Es noticia
La pelea entre Sumar y PNV pone en riesgo el impuesto a bancos y energéticas
  1. Economía
Es un compromiso con Bruselas

La pelea entre Sumar y PNV pone en riesgo el impuesto a bancos y energéticas

Los socios parlamentarios negocian hacer permanentes las dos figuras, pero desde puntos de vista contrarios. Hacienda se aproxima más a las posiciones de los nacionalistas vascos, pero necesita unificar criterios

Foto: La vicepresidenta y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz. (Europa Press)
La vicepresidenta y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz. (Europa Press)
EC EXCLUSIVO

El Gobierno se ha comprometido con la Comisión Europea, en el marco del nuevo plan fiscal estructural, a hacer permanentes los gravámenes a la banca y las energéticas que ahora son extraordinarios. Las dos figuras, que se crearon para gravar los beneficios caídos del cielo, se van a quedar para siempre, o esa es la intención del Ministerio de Hacienda. Estos recursos servirán para financiar un aumento del gasto de algo más de 2.000 millones de euros, ya que las nuevas reglas fiscales permiten a los Estados poder emplear íntegramente el aumento de la recaudación cuando se produce por cambios normativos.

Sin embargo, el año va pasando y, si no se cambia la norma, los dos tributos decaerán el 1 de enero. Todos los socios de investidura, con la excepción de Junts, han mostrado su predisposición a mantenerlos, pero no hay consenso en la forma de hacerlo.

La prioridad para el PNV es que ambas figuras entren a formar parte del Concierto Económico Vasco. Esto es, que sean transferidos a las haciendas forales para quedarse con su recaudación. Fuentes de la formación recuerdan que en diciembre de 2023 acordaron con el PSOE integrar los gravámenes en el sistema tributario para que se incorporen al Concierto Vasco y al Convenio Navarro.

Foto: que-servido-subir-tipos-interes-bce

Una entrega que, además, debe incluir la cesión de la capacidad normativa sobre ambos tributos. El PNV pretende establecer bonificaciones para las inversiones de las empresas energéticas y para garantizar la solvencia de los bancos cuando desaparezcan los beneficios extraordinarios. De hecho, la formación está siendo presionada por Iberdrola y Repsol (Petronor) para conseguir esos beneficios fiscales.

Sin embargo, Sumar se opone a esta vía y prefiere mantener la fórmula actual de prestación patrimonial de carácter público no tributario. Este fue el sistema que ideó el Ministerio de Hacienda en 2022 para introducir este tributo y no tener problemas legales de doble imposición. Porque la base imponible sobre la que actúa, en especial en el caso del sector financiero, es muy similar a la del impuesto sobre sociedades.

Fuentes de Sumar explican que tienen dudas sobre ceder a las exigencias del PNV, ya que esto multiplica el riesgo de que el tributo sea tumbado por los tribunales. Pasaría de ser una figura híbrida, indirecta y finalista a un impuesto directo al uso, como es el de sociedades. Para convencer a los nacionalistas vascos, propone traspasar íntegramente la recaudación que generen estas dos figuras, pero el PNV no se fía. Prefiere que estén incorporados a la ley del concierto.

Sumar tampoco está de acuerdo con la pretensión del PNV de introducir bonificaciones a las dos figuras. En su opinión, si es un impuesto pensado para gravar beneficios extraordinarios, no es comprensible introducirle beneficios fiscales.

Foto: plan-fiscal-espana-ajustes-deficit-comision-europea

El Ministerio de Hacienda se decanta, de momento, por mantener su compromiso con el PNV de convertir los dos tributos en impuestos, explican fuentes del Gobierno. En el PSOE hay más dudas sobre la fidelidad del PNV a los presupuestos que la de Sumar. Consideran que la formación liderada por Yolanda Díaz aceptará la fórmula que finalmente decida, mientras que para el PNV sí puede ser una línea roja.

