Es noticia
La edad real de jubilación se estanca en 64,7 años: el 40% lo hace de forma anticipada
  1. Economía
DATOS DEL PRIMER TRIMESTRE TRAS LA REFORMA

La edad real de jubilación se estanca en 64,7 años: el 40% lo hace de forma anticipada

Uno de los objetivos prioritarios de la última reforma de las pensiones era prolongar la edad real de jubilación. No está sucediendo eso. Cuatro de cada 10 pensionistas lo hace de forma anticipada

Foto: La marea pensionista en Barcelona. (EFE/Enric Fontcuberta)
La marea pensionista en Barcelona. (EFE/Enric Fontcuberta)
EC EXCLUSIVO Artículo solo para suscriptores

El endurecimiento de las jubilaciones anticipadas buscado con la última reforma de las pensiones no parece que, por el momento, esté dando los resultados deseados. Los últimos datos de la Seguridad Social, que ya recogen información del primer trimestre (la ley entró en vigor el pasado 1 de enero), muestran que la edad de jubilación de las nuevas altas se mantiene en 64,7 años, es decir, el mismo número de años que en 2021. En todo caso, una cifra muy parecida a la de 2020, cuando la edad real de jubilación (no la legal) se situó en 64,6 años.

Esto es así porque el número de trabajadores que se jubila antes de los 65 años sigue siendo importante, aunque con una significativa diferencia en función del régimen de cotización. Mientras que los trabajadores del régimen general (de media) se jubilan a los 64,6 años, los autónomos lo hacen a los 66,2 años. En todo caso, lo relevante es que el 40,6% de los trabajadores se jubiló en el primer trimestre de este año antes de los 65 años, cuando en 2021 este porcentaje fue del 38%.

Los datos más recientes muestran, en concreto, que 35.488 trabajadores se jubilaron antes de los 65 años entre enero y marzo, lo que significa que, si se anualiza esa cifra, el año acabará con alrededor de 141.952 jubilaciones antes de la edad legal. Esta cifra es superior a los 120.432 de un año antes o a los 109.581 de 2020, lo que refleja las dificultades de la Seguridad Social para elevar la edad real de jubilación, que históricamente ha sido uno de los objetivos del sistema público de protección social. Entre las causas que explican lo que sucede se encuentra el hecho de que muchas jubilaciones están en condiciones de acogerse a la legislación de 2011, más favorable.

Foto: El ministro de la Seguridad Social, José Luis Escrivá. (EFE/Javier Etxezarreta)

La reciente reforma de la Seguridad Social, que entró en vigor el pasado 1 de enero, pretende, como se dice en el preámbulo, actuar sobre el acceso a la pensión de jubilación a través de fórmulas voluntarias y más equitativas, “que favorecen un progresivo alineamiento de la edad efectiva y de la edad ordinaria de jubilación como vía para reforzar la sostenibilidad del sistema en el medio y largo plazo”. Lo cierto, sin embargo, es que desde 2013, cuando entró en vigor la ley que amplió la edad de jubilación tras el periodo de carencia, se ha pasado de una edad media de 64,2 años a los actuales 64,7 años, lo que da idea de los problemas del sistema para acercar la edad legal y la edad real de jubilación.

Tendencia creciente

El sistema de Seguridad Social, como se sabe, dispone de dos vías de entrada al derecho a recibir una prestación de jubilación, cuando el beneficiario ha alcanzado los 65 años, con 37 años y seis meses cotizados, o a los 66 años y dos meses (en 2022), cuando se ha cotizado por debajo de aquellos años. Durante el primer trimestre de este año, 51.833 trabajadores se han jubilado con 65 o más años, con una tendencia claramente creciente. Precisamente, por la prolongación de la vida laboral que exige la Seguridad Social para tener acceso a la prestación.

La cifra de jubilaciones anticipadas es relevante no solo por lo que supone en términos del cumplimiento de los objetivos, sino por la dimensión económica que incorpora. Hay que tener en cuenta que en los presupuestos de 2022 el Gobierno introdujo una aportación a la Seguridad Social (que se paga con impuestos, no con cotizaciones) equivalente a 2.079 millones de euros para cubrir el coste de las pensiones anticipadas involuntarias con edades inferiores a la legal. A esa cantidad hay que añadir otros 387 millones por jubilaciones anticipadas sin coeficiente reductor y sin cotización adicional.

Según datos de la Seguridad Social, la pensión media de las altas iniciales con menos de 54 años se sitúa en 2.564 euros al mes, mientras que en el caso de quienes acceden a la prestación con 65 años alcanza los 1.519 euros, por lo tanto, un 40% menos. Ahora bien, llegados a los 66 años, la pensión media de jubilación baja hasta los 968 euros. Algo que puede explicar el interés de la Seguridad Social en prolongar la edad de jubilación. La pensión media del sistema de las nuevas altas de jubilación (las más altas) durante el primer trimestre de 2022 se sitúa en 1.483 euros.

Foto: El ministro de la Seguridad Social, José Luis Escrivá. (EFE/Zipi)

Esta cifra, en todo caso, baja de forma significativa si en lugar de tener en cuenta solo las pensiones de jubilación se incorporan las del resto del sistema (viudedad, orfandad o incapacidad permanente); en este caso, la pensión media se sitúa en 1.087 euros al mes. La diferencia, sin embargo, vuelve a estar en los detalles. La distancia entre la cuantía de las pensiones que causan baja y las altas iniciales sigue siendo muy elevada, lo que se explica, lógicamente, tanto por el número de años cotizados como, sobre todo, por las bases de cotización, que en las últimas décadas han crecido de forma muy relevante.

Los nuevos pensionistas reciben de media 1.478 euros por 14 pagas

Esto explica que en las altas iniciales, incluidos todos los regímenes, la cuantía media sea equivalente a 1.137 euros, mientras que en las bajas definitivas la pensión media durante el primer trimestre de este año se sitúa en 972 euros. En el caso de las pensiones de jubilación, la distancia es aún mayor. Los nuevos pensionistas reciben de media 1.478 euros por 14 pagas, mientras que quienes causaron baja recibían 1.123 euros.

Es decir, hay una diferencia, el llamado efecto sustitución, de casi el 32%. Algo que explica las fuertes tensiones financieras que sufre la Seguridad Social, con un déficit estructural del sistema contributivo que BBVA Research ha estimado en el 2,2% del PIB (27.000 millones de euros). Mientras que el gasto en pensiones y otras prestaciones (sin clases pasivas) se habría situado en el 13,8% del PIB, los ingresos solo alcanzan el 11,6%.

El endurecimiento de las jubilaciones anticipadas buscado con la última reforma de las pensiones no parece que, por el momento, esté dando los resultados deseados. Los últimos datos de la Seguridad Social, que ya recogen información del primer trimestre (la ley entró en vigor el pasado 1 de enero), muestran que la edad de jubilación de las nuevas altas se mantiene en 64,7 años, es decir, el mismo número de años que en 2021. En todo caso, una cifra muy parecida a la de 2020, cuando la edad real de jubilación (no la legal) se situó en 64,6 años.

Seguridad Social Pensiones Cotizaciones Prejubilaciones Reforma laboral
El redactor recomienda