Octubre creó 114.000 empleos gracias al inicio del curso escolar y al sector público

El mes de octubre se saldó con un buen resultado en el mercado laboral si se tiene en cuenta el difícil contexto económico de España como consecuencia de los rebrotes del virus. A lo largo del mes se incorporaron 113.975 nuevos afiliados a la Seguridad Social, lo que supone el segundo mejor octubre de toda la serie histórica. En total, el número de afiliados medios del mes fue de 18,99 millones, y España se queda así a las puertas de recuperar los 19 millones de cotizantes. Es importante señalar que la Seguridad Social no ha publicado las cifras de los nuevos ERTE como consecuencia del estado de alarma porque justifica que todavía no tiene estos datos, lo que imposibilita un análisis fino del mercado laboral.

Los datos agregados son positivos, sin embargo, un análisis en detalle de las cifras deja algunas lecturas preocupantes. La más importante es que la creación de empleo se centró en tres sectores: administraciones públicas; educación, por el el inicio del curso, y las oficinas, por la vuelta del trabajo presencial. Estos sectores difícilmente se podrán mantener durante mucho tiempo como los motores del empleo y en algún momento tendrán que ser sustituidos por el sector privado. Además, hay un factor aritmético que hace que octubre se beneficie de la intensa creación de empleo de septiembre que explicaremos más adelante. Por último, si se ajustan los datos por estacionalidad, se trata del peor octubre desde 2015, lo que confirma la debilidad real de estas cifras.

En cuanto a los sectores de creación de empleo, sólo la educación ya generó 135.000 nuevos afiliados, lo que significa que el resto de actividades destruyeron algo más de 27.000 empleos. En octubre se produce la vuelta a las aulas y a otras actividades formativas, como academias, clases especializadas, formación profesional, etc., que provoca una fuerte creación de empleo. De hecho, en octubre de 2019 fue mucho más intensa, incorporando a más de 151.000 cotizantes.

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Este año los datos han sido mejores en el sector de la sanidad y los servicios sociales y la administración pública, dos servicios que se han reforzado en las últimas semanas como consecuencia de los efectos de la segunda ola. El empleo público (descontados educación y sanidad) aumentó en 27.000 personas, 10.000 nuevos afiliados más que en octubre de 2019. En cuanto a la sanidad y cuidados sociales, se han perdido 15.000 empleos, lo que supone 20.000 empleos mejor que hace un año.

El regreso del trabajo presencial tras el fin del carácter preferente del teletrabajo, ha generado una oleada de contrataciones de personal administrativo y servicios auxiliares para las oficinas. En total, a lo largo del mes se incorporaron más de 26.000 trabajadores de este sector, casi cuatro veces más de lo normal. El comercio también vivió un mes muy intenso, creando algo más de 5.000 empleos que contrastan con los 6.000 que se perdieron en octubre de 2019. Los rebrotes afectaron intensamente al sector de la hostelería, lo que anticipa el calvario que sufrirá en los próximos meses de estado de alarma. En total se perdieron más de 85.000 empleos, casi 25.000 más que hace un año.

En cuanto a la aritmética de los datos, el mes de octubre muestra una aparente creación de empleo a lo largo del mes que, en realidad, es consecuencia del dinamismo del mes de septiembre, cuando los rebrotes todavía no preocupaban. Desde el día 27 de agosto (así se evita el efecto destrucción de empleo de final de cada mes) hasta el 29 de septiembre se crearon 183.000 empleos, lo que da buena muestra del ritmo del mercado laboral en esos días. Sin embargo, en octubre se ha frenado esta tendencia y desde entonces, hasta el 29 de octubre apenas se incorporaron 21.000 trabajadores.

Esto significa que la comparativa de la media mensual de octubre respecto a septiembre fue muy positiva en los primeros días del mes, pero muy pobre en los últimos. Gracias a la aritmética, octubre recogió los buenos datos de creación de empleo del mes de septiembre, gracias a que las cifras de afiliación se miden en medias mensuales para evitar la distorsión que provocan los fines de semana y los últimos días del mes.

La realidad es que el mercado laboral español alcanzó la cota de los 19 millones de afiliados a finales de septiembre y en esos términos se ha movido también a finales de octubre (19,031 millones el 29 de octubre, el mejor día del mes). Este dato supone un techo para el empleo pero, lo que es más importante, indica cómo apenas se ha generado un avance en la ocupación desde finales de septiembre. Estas cifras sí coinciden con la debilidad reflejada por la economía española en las últimas semanas del mes como consecuencia de los rebrotes del virus y el decreto del estado de alarma.

Esta ralentización del empleo se observa también en la tasa de variación anual de la afiliación, que prácticamente se estancó en septiembre. En concreto, el número de afiliados en octubre fue un 2,26% menos que en el mismo mes del año anterior, cifra prácticamente igual al -2,31% que se registró en septiembre. Otro dato que muestra la ralentización del empleo que se salvó gracias a las contrataciones del sector público y la vuelta a las oficinas.

A pesar de la creación de empleo, el paro volvió a subir, como siempre hace en los meses de octubre. Es cuando se produce el final del verano y muchos trabajadores se dan de alta en las oficinas de empleo para empezar a buscar un trabajo. Sin embargo, los datos fueron mejores que los de otros años: el desempleo subió en 49.600 personas. Se trata del mejor dato en un mes de octubre desde 2016, pero consolida el número de parados por encima de los 3,8 millones.