Es noticia
Concepción Barrio, notaria: "En España la seguridad jurídica está garantizada"
  1. Economía
PRIMERA MUJER DECANA DE MADRID

Concepción Barrio, notaria: "En España la seguridad jurídica está garantizada"

La figura del notario es controvertida. La nueva decana del Colegio de Madrid, la primera mujer en acceder al cargo, defiende su vigencia en el siglo XXI. Ahora se postula como la primera mujer al frente del notariado español

Foto: Concepción Barrio del Olmo entrevistada por Carlos Sánchez. (Manu Vega)
Concepción Barrio del Olmo entrevistada por Carlos Sánchez. (Manu Vega)
EC EXCLUSIVO Artículo solo para suscriptores

Concepción Barrio del Olmo, tras las elecciones de este domingo, será la primera mujer decana del Colegio Notarial de Madrid. En esta entrevista anuncia que optará a la presidencia del Consejo General del Notariado, lo que significa que también sería la primera mujer en acceder al órgano más representativo de los 3.000 notarios que hay en España. Licenciada en Derecho, es notaria desde 1997, y una década después ganó la plaza en Madrid. Considera que la labor principal de los notarios es asesorar en aras de garantizar la seguridad jurídica. La entrevista se celebra en una sala llena de solemnidad en la que solo el reloj marcando las horas rompe la armonía de la casa-palacio del senador vitalicio en tiempos de la Restauración Manuel González-Longoria, sede del Colegio, a un paso del Retiro.

PREGUNTA. ¿Para qué sirve un notario en el siglo XXI?

RESPUESTA. Un notario del siglo XXI sirve para lo mismo que para lo que surgió. Se nos identifica siempre con la seguridad jurídica y claro que la garantizamos, pero es mucho más. Hay que tener en cuenta que el notariado es una creación de la sociedad, no de la ley. Los notarios tenemos contacto diario con las personas y tienen que ofrecer seguridad jurídica, por supuesto, pero también justos y veraces. Lo que ocurre es que ahora tenemos otros instrumentos, otras herramientas tecnológicas, pero no cambian la esencia del notariado.

P. ¿Estará de acuerdo en que muchos ven a los notarios como una profesión un tanto trasnochada?

R. Tenemos que ir poco a poco. Es cierto que hay una imagen de que no trabajamos nada, que incluso somos todos hombres mayores, pero ya no es así, no responde a la realidad. De hecho, yo represento el cambio generacional que se está produciendo en el notariado. Es una imagen injusta porque todo el mundo ha pasado alguna vez en su vida por una notaría y la forma de cambiar esa imagen es que se nos vaya conociendo más, explicando nuestra función. La Ley de Créditos Inmobiliarios, que es un ejercicio de transparencia antes de la firma de las hipotecas, ha sido magnífica porque refleja el asesoramiento por excelencia. Un testamento, por ejemplo, lleva detrás el asesoramiento del notario. Las actas de transparencia han supuesto un cambio en la percepción que tiene la sociedad del notariado. Siempre hemos dicho que los notarios intervenimos en los actos más importantes de la vida económica de una persona, una compraventa, una hipoteca… También en actos como el expediente matrimonial. Eso ha supuesto ya un cambio en la percepción que tiene la sociedad.

P. Pero fíjense que ha sido necesaria una crisis financiera extraordinaria, la de 2008, para hacer ese esfuerzo de acercamiento a la sociedad civil. Antes no había asesoramiento, acudir al notario era un acto obligado y casi administrativo, burocrático, ahora tienen más responsabilidad.

R. Asesoramiento ha existido siempre, lo que ocurre es que en el ámbito financiero se intentaba por otros operadores económicos que no existiera ese asesoramiento, pero el asesoramiento ha existido siempre. Fue en la crisis financiera cuando nos escuchó el Ministerio. Ahora le estamos pidiendo, porque es una barbaridad, que no se firmen contratos de arras sin un asesoramiento previo. Estamos proponiendo que exista intervención notarial, como en un préstamo. Muchas veces una persona ha firmado un contrato de arras después de haberse descargado en Internet un formulario y lo firma sin mirar el estado de carga, la titularidad… Y cuando llegan a la notaría les tenemos que decir: ¿Ustedes han visto esto?, pero después de haber entregado una cantidad de dinero. Pero claro, nuestras competencias vienen determinadas por la ley y tuvo que haber una ley que estableciera obligatorio lo que es un derecho: el asesoramiento.

