Bruselas pide un 'zar' en Moncloa para potenciar el mercado interior europeo
La estrategia de la Comisión Europea para mejorar el Mercado Interior pide a los Gobiernos reforzar sus esfuerzos para eliminar barreras y facilitar el comercio dentro de la UE
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En tiempos de turbulencia internacional, con la sombra permanente de una guerra comercial desde la Casa Blanca, en la Unión Europea tienen claro que la alegría de la corona es el Mercado Interior. Pero eso no evita que entre los Estados miembros existan barreras que, según el Fondo Monetario Internacional (FMI), equivalen a aranceles del 45% en bienes y del 110% en servicios. Por eso, el Ejecutivo comunitario quiere eliminar obstáculos y potenciar el mercado interior, para lo que ha elaborado una estrategia presentada este martes en Bruselas.
Como parte de las propuestas que ha comenzado a poner sobre la mesa, la Comisión Europea pide a los Gobiernos nacionales que establezcan dentro del gabinete de sus primeros ministros o presidentes a un "sherpa" para el Mercado Interior, una palabra que en política internacional se usa para definir a un representante especial del jefe de Gobierno. Bruselas pide que tenga "autoridad sobre todos los sectores del Gobierno" para “promover la aplicación de las normas del mercado único y desempeñar un papel activo en la prevención y eliminación de los obstáculos reglamentarios y administrativos nacionales al mercado único”.
"Los sherpas también deberán cooperar entre sí para acelerar la supresión de barreras en todo el mercado único. Para facilitar la cooperación, el vicepresidente ejecutivo de la Comisión responsable del Mercado Interior o su representante convocará a los sherpas de alto nivel del Mercado Interior para que se reúnan periódicamente", explica la Comisión en su estrategia. Bruselas señala que su objetivo sería celebrar la primera reunión de 'sherpas' del Mercado Interior en el último trimestre del año. En el caso español, lo normal sería que este representante de alto nivel se encontrara en la ya existente Oficina Económica del Presidente del Gobierno, liderada desde el año 2020 por Manuel de la Rocha.
Además, más allá de tener un representante especial encargado de coordinar la eliminación de barreras que impiden el comercio dentro del Mercado Interior, el Ejecutivo comunitario ha subrayado que es "esencial que los Estados miembros refuercen sus capacidades nacionales de cumplimiento del Mercado Interior" para resolver rápidamente posibles "medidas o prácticas nacionales consideradas incompatibles con el Mercado Interior". El problema es que España, además de integrar mejor el mercado interior europeo, tiene el problema de integrar mejor su propio mercado interno. Una de las ideas que ha puesto sobre la mesa la Comisión Europea es la creación de un “régimen 28”, un conjunto de normas y reglas comunes que se aplican a nivel de los veintisiete países para así facilitar el crecimiento de las empresas. Una muestra de lo fragmentado que está el mercado español, y de las dificultades que plantean en ocasiones por trabajos burocráticos o regulatorios, es que Carlos Cuerpo, ministro de Economía, ha propuesto la creación de un “régimen 18” a nivel estatal.
Los 'diez terribles'
La estrategia de la Comisión Europea se centra en eliminar diez tipos de barreras principales a las que el Ejecutivo comunitario bautiza como "los diez terribles". La primera son barreras al establecimiento y funcionamiento de las empresas; la segunda las normas complejas; la tercera la falta de asunción de responsabilidades de los Estados miembros; en cuarto lugar el reconocimiento limitado de las cualificaciones profesionales entre Estados miembros; en quinto la falta de normas comunes; en sexto las normas fragmentadas sobre envasados de productos; la séptima barrera es la falta de conformidad de los productos; la octava son las normativas nacionales restrictivas sobre servicios; la novena barrera son las "normas graves para el desplazamiento de trabajadores en sectores de bajo riesgo"; y por último están las limitaciones territoriales injustificadas de las ofertas, lo que encarece los precios de los productos.
"En el incierto mundo actual, los primeros socios de los europeos deben ser los propios europeos", ha asegurado Stéphane Séjourné, vicepresidente ejecutivo de la Comisión Europea, que ha explicado que "es hora de que las empresas europeas se 'europeicen' antes de 'internacionalizarse'. La Estrategia de hoy establece un nuevo enfoque y método. Aunando nuestros esfuerzos, podemos aumentar los beneficios para todos del Mercado Interior, piedra angular económica y social de Europa". Entre las propuestas también se incluyen por ejemplo la prioridad europea en licitaciones públicas, un asunto que ya adelantó el Ejecutivo comunitario hace meses.
En tiempos de turbulencia internacional, con la sombra permanente de una guerra comercial desde la Casa Blanca, en la Unión Europea tienen claro que la alegría de la corona es el Mercado Interior. Pero eso no evita que entre los Estados miembros existan barreras que, según el Fondo Monetario Internacional (FMI), equivalen a aranceles del 45% en bienes y del 110% en servicios. Por eso, el Ejecutivo comunitario quiere eliminar obstáculos y potenciar el mercado interior, para lo que ha elaborado una estrategia presentada este martes en Bruselas.