España baja la deuda pública al 101,8% del PIB y mejora las previsiones de la AIReF
El desapalancamiento aceleró en la recta final del año y mejora en un punto del PIB las previsiones. También se han publicado los datos de exportaciones, con un crecimiento del 0,2%
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F5c4%2Fcfb%2Fb0d%2F5c4cfbb0dd38637743862311fdeccb22.jpg)
La ratio de deuda pública se redujo en 3,4 puntos del PIB a lo largo de 2024, cerrando el año en el 101,8% del PIB, según los datos publicados esta mañana por el Banco de España. La caída se debe, principalmente, al ajuste del último trimestre del año que, como viene siendo habitual en los últimos años, se produce un importante repago de deudas. En concreto, en el último trimestre del año se devolvieron 14.600 millones de euros, lo que permitió al Gobierno anticipar en dos años el objetivo de reducción de la deuda pública: en la senda de estabilidad presentada en 2024 esperaba llegar al nivel actual en 2026.
El dato de deuda pública también ha mejorado las previsiones de la Autoridad Fiscal (AIReF), elaboradas en enero, en las que anticipaba una deuda del 102,7% del PIB. Esto es, el cierre de 2024 estaría casi un punto por debajo de la proyección de la AIReF. El motivo de esta desviación es el desapalancamiento del último trimestre del año. Hasta ese momento, las distintas Administraciones Públicas habían tenido grandes dificultades para reducir su pasivo.
En los últimos meses, el Ministerio de Hacienda está endureciendo su control de las cuentas públicas, y la tributación del SMI sólo es la punta del iceberg. Los datos de deuda apuntan en esa dirección y anticipan que se podría haber cumplido el gran objetivo de 2024, bajar el déficit hasta el 3%. Sin embargo, la reducción de deuda sigue siendo consecuencia del crecimiento económico y de la inflación.
Con este descenso, España está ya cerca de cerrar el pico de deuda pública provocado por la pandemia. La deuda actual es la más baja desde el primer trimestre de 2020 y es 4,1 puntos superior a la del cierre de 2019. Al ritmo actual de ajuste, sería necesario poco más de un año para volver a los niveles previos al covid. El pico de deuda de la pandemia se produjo en el primer trimestre de 2021, alcanzando el 124,2% del PIB. Desde entonces se ha reducido en casi 22,5 puntos.
Sin embargo, por Administraciones se han producido importantes cambios. El Estado fue quien asumió el grueso de los gastos de la pandemia, tanto en términos de caída de la recaudación (compensó íntegramente a las CCAA) como de gasto, principalmente a través de los ERTE. El resultado es que la deuda del Estado todavía es 8,3 puntos superior a la del año 2019. Por el contrario, las CCAA han reducido su deuda en 2,4 puntos del PIB y los municipios, en 0,41 puntos. De hecho, los municipios ya tienen más activos que pasivos, con 45.000 millones aparcados en los bancos.
La Seguridad Social es la única Administración que se está endeudando más rápido de lo que crece el PIB. El resultado es que su ratio de apalancamiento alcanzó el 7,9% al cierre de 2024, el dato más alto de toda la serie histórica. En total, la Seguridad Social ya debe 126.000 millones de euros, incluso a pesar del esfuerzo del Gobierno por mostrar una hucha de las pensiones creciente.
En términos absolutos, la deuda siguió creciendo a lo largo de 2024, pero como lo hace a un ritmo inferior al PIB, se sigue reduciendo la ratio. El pasivo total de las AAPP se situó en 1,62 billones de euros, lo que supone un incremento de 46.100 millones de euros en comparación con el cierre de 2023.
Las exportaciones mantienen el tono
Por otra parte, este lunes también se han conocido los datos de comercio exterior de mercancías de diciembre de 2024, que constatan un crecimiento interanual leve del valor de las exportaciones y de las importaciones de España. El país mantiene así el valor del comercio de bienes en un momento de repliegue de la globalización.
En concreto, según los datos publicados por el Ministerio de Economía, las exportaciones alcanzaron los 384.465 millones de euros a lo largo del año, un crecimiento del 0,2% respecto al año anterior, mientras que las importaciones se elevaron un 0,1% interanual, hasta los 424.741 millones. Este gap entre ambas cifras resulta en un déficit comercial de 40.276 millones de euros, lo que equivale al 2,5% del PIB, una mejora del 0,7% respecto a 2023.
En comparación histórica, el déficit es el menor desde 2021 y se debe a una mejora en la balanza energética por una reducción mayor de las importaciones. España sigue comprando más bienes energéticos al exterior de los que exporta, pero el déficit desciende al 1,9% del PIB, la menor ratio desde 2019, cerrando en los 30.443 millones de euros.
Por sectores económicos, en 2024 tiraron de las exportaciones la alimentación y las bebidas, con un crecimiento del 6,8% y una aportación al crecimiento de 1,2 puntos, pero las exportaciones de productos energéticos restaron 0,6 puntos, seguidas de los productos químicos (0,4 puntos). En las importaciones es relevante el crecimiento de las compras de materias primas en un 6,4%, lo que aporta al crecimiento del conjunto de las importaciones 0,2 puntos.
Por áreas geográficas, el 61,8% de las exportaciones españolas se dirigieron a la UE, aunque el reducido crecimiento económico de los principales miembros ha provocado un descenso de las mismas del 1,1% respecto al año anterior.
La ratio de deuda pública se redujo en 3,4 puntos del PIB a lo largo de 2024, cerrando el año en el 101,8% del PIB, según los datos publicados esta mañana por el Banco de España. La caída se debe, principalmente, al ajuste del último trimestre del año que, como viene siendo habitual en los últimos años, se produce un importante repago de deudas. En concreto, en el último trimestre del año se devolvieron 14.600 millones de euros, lo que permitió al Gobierno anticipar en dos años el objetivo de reducción de la deuda pública: en la senda de estabilidad presentada en 2024 esperaba llegar al nivel actual en 2026.