La X de la Iglesia o la casilla de interés social: a dónde va parte de tu declaración de la renta

Si bien la duda inicial en las campañas de la renta suele ser si uno está o no obligado a presentar la declaración de la renta, este periodo genera muchas dudas en torno a muchos conceptos. Uno de ellos es el de la asignación tributaria: se trata de una parte de la cuota íntegra de la declaración cuyo destino se puede elegir. La asignación tributaria corresponde a un 0,7% e independientemente de lo que se elija, no varía la cuantía final del impuesto que se paga o de la devolución a la que se tenga derecho.

[Declaración de la renta, de la A a la Z]

Existen dos opciones en la declaración de la renta entre las que escoger como destino de esta asignación tributaria:

1. La X de la Iglesia: en caso de optar por esta opción, si se marca la casilla de Asignación a la Iglesia Católica se destina un 0,7% de la cuota íntegra del IRPF correspondiente a esta institución. Para 2019, la Conferencia Episcopal ha invertido 3,4 millones de euros en la campaña para convencer a los españoles que marquen su casilla y destinen una parte de su IRPF a su "labor social y evangelizadora". En la campaña de 2018 la Iglesia recaudó un total de 267,8 millones de euros, un 4,4% más que el año anteior, la cifra más alta que había registrado desde el comienzo del sistema de asignación tributaria actual, que entró en vigor en 2007.

2. La X para actividades con fines de interés social: la otra opción es la de destinar el 0,7% de la cuota íntegra del IRPF a actividades de interés general consideradas de interés social, que según la legislación engloban actividades que van desde la atención a personas con necesidades de atención integral socio-sanitaria o necesidades educativas o de inserción laboral, al fomento de la seguridad ciudadana o prevención de la delincuencia, a la protección del medio ambiente y la cooperación al desarrollo.

¿Hay que elegir una?

Es importante recordar que son opciones, y que nadie está obligado a marcar una u otra casilla. Las posibilidades son varias, desde marcar solo una de las dos, a marcar ambas o no marcar ninguna. En el primer caso, se destina el 0,7% de la cuota del IRPF a la opción elegida, ya sea la Iglesia o para actividades de interés social. En el caso de marcar ambas casillas, se destina un 0,7% a cada una de las opciones, por lo que la asignación tributaria asciende a un 1,4% de la cuota.

Si se opta por no marcar ninguna de las dos casillas, este 0,7% de la cuota íntegra del IRPF irá destinado a los Presupuestos Generales del Estado, con destino a fines generales. Por norma, si no es la primera vez que se elabora la declaración de la renta, el sistema atribuirá de manera automática al contribuyente la opción elegida en la declaración del ejercicio anterior, si bien esta opción puede modificarse en el mismo borrador de la declaración.