Es noticia
Empieza la 'slowbalization', el repliegue del comercio mundial ha llegado para quedarse
  1. Economía
El agotamiento del libre mercado

Empieza la 'slowbalization', el repliegue del comercio mundial ha llegado para quedarse

La gran liberalización de las reglas comerciales globales desde la década de los setenta ha dado paso a una época de proteccionismo creciente y lucha de los gobiernos por revertir la deslocalización

Foto: Foto: Reuters/Jon Nazca.
Foto: Reuters/Jon Nazca.
EC EXCLUSIVO Artículo solo para suscriptores

La globalización es uno de los asuntos más relevantes a discutir por economistas, políticos y público en general. El libre mercado de bienes y capitales era, hasta el estallido de la burbuja inmobiliaria, el paradigma para los economistas. Sin embargo, los excesos acumulados durante años en forma de burbuja financiera estallaron en 2008. Desde entonces, el comercio mundial no ha vuelto a ser el que era. O más exactamente, ha seguido siendo el mismo que era, quedando estancado durante ya tres lustros.

Esto es lo que señala el Fondo Monetario Internacional en un artículo publicado esta semana, en el que calcula la evolución del comercio global como porcentaje del PIB. Desde el año 2008, el comercio mundial entró en fase de estancamiento, rompiendo así una racha de medio siglo. “La globalización se estabilizó en la década y media desde la crisis financiera mundial”, señalan los autores Shekhar Aiyar y Anna Ilyina.

Foto: Planta de producción de VW en Navarra. (EFE)

Es cierto que en este periodo los países occidentales vivieron la fase del estancamiento secular y posteriormente la crisis del coronavirus y la energética, lo que no ha ayudado al crecimiento del comercio. Pero también es cierto que en esta fase han proliferado medidas proteccionistas y políticas para la relocalización de la producción, lo que ha frenado la globalización.

El FMI divide el último siglo y medio de comercio mundial en cinco fases. En tres de ellas se produce una clara expansión de las exportaciones. La primera se prolonga desde la segunda mitad del siglo XIX hasta la Primera Guerra Mundial, un periodo dominado por la industrialización en las economías desarrolladas y el rápido desarrollo del transporte. El comercio internacional comienza su despegue llegando a suponer algo más del 30% del PIB mundial.

A partir de la Gran Guerra, el mundo entra en una fase de bloques y de proteccionismo que recorta el peso de las exportaciones a poco más del 15% del PIB a principios de la década de los cuarenta. El FMI señala que en 1945 comienza una nueva fase del comercio mundial, coincidiendo con los acuerdos de Bretton Woods para la creación del patrón dólar-oro y también para la creación del propio Fondo Monetario Internacional para ayudar a los países a solucionar sus problemas de balanza exterior. Sin embargo, durante las dos primeras décadas, el comercio mundial se mantuvo estancado y no fue hasta los años setenta cuando volvió a ganar fuerza.

A partir de ese momento, llega la época de la gran liberalización de la economía bajo la premisa de dejar que el mercado asigne los recursos de la manera más eficiente posible. Lo que en un principio parecía eficiencia se convirtió en una asignación de recursos basada en la acumulación de capital y deudas que hizo implosionar la economía mundial en el fatídico año 2008.

Lo que en un principio parecía eficiencia se convirtió en una asignación de recursos basada en la acumulación de capital y deudas

Desde ese momento, el comercio no ha vuelto a recuperar su ritmo de crecimiento, aunque es cierto que sigue representando en torno al 60% del PIB global. Los países se han replegado sobre sí mismos, buscando políticas de estímulo de la producción nacional. El paradigma del libre mercado ha dado paso a otro basado en la lucha contra la desigualdad y la intervención pública para estimular la inversión en sectores estratégicos.

