El PP reparte papeles en su conferencia entre los barones y deja "los valores" para Aguirre

La dirección del PP ha hecho equilibrios para dar un papel a todos los barones del partido y a la mayoría de los ministros en su conferencia política que arranca este viernes en Madrid. A la vez que ensaya un nuevo modelo de debate abierto a la sociedad sobre los principales problemas de España, respeta las jerarquías internas con la excepción de Cristina Cifuentes, que queda por encima encargada de coordinar el foro sobre las reformas de Mariano Rajoy. Esperanza Aguirre se podrá explayar sobre su tema favorito, “la defensa de los valores”, pero “los que unen a Europa”.

Además de María Dolores de Cospedal, todos los presidentes regionales del PP, en el poder o no y con la única excepción del balear José Ramón Bauzá, que dejará la próxima semana su cargo, intervendrán en los distintos foros de la conferencia política junto con los ministros y los principales dirigentes del partido, hasta 40. Cuentan con el mismo tiempo para exponer sus ideas sobre el asunto asignado, sin papeles y con un reloj que les marcará el límite de los 5 minutos. Luego llegará el turno a los asistentes (1.200 en total) que pidan hablar y les dé tiempo para hacerlo.

Entre los barones, destaca la presencia del presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, que se ocupará del “emprendimiento” y el empleo con Juan Vicente Herrera y Fátima Báñez; la participación de Alberto Fabra en el foro sobre el reformismo y la vertebración de España con Ana Pastor o el papel de Aguirre en el debate sobre “El futuro de España es la Unión Europea”.

En el bloque dedicado a las políticas sociales estarán José Antonio Monago y el ministro de Sanidad,Alfonso Alonso. El capítulo sobre la familia, y donde puede salir el asunto de la renuncia a la reforma de la ley del aborto, queda para la presidenta del PP en Asturias, Mercedes Fernández. Del marco competencial autonómico se encargará Luisa Fernanda Rudi.

Los debates sobre la defensa de la Constitución, la democratización interna de los partidos, la reforma de la ley electoral para que presidan las instituciones el partido más votado o “la necesaria reforma del Senado” serán abiertos por la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría; los presidentes del PP en Cataluña y Andalucía (Alicia Sánchez-Camacho y Juan Manuel Moreno) y el portavoz adjunto del Grupo Popular en el Congreso José Antonio Bermúdez de Castro.

La dirección del PP reconoce que hay que mejorar la democracia interna del partido y abrirlo a la sociedad, pero sigue sin ver bien la apuesta de otras organizaciones por un sistema de primarias que consideran “tramposo” o “de quita y pon” como los del PSOE, Podemos o Ciudadanos, porque luego se dirigen desde arriba o se anulan cuando no conviene al jefe. Así lo califica el secretario de organización, Fernando Martínez-Maíllo, después de las ironías de Rajoy al respecto.

La conferencia política no es un congreso, ni siquiera una convención. Lo que quieren en la sede de Génova es darse un baño de propuestas e ideas que aplicar a su próximo programa electoral y crear un marco para que Mariano Rajoy haga anuncios de reconciliación con las clases medias y los votantes que les han dado la espalda en los comicios europeos de 2014, las elecciones andaluzas de marzo pasado y las locales y autonómicas de mayo.