Trump sale al rescate de Milei con un mecanismo creado en pleno New Deal

El instrumento financiero se llama Fondo de Estabilización Cambiaria (ESF, por sus siglas en inglés) y es, muy probablemente, el mecanismo que utilice la Administración Trump para salvar a su aliado argentino. No en vano, Javier Milei, el presidente, pasa por sus peores momentos desde que hace casi dos años accedió al poder. No sólo en el terreno político tras el batacazo electoral de las legislativas de Buenos Aires ante los peronistas de Axel Kicillof y Cristina Kirchner, sino en el plano económico tras la debacle del peso frente al dólar.

El fondo de estabilización es un mecanismo creado por Franklin D. Roosevelt en 1934 al calor del New Deal que básicamente consiste en un préstamo al país que lo necesita formalizado mediante tres tipos de activos: dólares, divisas extranjeras y derechos especiales de giro, la ‘moneda’ que utiliza el FMI para sus operaciones. La base jurídica del ESF es la Ley de Reserva de Oro de 1934, y es potestad del secretario del Tesoro echar mano de este instrumento para equilibrar la balanza de pagos de los países en dificultades.

La economía argentina lo está pasando mal tras haber consumido parte de los 20.000 millones de dólares que le prestó el FMI hace apenas medio año. Argentina, cabe recordar, es el mayor deudor del FMI, con una deuda que, según datos del organismo, asciende a 41.789 millones de derechos especiales de giro (equivalentes a unos 57.250 millones de dólares), un 35% del total de los créditos totales pendientes de cobro por parte del FMI

Desde su creación, el Fondo de Estabilidad Cambiaria ha realizado 125 operaciones con diferentes países, la mayoría de Latinoamérica. Argentina, precisamente, ha sido quien más veces lo ha utilizado, en doce ocasiones entre 1959 y 1995. El mayor préstamo lo obtuvo México, cuando en 1995, en plena crisis del llamado efecto tequila recibió 20.000 millones de dólares. El Fondo hoy cuenta con algo más de 23.500 millones de dólares para ser prestados a los países en números rojos.

TE PUEDE INTERESAR

Trump contra la ONU (y todo lo demás): réquiem por la Asamblea de Naciones (des)Unidas

Javier Brandoli. Nueva York

En cuanto al préstamo del FMI, cerrado en abril de este año, supuso el reconocimiento de un pago de 20.000 millones de dólares, de los cuales 12.000 millones eran de entrega inmediata. En la última revisión, de julio de este año, se desbloqueó un nuevo desembolso de 2.000 millones de dólares. En total, 14.000 millones de dólares de dinero fresco que no han sido suficientes para estabilizar el tipo de cambio del peso frente al dólar tras haberse pulverizado las bandas de fluctuación aprobadas por Milei al establecer una paridad flexible dentro de determinados márgenes.

Derrota política

La derrota política de Milei ante los peronistas es lo que ha acelerado la venta de pesos, lo que ha obligado al banco central argentino a vender dólares para sostener la moneda local, algo que merma el volumen de reservas. En paralelo, y con el objetivo de engordar la reservas de divisas, Milei ha eliminado las retenciones fiscales a la exportación de grano y carnes avícolas y bovinas hasta el próximo 31 de octubre, lo que tendrá efectos negativos para las arcas públicas por valor de unos 1.600 millones de dólares.

Con esta decisión, los exportadores tendrán tres días, en lugar de 15, para ingresar las divisas que obtengan, una vez hecha la declaración jurada de sus ingresos. El Gobierno espera adelantar unos 7.000 millones de dólares en divisas. Es decir, un mero ajuste para ganar tiempo y evitar el descalabro. Esta artimaña fiscal ha logrado al menos que, por el momento, se hayan incrementado las ventas a China, según Bloomberg, que busca mercados alternativos a EEUU en productos como la soja. El problema es que este alivio puede ser transitorio.