"Sí, me voy a postular al Consejo General porque creo que ofrezco mi perfil, mi trayectoria... Sería un cambio generacional"

P. Los aranceles, el precio que pagan los ciudadanos por acudir al notario, ¿son altos, son bajos o habría que actualizarlos?

R. Son aranceles del año 1989. Y no solo es que no se hayan actualizado con arreglo al IPC, es que ha habido 60 rebajas arancelarias, al margen de los actos que denominamos sin cuantía. Un testamento en el año 89 eran 30 euros con cinco céntimos en pesetas, y ahora, en el año 2024, sigue siendo lo mismo.

P. ¿Pero quieren subirlos?

R. Ahora mismo, los aranceles no son nuestra mayor preocupación. Nuestra mayor preocupación es el mantenimiento de nuestro sistema de seguridad jurídica, y ello en beneficio de la sociedad a la que nos debemos, porque es nuestra razón de ser. Debemos garantizar que una persona que compra una vivienda no está comprando un juicio. Queremos que, aunque haya cambios tecnológicos, que lo ha habido siempre, no afecten a nuestra seguridad jurídica.

P. Precisamente, el debate sobre la seguridad jurídica está en el entorno político, más allá de los notarios. ¿Está garantizada en España?

R. Sí, sí, absolutamente, está garantizada. En ciertos momentos puede haber algunos fallos, pero es un sistema absolutamente seguro. El asesoramiento garantiza que cualquier negocio jurídico es seguro, justo y veraz. Además, nuestro sistema descansa en dos pilares: notarios y registradores, y funciona bien. Puede que sean necesarias algunas adaptaciones, sobre todo últimamente con los cambios tecnológicos, pero ha sido un sistema fiable.

P. O sea que España es un país que cuenta con seguridad jurídica en las transacciones de carácter mercantil o comercial.

R. Sin duda.

placeholder Concepción Barrio. (Manu Vega)
Concepción Barrio. (Manu Vega)

P. En su programa he visto que aparece crear una comisión deontológica, ¿es que no la hay?

R. Estamos aquí en la sala Vallet de Goytisolo y tenemos un cuadro de él detrás. Decía Vallet de Goytisolo que el notariado sin ciencia podría subsistir, pero sin ética no sería posible. Todos esos valores son necesarios porque los notarios formamos parte de la sociedad. Estamos viviendo momentos sociales muy complicados. Quizá es necesaria esa comisión deontológica para recordar esos valores que compartimos. Puede haber excepciones muy concretas, muy puntuales, pero se trata de recordar los valores del notariado. La finalidad de la propuesta es recordatoria.

"Es una barbaridad firmar contratos de arras sin un asesoramiento previo. Hemos pedido al Ministerio que exista intervención notarial"

P. La solución extrajudicial de los conflictos es un asunto que preocupa mucho, sobre todo en el ámbito mercantil. Y España, como sabe, está imitando el modelo anglosajón para evitar que las disputas pasen siempre por los tribunales. ¿Qué pueden aportar los notarios?

R. Aquí tenemos una cultura del litigio y cualquier controversia, de la enjundia que sea, acaba, judicializada. Los notarios llevamos mucho tiempo impulsando los medios extrajurisdiccionales de solución de controversias: mediación, arbitraje, conciliación, y podemos aportar mucho. Tenemos una fundación para ello. Podemos ser mediadores, podemos ser árbitros, podemos ser conciliadores. Lo que podemos aportar es calidad en la mediación, porque no cualquier mediación o cualquier arbitraje vale, tiene que ser de calidad.

P. ¿Tienen razón los ciudadanos cuando creen que hay una duplicidad de funciones entre registradores y notarios?

R. Si funciona bien el sistema, como tiene que funcionar, no la hay. Somos los notarios los que tratamos con las personas, que te cuentan sus anhelos, sus necesidades. Les explicas cómo se puede cerrar un negocio jurídico, das forma a su voluntad… Eso hace el notario. El registrador viene después, y lo que hace es añadir seguridad controlando que, por ejemplo, si hay una compraventa, que no haya cargas en la vivienda. Son labores complementarias que actúan en distintos ámbitos. El notario es previo, es el que va a dar forma a la voluntad, es el que redacta el negocio jurídico. El registrador, con arreglo a los libros del Registro de la Propiedad, garantiza, inscribe, le da publicidad, pasa a ser público.

