Rusia pagaría un arancel del 41% si no hubiese recibido trato de favor de Trump
EEUU aplica de manera discrecional su fórmula para establecer aranceles a cada país, dejando exenta a Rusia y castigando más a Ucrania, México, Canadá
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La fórmula elaborada por la administración Trump para aplicar los aranceles supuestamente recíprocos no trata realmente sobre niveles arancelarios, sino sobre el déficit comercial de EEUU con cada país, ya que la finalidad del cálculo es fijar una ratio que permita teóricamente revertir el signo negativo de la balanza comercial. Sin embargo, a la cuestionable vía escogida y a la sorprendente metodología, se añade una aplicación discrecional de la fórmula por parte de la Casa Blanca, donde la mayor excepción es Rusia, pero no la única.
Rusia, Cuba, Corea del Norte y Bielorrusia han sido excluidos tanto del arancel base (10%) como de los adicionales individualizados por tener déficit comercial con EEUU. El motivo esgrimido por la Casa Blanca en declaraciones a The New York Times es que estos países ya enfrentan sanciones “extremadamente altas" que "impiden cualquier comercio significativo”. Es cierto que el comercio de EEUU con Corea del Norte, Cuba y Bielorrusia es muy reducido, pero no lo es tanto en el caso de Rusia, país del que EEUU importó productos por valor de 3.007,5 millones de dólares en 2024, aunque solo vendió bienes por valor de 526 millones.
Estos datos evidencian un déficit comercial de 2.481 millones, lo que da como resultado, si se aplicara la fórmula de la Casa Blanca para los aranceles recíprocos (déficit comercial entre importaciones de EEUU del país en cuestión), un arancel del 82,51% que, con el descuento del 0,5, se queda en un 41,25%. Rusia es en este reparto de aranceles la que más beneficiada resulta de la aplicación del criterio cambiante de la administración Trump, ya que si se le sometiera al mismo que a la mayoría tendría la novena ratio arancelaria más alta.
La excepción es llamativa no solo por dejar sin aplicar aranceles a un déficit comercial elevado en relación con el nivel de comercio con el país, sino porque otros países con déficits comerciales menores y un flujo comercial inferior sí que tienen arancel. Por ejemplo, es el caso de Sri Lanka, con unos valores muy similares a los de Rusia, y al que se le ha impuesto un 44%. También el de Angola, que con menor déficit comercial y menor flujo tiene un 32%. Incluso hay países con una balanza comercial favorable a EEUU que tienen aranceles, como es el caso de Emiratos Árabes, Australia y Reino Unido, todos ellos con la tarifa base del 10%. En total hay 96 países en esta situación.
En el lado opuesto a Rusia, los países más perjudicados por los aranceles impuestos respecto al nivel que les correspondería si se aplicara la fórmula de manera uniforme son México y Canadá, que no se exponen a un arancel recíproco como tal porque tienen uno específico del 25% para ambos. El trato es especialmente desfavorable para estos dos socios comerciales, con los que EEUU tiene déficit comercial y un flujo de comercio de bienes de más de 1.000 millones de dólares al año. Si se reproducen los cálculos (con el descuento), a Canadá le correspondería un arancel del 8% y a México uno del 17%.
No obstante, cabe recordar que los aranceles anunciados el 2 de abril, el bautizado como "Día de la Liberación", aún no han entrado en vigor, por lo que puede haber cambios respecto al escenario descrito en este artículo por negociaciones de última hora, como ha sido habitual en anteriores ocasiones. Los aranceles base del 10% entran en vigor el 5 de abril y los adicionales el 9 de abril.
Trato desfavorable para Ucrania
Es cierto que los flujos comerciales entre Rusia y EEUU están en su mínimo desde la Guerra Fría y suponen una parte muy pequeña de las importaciones americanas, por lo que la exclusión de los aranceles es más un gesto que una medida económica de relevancia para dar oxígeno a Putin. El desplome se aprecia claramente desde el inicio de la invasión de Ucrania, de manera que las importaciones de EEUU de Rusia han caído un 89,9% si se compara 2021 con 2024 y las exportaciones un 91,8%. Las ventas que se siguen produciendo a Rusia se concentran en fertilizantes, piedras preciosas y algunos productos químicos.
No obstante, la diferencia de trato vuelve a surgir si se contrasta con la que prepara para Ucrania. El flujo comercial de EEUU con dicha nación es prácticamente el mismo que con Rusia (asciende a 4.554 millones) y la balanza comercial es ligeramente positiva, pero, a pesar de ello y de ser un país destruido por la guerra, Trump ha decidido imponerle el arancel base del 10%. El análisis comparativo deja un claro trato desfavorable para Ucrania y uno beneficioso para Rusia.
Esto coincide además con las conversaciones de los últimos meses entre EEUU, Ucrania y Rusia sobre un alto al fuego y con la visita este mismo miércoles de un emisario de Putin a Washington en medio de la guerra comercial de la que ha quedado excluido el país. "La comprensión real de la posición rusa abre nuevas posibilidades para una cooperación constructiva, incluido en el ámbito económico-inversor", ha trasladado el emisario del Kremlin para asuntos económicos, kiril Dmítriev, a través de su cuenta de Telegram.
Las sanciones de EEUU a Rusia son elevadas, especialmente para las ventas de petróleo, pero Trump ha planteado en las últimas semanas la posibilidad de rebajar algunas para avanzar en las negociaciones de fin de la guerra en Ucrania.
España resulta comparativamente más perjudicada
Otra aplicación a la carta de la fórmula es la realizada para la UE. Se trata del único grupo de países para los que se ha calculado un arancel conjunto del 20% y no específico por estado, algo que beneficia a los 27 en cuanto a su estrategia política de dar una respuesta única, pero que perjudica a algunos países.
En concreto, doce Estados miembros se quedarían por debajo del arancel aplicado al tener EEUU un déficit comercial reducido con ellos o, en el caso de España y de otros seis, incluso superávit. Por el contrario, los países que más beneficiados resultan son Eslovenia, Eslovaquia e Irlanda, a los que les corresponderían aranceles del 47,4%, el 46,6% y el 42%, respectivamente. También Alemania, con un 26,4%.
A pesar de esta comparativa, España es un país menos expuesto a los aranceles de Trump por tener menos relación comercial con EEUU que otros de la UE, ya que es el sexto destino de las exportaciones de bienes españolas, lo que supone en torno al 5% del total de ventas al exterior. Una situación muy distinta a la que tienen otros Estados miembros como Alemania, cuyo principal destino comercial es EEUU, por delante de cualquier otro socio de la UE.
La fórmula elaborada por la administración Trump para aplicar los aranceles supuestamente recíprocos no trata realmente sobre niveles arancelarios, sino sobre el déficit comercial de EEUU con cada país, ya que la finalidad del cálculo es fijar una ratio que permita teóricamente revertir el signo negativo de la balanza comercial. Sin embargo, a la cuestionable vía escogida y a la sorprendente metodología, se añade una aplicación discrecional de la fórmula por parte de la Casa Blanca, donde la mayor excepción es Rusia, pero no la única.