberanistas] a las consecuencias", observa una responsable de la confianza de Iceta. En Ferraz creen que tampoco es positiva la "sobreactuación o teatralización", y por eso consideran "muy potente" la declaración de Sánchez de ayer, en la que tachó de hecho "gravísimo" la iniciativa soberanista, una "provocación antidemocrática", pero advirtió de que "con la ley no basta". El camino es la política, expresó, y la solución ha de venir por la reforma constitucional.

En el PSOE son conscientes de que la tensión en Cataluña puede beneficiar más al PP en las urnas. "Pero Pedro toma la iniciativa y tiene una responsabilidad de Estado brutal. Otros actuarían mirando los resultados electorales. Pero él nunca ha hecho política con la calculadora. Prioriza los intereses del país", justifican en la sede federal, recordando que también hubo polémica con otra foto con Rajoy a muy pocas semanas de otros comicios. Fue en febrero, un mes antes de las andaluzas y tres antes de las autonómicas y municipales, y con ocasión de la firma del pacto antiterrorista.

La foto de familia en la escalinata del Congreso se deshizo y el grupo de barones socialistas se fue despidiendo, poco a poco. La andaluza Susana Díaz y el catalán Miquel Iceta sí aguantaron algo más para hacer declaraciones a los medios. Pedro Sánchez marchó antes. Luego se supo dónde: a su almuerzo en el palacio de La Moncloa con Mariano Rajoy. Un encuentro del que su gabinete no había informado, ni él se lo había confiado, al menos, a los secretarios autonómicos de mayor peso. Una falta de información que a algunos dolió, porque consideraban que el líder y candidato tendría que haberles prevenido. Sánchez, no obstante, sí habló con todos los jefes territoriales a posteriori, para darles cuenta de su entrevista con el presidente del Gobierno.

Pedro Sánchez Susana Díaz Mariano Rajoy Miquel Iceta Alfredo Pérez Rubalcaba Nacionalismo Ciudadanos Moncloa PSC Constitución Reformas
El redactor recomienda