P. ¿No habría que simplificar el lenguaje jurídico? Muchos ciudadanos no lo entienden.

R. Es muy complicado porque hay palabras que nos vienen del derecho romano. Es cierto, pero ocurre también con cualquier lenguaje técnico. Ahí está la labor del notario en el momento del otorgamiento, cuando estás explicando la escritura. Tú lo que tienes que hacer es traducirlo dependiendo de la persona que te vaya a escuchar.. No es lo mismo una firma con un abogado presente que otra con una persona mayor que, a lo mejor, no sabe leer ni escribir. Todavía tenemos esas personas.

P. ¿Incluyendo las cláusulas abusivas? Lo digo porque después de la crisis financiera se descubrió que existían de una forma masiva y muchos contratos pasaron por las notarías.

R. Las cláusulas abusivas ya están más controladas. Teníamos un problema. Los notarios, aunque hubiera cláusulas abusivas, podíamos advertir, pero no podíamos denegar la autorización. La autorización notarial es un derecho del ciudadano. No le puedes negar ese derecho. Solo puedes denegar la autorización cuando es manifiestamente ilegal en materia de cláusulas abusivas. La ley no te decía que tú pudieras denegar la autorización notarial. Afortunadamente, ya no existen esas cláusulas. Hay un mayor control.

"Las oposiciones son un ascensor social, no todos somos hijos de notario. Nos preocupa que la edad media de los aprobados sea muy elevada"

P. ¿Hay competencia entre los notarios?

R. Sí, y afortunadamente. Eso es muy bueno.

P. Pero si los aranceles son los mismos, ¿cómo se manifiesta esa competencia?

R. Los notarios tenemos que competir en calidad. A diferencia de los registradores, donde no existe competencia territorial y quizá eso sí produce algunas disfunciones, los notarios tienen competencia en tu ámbito. Yo tengo competencia territorial en Madrid. Es verdad que yo no puedo ir a Torrejón de Ardoz a firmar, pero cualquier persona de España puede elegirme a mí como notario. Y la competencia es muy buena porque te hace más activo, no en tema de precios, sino en calidad en tus servicios.

P. ¿Y es necesario extender esa competencia a precios?

R. Los precios vienen marcados por ley, es el arancel. Sí que hay una posibilidad de un descuento del 10%, pero normalmente ni se aplica porque quienes te eligen no van buscando precio, van buscando calidad.

P. El sistema de selección de los notarios, las célebres oposiciones a notaría, no están un tanto superadas por el tiempo en que vivimos. Son demasiado memorísticas.

R. Las oposiciones son cuatro ejercicios, dos teóricos y dos prácticos. Necesitas memorizar porque necesitas conocer esos preceptos para resolver el caso práctico. La memoria la utilizas constantemente cuando vienen a hacerte una consulta. No puedes estar con el Código Civil delante de las personas diciendo: 'espera un momento a ver si esto lo permite', cuando además es una legislación muy complicada. Sí es cierto que exige un esfuerzo memorístico, pero luego tienes dos ejercicios prácticos. Además, la labor de estudio por parte del notario es constante porque hay cambios legislativos. No se trata de aprobar y decir: ya lo he hecho todo.

Ahora bien, creo que sí, que habría que modificar el sistema, pero en el sentido de que las oposiciones libres se convocarán todos los años, porque últimamente lo que está sucediendo es que la edad media de los aprobados es muy elevada. Teniendo en cuenta que se tarda como media siete años, nos ponemos en 29, 30 o 31 años. Es una edad muy elevada. Muchas personas que podrían ser brillantes no pueden embarcarse en un esfuerzo tan incierto. Las oposiciones a notarías son un ascensor social. No todos los notarios somos hijos de notario. En mi caso, por ejemplo, mi familia es de ciencias. Es verdad que hay muchas familias que no están en las mismas condiciones porque tienen que esperar durante siete años, pero por eso hay que sacar oposiciones todos los años.

placeholder Concepción Pilar Barrio. (Manu Vega)
Concepción Pilar Barrio. (Manu Vega)

P. La figura del notario en España, como se configura jurídicamente, es similar a la que hay en otros países europeos.

R. Es similar al sistema del notariado latino. Es también similar en Hispanoamérica, por ejemplo, Argentina, pero no todos los países europeos. En Francia, por ejemplo, las notarías se transmiten por herencia o se pueden vender. No es un sistema de acceso tan riguroso como es en España. Pero en cuanto a los efectos del documento público, es similar. A diferencia del sistema anglosajón, donde los notarios no controlan la legalidad, no hay asesoramiento, son meros legitimadores de firmas.

P. Y no sería razonable que esa función la hiciera un funcionario público. Ustedes son funcionarios semiprivados o semipúblicos, según se mire.

