Bruselas mejora el crecimiento español en 2021 hasta el 6,2%, pero lo recorta en 2022

La Comisión Europea reequilibra sus previsiones para la economía española: más crecimiento en 2021, un recorte importante para 2022 y, en general, algo menos de optimismo que en las últimas previsiones de mayo aunque confiando en que la segunda mitad del año será muy positiva para la economía española. Sigue habiendo un tono muy optimista y está previsto que la economía del país recupere su nivel prepandémico en 2022. Hay cautela porque no puede tomarse otra actitud ante un escenario muy cambiante en el que las variantes como la delta están demostrando hasta qué punto los países muy dependientes del turismo, como España, Italia o Grecia, pueden atravesar turbulencias.

Para 2021, los técnicos comunitarios esperan que la economía española se expanda un 6,2%, tres décimas más de lo que habían previsto en el mes de mayo. Sin embargo, meten tijera en las previsiones para el 2022: un recorte de medio punto del PIB, del 6,8% al 6,3%. El tajo para el año que viene no se compensa con la mejora de las perspectivas para este curso, y se pierden un par de décimas de crecimiento en los dos próximos cursos según la Comisión Europea.

Bruselas no se ha deshecho del optimismo que ha protagonizado sus análisis económicos en las últimas ocasiones. De hecho, lo que ocurre es que ahora, a diferencia de en el mes de mayo, está claro, por ejemplo, que los desembolsos del fondo de recuperación de 750.000 millones de euros van a llegar a tiempo para tener impacto relevante ya este mismo curso, a pesar de que en mayo la Comisión Europea se mostraba muy cauta respecto al efecto de los fondos sobre el crecimiento de este curso. Mientras que el Gobierno creía que en 2021 ya se notarían, los técnicos comunitarios acumulaban sus efectos en el 2022. Además, Bruselas confía en el consumo privado y la inversión.

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“Datos recientes más optimistas significan que ahora se espera que el crecimiento del PIB en el segundo y tercer trimestres sea más rápido de lo previsto en la primavera. En el mercado laboral, el ritmo de creación de empleo y la salida de los trabajadores de los planes de trabajo a jornada reducida en los sectores de servicios más afectados se ha acelerado significativamente desde que finalizó el estado de emergencia el 9 de mayo”, señala el documento en el que se detallan las previsiones de la Comisión Europea y que ha sido presentado este martes por Paolo Gentiloni, comisario de Economía. “Otros indicadores continúan mejorando de manera constante, incluida la confianza de las empresas y los consumidores. Esto sugiere una solidificación de la recuperación en el segundo trimestre que se espera que continúe después”, añade el texto.

“Se espera que la economía de la UE experimente su crecimiento más rápido en décadas este año, impulsada por una fuerte demanda tanto desde dentro como a nivel mundial y una reapertura de los sectores de servicios más rápida de lo esperado en la primavera”, ha explicado Gentiloni, que ha explicado que, además, las restricciones que se adoptaron a finales de 2020 y principios de 2021 tuvieron un menor efecto que el que en un primer momento se había calculado. “Para mantener la recuperación encaminada, es fundamental mantener el apoyo de las políticas durante el tiempo que sea necesario. Fundamentalmente, debemos redoblar nuestros esfuerzos de vacunación, basándonos en el impresionante progreso logrado en los últimos meses: la propagación de la variante delta es un claro recordatorio de que aún no hemos salido de la sombra de la pandemia”, ha señalado el italiano.

Los datos españoles son los mejores de toda la Unión Europea, algo que se explica como el efecto rebote de haber sido una de las economías peor paradas durante la pandemia, con un desplome de casi el 11%. Ahora, mientras el crecimiento del conjunto de la Unión se encuentra en el 4,8% para este curso y el 4,5% para el próximo ejercicio, una mejora muy significativa respecto a las previsiones de mayo.