Víctor Arpa, abogado laboralista, sobre los despidos durante una baja médica: "Esto no es solo una injusticia, es discriminación por enfermedad"

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El despido durante una baja médica sigue siendo una de las situaciones más controvertidas en el ámbito laboral. Muchos trabajadores desconocen qué derechos los amparan cuando atraviesan un proceso de incapacidad temporal, especialmente tras sufrir un accidente o una enfermedad grave. El abogado laboralista Víctor Arpa ha explicado un reciente caso que pone de manifiesto esta problemática, subrayando la importancia de conocer la legislación vigente y los mecanismos de defensa que ofrece el Estatuto de los Trabajadores.

“Acabo de salir del juzgado tras defender a un trabajador que fue despedido por su baja médica tras un accidente laboral”, relató el letrado. Su cliente, según detalla, “sufrió un accidente laboral grave con fracturas vertebrales y estuvo de baja médica durante casi ocho meses”. Sin embargo, cuando intentó reincorporarse, “el mismo día en que intenta volver, su jefe le dice que aún no está recuperado”. La reacción de la empresa, según explica Arpa, fue tajante: “Despedirlo. Y lo peor, en la misma carta de despido ya reconocen que es improcedente, lo que no beneficia nada a la empresa, puesto que delata que no había ninguna justificación”.

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El abogado considera que esta práctica va más allá de una irregularidad administrativa. “Esto no es solo una injusticia, es discriminación por enfermedad”, afirma. Por ello, ha solicitado que el despido no se califique únicamente como improcedente, sino como nulo, al entender que vulnera derechos fundamentales. “Hemos pedido que este despido no se quede en improcedente, sino que sea nulo, porque vulnera derechos fundamentales”, insiste.

Arpa recuerda además que, si una empresa despide a un trabajador durante su baja o inmediatamente después de reincorporarse, “existen mecanismos legales para defenderte”. En este sentido, aclara que la legislación española es clara: despedir a una persona por encontrarse de baja médica es ilegal y puede ser sancionado judicialmente.

El Real Decreto-ley 4/2020 eliminó expresamente la posibilidad de despedir a un trabajador por ausencias justificadas, incluidas las derivadas de enfermedad. De esta forma, un despido basado en una baja médica puede ser declarado nulo o improcedente, según lo establecido en el artículo 55.5 del Estatuto de los Trabajadores. Esta protección garantiza que las empresas no puedan rescindir un contrato alegando motivos vinculados al estado de salud del empleado.