R. Tenemos esa doble condición y a veces es difícil de entender. Sin embargo, está muy bien pensado en beneficio del ciudadano. Somos privados como profesionales del derecho, y eso abarca el asesoramiento, pero somos funcionarios públicos porque accedemos por un sistema de oposiciones muy rigurosas o porque lo que cobramos está fijado por un arancel. Una de las características del notariado es su capilaridad. En pueblos donde a lo mejor ya no hay ni guardia civil, hay notarios. Yo era notario en Barco de Ávila cuando el cambio de pesetas a euros, y la gente venía a mí a ver si la caja de ahorros le había hecho bien la conversión en su cartilla.

P. Ustedes, de hecho, son parte de las fuerzas vivas de cualquier pueblo o ciudad.

R. Es cierto, pero eso está cambiando porque formamos parte del pueblo. Yo aprendí a jugar al mus en Barco de Ávila, con el cura, con el farmacéutico. Muchos notarios que aprueban siguen yendo a los pueblos. El notario tiene que saber escuchar. Cuando asesoras, tienes que saber qué es lo que necesitan, qué es lo que quieren. Eso lo aprendes más en un pueblo.

"Las cláusulas abusivas ya están más controladas. Teníamos un problema. Antes podíamos advertir, pero no denegar la autorización"

P. ¿Faltan notarios? ¿Son suficientes los alrededor de 3.000 actuales?

R. Yo creo que sí son suficientes, pero no por un tema de competencia. Ahora bien, tenemos un problema con las jubilaciones, y por eso es necesario que las oposiciones se convoquen todos los años. Hay muchas notarías donde el notario no gana lo suficiente y el colegio notarial te da un préstamo.

P. Una vez elegida primera mujer decana del colegio de Madrid, ¿optará a la presidencia del Consejo General? También sería la primera mujer en la historia de los notarios.

R. Sí, me voy a postular al Consejo General porque creo que ofrezco mi perfil, mi trayectoria... Sería un cambio generacional que coincide con la realidad actual del notariado y la realidad social de España. Ya en las oposiciones empieza a haber más mujeres que hombres. Si hay más chicas que estudian el grado, más chicas que hacen las oposiciones, por tanto deben acceder a los cargos corporativos. Yo siempre he dicho que iba a ser un cambio natural. No pensé que me correspondiera a mí, pero creo que es muy importante también que las mujeres nos postulemos para que otras también vean que una mujer puede ser decana o puede ser presidenta del Consejo. Cuando yo aprobé, las mujeres éramos el 30%, pero en alguna de las últimas oposiciones se ha llegado al 60%.

P.. ¿Qué cambios propondrá en el Consejo si es elegida presidenta?

R. Creo que hay que mantener la esencia del notariado y reforzar la seguridad jurídica atendiendo las necesidades de las personas. Hay que estar más cerca de la ciudadanía. Tenemos además una vía muy bonita respecto de los pactos asistenciales. También cómo podemos ayudar a solucionar problemas como la soledad no deseada o el acceso a la vivienda. Es necesario mantener la esencia del notariado al tiempo que nos seguiremos adaptando a las nuevas tecnologías, a la digitalización. Pero siempre como un instrumento que no suponga un cambio en nuestra razón de ser. Y eso hay que mantenerlo como presidenta del Consejo. Creo que hay que liderar no un cambio tecnológico, porque eso nosotros ya lo hemos hecho hace años, sino todas las posibilidades que nos da la nueva ley. Ser mujer puede ser muy beneficioso para otras compañeras que vean que es posible atender problemas de conciliación. Este es un tema que tenemos que tratar. Hoy quizá es necesaria una reforma del reglamento notarial, porque hay que intentar conciliar la vida familiar y la vida profesional, pero ahí es necesaria la reforma.

Concepción Barrio del Olmo, tras las elecciones de este domingo, será la primera mujer decana del Colegio Notarial de Madrid. En esta entrevista anuncia que optará a la presidencia del Consejo General del Notariado, lo que significa que también sería la primera mujer en acceder al órgano más representativo de los 3.000 notarios que hay en España. Licenciada en Derecho, es notaria desde 1997, y una década después ganó la plaza en Madrid. Considera que la labor principal de los notarios es asesorar en aras de garantizar la seguridad jurídica. La entrevista se celebra en una sala llena de solemnidad en la que solo el reloj marcando las horas rompe la armonía de la casa-palacio del senador vitalicio en tiempos de la Restauración Manuel González-Longoria, sede del Colegio, a un paso del Retiro.

Ley Hipotecaria Seguridad Mujeres que inspiran el cambio
El redactor recomienda