El BCE baja los tipos de interés 25 puntos básicos y asume un peor horizonte económico
El BCE ha recortado el tipo de la facilidad de depósito al 3,5%, la segunda rebaja de los últimos tres meses, pero empeora las previsiones de crecimiento y avisa de la persistencia de la inflación
El Banco Central Europeo (BCE) ha recortado los tipos de interés en 25 puntos básicos, tal y como esperaban el mercado y los analistas en una decisión unánime del Consejo de Gobierno. La moderación de la inflación ha abierto margen al eurobanco para retomar el relajamiento de la política monetaria. Tras este movimiento, deja la facilidad de depósito (la herramienta que determina el precio del dinero) en el 3,5%, después de alcanzar el 4% en su pico más alto de la actual crisis inflacionista. La reunión, celebrada en Fráncfort, ha sido la primera a la que ha acudido el nuevo gobernador del Banco de España, José Luis Escrivá.
El BCE ha decidido retomar la bajada de tipos que comenzó en el mes de junio tras el parón adoptado en julio. En estos tres meses, la situación económica no ha mejorado (más allá de la previsible caída de la inflación). Es más, a tenor de sus nuevas previsiones económicas, incluso ha empeorado. El eurobanco ha rebajado su previsión de crecimiento económico para toda la serie de proyecciones en una décima cada año y ha advertido de que los riesgos están concentrados a la baja.
Ahora prevé un avance del PIB de la eurozona del 0,8% en 2024; del 1,3% en 2025 y del 1,5% en 2026. Esto es, dibuja un futuro gris para Europa con una actividad siempre ralentizada. "Las condiciones de financiación siguen siendo restrictivas, y la actividad económica es aún contenida, como reflejo de la debilidad del consumo privado y de la inversión", ha señalado el BCE en su comunicado. Además, ha advertido de una ralentización de la creación de empleo y una reducción del número de vacantes hacia niveles similares a los existentes antes de la pandemia.
Sin embargo, la inflación sigue sin dar la tregua que espera el BCE, por lo que las posibilidades para realizar una gran bajada de los tipos de interés son limitadas. "La inflación interna sigue siendo alta, ya que los salarios continúan subiendo a un ritmo elevado", ha advertido. Aunque ha mantenido sin cambios su horizonte de previsión para el IPC general, ha subido sus previsiones de inflación subyacente dado que los servicios se siguen encareciendo "a un ritmo superior al previsto". En concreto, la entidad ha subido en una décima su proyección de subida del IPCA subyacente, hasta el 2,9% en 2024 y el 2,3% en 2025.
En definitiva, se trata de un escenario en el que la economía mantiene un ritmo muy pobre con una inflación todavía por encima del 2%. El BCE anticipa un repunte de la inflación en los meses finales del año por efecto de la energía, y no espera que vuelva al 2% hasta la segunda mitad de 2025.
El banco ha recordado que no va a dar tregua a los precios y que mantendrá una política monetaria restrictiva hasta lograrlo. "El Consejo de Gobierno tiene la determinación de asegurar que la inflación vuelva a situarse pronto en su objetivo del 2 % a medio plazo, y mantendrá los tipos de interés oficiales en niveles suficientemente restrictivos durante el tiempo que sea necesario para lograr ese objetivo", ha apuntado.
La entidad ha anunciado también el estrechamiento del pasillo de los tipos de interés, esto es, la distancia de la tasa de los tres instrumentos del BCE (facilidad de depósito, financiación principal y facilidad marginal de crédito). Actualmente, el tipo de interés relevante es el de la facilidad de depósito, pero tarde o temprano volverá a serlo el tipo principal. Para evitar que en ese momento (para el que aún quedan años) se produzca mucha volatilidad en el mercado, el banco ha optado por reducir las diferencias de tipos entre ellos, desde 50 puntos básicos hasta 15 puntos básicos a partir del 18 de septiembre.
El Banco Central Europeo (BCE) ha recortado los tipos de interés en 25 puntos básicos, tal y como esperaban el mercado y los analistas en una decisión unánime del Consejo de Gobierno. La moderación de la inflación ha abierto margen al eurobanco para retomar el relajamiento de la política monetaria. Tras este movimiento, deja la facilidad de depósito (la herramienta que determina el precio del dinero) en el 3,5%, después de alcanzar el 4% en su pico más alto de la actual crisis inflacionista. La reunión, celebrada en Fráncfort, ha sido la primera a la que ha acudido el nuevo gobernador del Banco de España, José Luis Escrivá.