La fase actual, conocida como slowbalization, “está caracterizada por una ralentización prolongada en el ritmo de reformas comerciales y el debilitamiento del apoyo político al libre comercio entre crecientes tensiones geopolíticas”, señala el Fondo. Esta nueva fase ha dado pie a un debate entre economistas sobre el juego de suma cero del comercio mundial. Cuando la globalización se entiende como un equilibrio de reparto de una renta constante, la deslocalización de la producción implica quitar PIB a un país para dárselo a otro; por el contrario, si la globalización se entiende como un factor que crea riqueza, entonces es posible que las dos partes ganen.

Foto: Foto: EC Diseño.
TE PUEDE INTERESAR
No des por muerta la globalización: simplemente se está transformando
The Wall Street Journal. Stephen Wilmot

La literatura económica sitúa el resultado de la globalización en un punto intermedio: si bien ha ayudado al crecimiento del PIB global, también ha afectado de forma netamente negativa a los países occidentales. Esto es, han perdido más de lo que han ganado. Estos resultados también son heterogéneos entre grupos de población, ya que mientras los trabajadores del sector industrial son los más afectados, los de los servicios de alto valor añadido se han visto beneficiados con precios más bajos gracias a la globalización.

Pero más allá del análisis de los beneficios o perjuicios económicos de la globalización, la última fase de la slowbalization está dominada por las tensiones geopolíticas, tanto por la guerra en Ucrania como, sobre todo, por la desconfianza mutua entre EEUU y China. En esta coyuntura, las políticas proteccionistas están triunfando y el resultado se observa en los datos globales de comercio exterior.

“El número de medidas proteccionistas está creciendo”, señalan los autores, especialmente en "sectores de alta tecnología, lo que probablemente esté relacionado con la seguridad nacional o la competencia estratégica". Pero, además de las medidas de política económica, las empresas también están optando por recortar sus cadenas de producción, ya que la pandemia y la posterior guerra en Ucrania mostraron la debilidad de depender intensamente de la producción en terceros países.

* Si no ves correctamente este formulario, haz clic aquí.

El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, pronunció el jueves un discurso en el Cañada Blanch Centre de la London School of Economics sobre la desglobalización y el acortamiento de las cadenas de valor. De Cos señala que las empresas no están tanto tratando de relocalizar la producción como de encontrar proveedores locales que les permitan diversificar la procedencia de sus insumos. El 44% de las multinacionales está desarrollando redes de suministro regionales, frente al 25% de 2021. Casi el doble, lo que muestra la preocupación del tejido productivo por garantizar la llegada de insumos.

El gobernador del Banco de España señala tres nuevas tendencias en la globalización: la ya señalada regionalización de las cadenas de valor, la diversificación en el suministro y la preferencia de la seguridad de los insumos sobre la eficiencia. "Estas tendencias bien podrían implicar una mayor ralentización del proceso de globalización o incluso resultar en presiones desglobalizadoras", explicó en su discurso.

Está por ver si se produce definitivamente un repliegue del comercio mundial una vez que la situación económica se normalice y salga de este bucle de tres años de recaídas. También está por ver su impacto sobre la reducción de la pobreza a nivel mundial, ya que la globalización ayudó a los países emergentes en el crecimiento de su capital físico gracias a la inversión de las multinacionales. Además, los mayores costes de producción que implica la relocalización hacia los países desarrollados están generando ya tensiones inflacionistas que afectan más a las rentas bajas y a los países en desarrollo, advierte el FMI.

La globalización es uno de los asuntos más relevantes a discutir por economistas, políticos y público en general. El libre mercado de bienes y capitales era, hasta el estallido de la burbuja inmobiliaria, el paradigma para los economistas. Sin embargo, los excesos acumulados durante años en forma de burbuja financiera estallaron en 2008. Desde entonces, el comercio mundial no ha vuelto a ser el que era. O más exactamente, ha seguido siendo el mismo que era, quedando estancado durante ya tres lustros.

Globalización Comercio electrónico Fondo Monetario Internacional (FMI)
El redactor recomienda