Hacienda mantiene la negociación bloqueada, porque la prioridad es avanzar en los presupuestos generales del Estado. Y el primer paso es la tramitación de los objetivos de estabilidad que Junts mantiene bloqueados. Pero el tiempo pasa y Sumar considera que es imprescindible aprobar la conversión de los dos impuestos, aunque finalmente no se aprueben los PGE. Perder más de 2.000 millones de euros de recaudación a las energéticas y los bancos no debería ser negociable, según la formación de Yolanda Díaz. Y los criterios nacionalistas no deberían ser un obstáculo.

El Gobierno también comparte con el PNV la preferencia por introducir beneficios fiscales. En el caso de las energéticas, estarían vinculados a inversiones y, en el caso de los bancos, al mantenimiento de unos niveles de solvencia o rentabilidad. El Ejecutivo considera que la situación actual no durará para siempre en ninguno de los dos sectores y teme que este impuesto podría poner en riesgo su crecimiento o, incluso, su supervivencia, bajo ciertas circunstancias específicas. En el caso de los bancos, por ejemplo, si los tipos de interés vuelven a niveles tan bajos que se reduce mucho el margen de intermediación.

Hipoteca regulada

La negociación presupuestaria permite a los grupos políticos canalizar iniciativas que no son estrictamente fiscales. Sumar presentó esta semana la propuesta de una hipoteca fija regulada por el Estado que trasladará al Gobierno en el marco de negociación de los PGE.

En concreto, se trata de una hipoteca a tipo fijo con unas condiciones redactadas por el Estado y que tendrían que ofrecer todos los bancos. Entre ellas, el tipo de interés que tendrían que ofrecer los bancos sea el del bono a 10 años del Tesoro Público a largo plazo. Esto es, un coste de financiación más bajo del que tienen las empresas con mejor calificación crediticia para todos los hogares. Y, además, no tendría coste de apertura ni de cancelación. Las condiciones para el hipotecado son: tener un empleo estable y que el pago de las cuotas no supere el 40% de los ingresos del hogar.

Foto: espana-camina-hacia-una-burbuja-inmobiliaria

Sumar explica que se trata de un negocio justo para los bancos, ya que defiende que no asumen riesgo al conceder las hipotecas. Y da dos argumentos. El primero es que los créditos nunca son por el 100% del coste de la vivienda, sino el 80%, lo que implica que siempre existe un activo como aval. El segundo, que no existe la dación en pago, por lo que los hipotecados están obligados a devolver íntegramente su deuda.

Para evitar casos en los que los tipos de interés sean tan bajos que el préstamo no sea rentable para el banco, Sumar propone fijar un límite inferior del 1% para el tipo de interés de la hipoteca. De esta forma, la formación considera que aumentaría el número de operaciones a tipo fijo, para acercar a España a la media europea. En la eurozona, cerca del 70% de las hipotecas son a tipo fijo, mientras que en España es al revés: la mayoría son a tipo variable.

"Los bancos ganan más con las hipotecas a tipo variable y por eso las ofrecen preferentemente", explicó el diputado de Sumar y portavoz de economía, Carlos Martín Urriza, en la presentación de la propuesta. La formación presentará una Proposición No de Ley (PNL) con esta iniciativa para constatar si cuenta con apoyos para que salga adelante en el Congreso.

El Gobierno se ha comprometido con la Comisión Europea, en el marco del nuevo plan fiscal estructural, a hacer permanentes los gravámenes a la banca y las energéticas que ahora son extraordinarios. Las dos figuras, que se crearon para gravar los beneficios caídos del cielo, se van a quedar para siempre, o esa es la intención del Ministerio de Hacienda. Estos recursos servirán para financiar un aumento del gasto de algo más de 2.000 millones de euros, ya que las nuevas reglas fiscales permiten a los Estados poder emplear íntegramente el aumento de la recaudación cuando se produce por cambios normativos.

Impuestos
El redactor recomienda