Los detalles del préstamo de EEUU a Argentina, anunciado por el secretario del Tesoro, Scott Bessent, todavía no se conocen y tampoco se dieron a conocer tras el encuentro en Nueva York entre Trump y Milei en el marco de la Asamblea anual de Naciones Unidas. El otro mecanismo que se baraja es un ‘swap’ de divisas (contrato bilateral que permite cubrir la exposición al riesgo) entre la Reserva Federal y el banco central argentino. La reunión, en todo caso, ya ha tenido efectos terapéuticos y aunque el riesgo de default sigue siendo extremadamente elevado, por encima de los 1.000 puntos, la apreciación del dólar se ha suavizado. En la sesión de este martes el dólar se alejó de la banda más alta de intervención del banco central y cerró en torno a 1.477 puntos.

Trump y Milei, como se sabe, son algo más que aliados. El propio Trump publicó en su red social: "Javier Milei es muy buen amigo, luchador y GANADOR, y tiene mi completo y total respaldo para la reelección como presidente. ¡Nunca los defraudará!".

El presidente argentino ha viajado una docena de veces a EEUU en menos de dos años de mandato, y de ahí que no haya dudas de que Washington pondrá toda la carne en el asador para evitar la quiebra de la economía argentina, que empieza a hacer aguas tras haber tenido inicialmente éxito en el plano de la inflación gracias a un durísimo plan de ajuste que apreció el peso para equilibrar la balanza de pagos. Hoy, sin embargo, los inversores están dejando de creer en Milei y han vuelto al dólar como moneda refugio, lo que obligó al banco central a vender su bien más preciado, los dólares que recibe de las instituciones multilaterales. Tuvo que desprenderse de 1.100 millones de dólares en apenas tres días para sostener el peso en los momentos más difíciles de la semana pasada.

Frente a la desconfianza de los inversores, muy al contrario, EEUU ha reforzado su apuesta por Milei y el propio Bessent recordó en una publicación en X que “Argentina es un aliado sistémicamente importante de EEUU en América Latina, y el @USTreasury está dispuesto a hacer lo que sea necesario dentro de su mandato para apoyar a Argentina”, señaló el secretario del Tesoro. Para entender el mensaje sin fisuras de Bessent no hay que olvidar que el próximo 26 de octubre se celebran elecciones legislativas nacionales que se consideran clave para la supervivencia política de Milei, y un desplome del peso sería letal para el movimiento La libertad Avanza (LLA).

Vaca Muerta

El Fondo de EEUU funciona como un mecanismo que tiene como contrapartida garantías reales, y en este sentido se ha especulado que una de ellas pueda ser el yacimiento de Vaca Muerta, antiguamente propiedad de Repsol, que es la segunda reserva de gas natural no convencional más grande del mundo y la cuarta de no convencional (fracking).

Milei ya ha ofrecido a los inversores extranjeros la explotación de esos recursos, lo que coincide con la estrategia de Trump de revitalizar el mercado de los hidrocarburos frente al auge de las energías renovables. Las tierras raras que existen en Argentina también pueden ser la moneda de cambio para avalar el préstamo. La Administración de EEUU ya obligó a México en 1995 a poner como garantía parte de sus reservas de petróleo.

El préstamo de EEUU iría fundamentalmente a refinanciar la deuda en dólares, que el año que viene puede ascender a unos 20.000 millones de dólares, lo que hace que cada billete verde sea para Argentina oro en paño. De esa cantidad, alrededor de 9.500 millones son en bonos bajo leyes extranjeras, lo que significa que hay que devolver el préstamo bajo amenaza de embargo. El mecanismo más probable es un repo, activo con garantía de recompra, en el que el país deudor (Argentina) entrega activos y recibe dólares a corto plazo. Cuando vence la operación, está obligado a devolver dólares y recupera el colateral. Si lo incumple, se pueden ejecutar los activos empeñados.