Las grandes empresas facturaron un 12,5 % menos hasta julio

La facturación de las grandes empresas durante los siete primeros meses del año fue un 12,5 % inferior a la del mismo periodo de 2019, una caída ligada al estado de alarma y la pandemia de coronavirus que se ha ido suavizando a medida que las compañías volvían a la actividad.

Así, los descensos de ventas comenzaron en febrero (0,2 %) y marzo (12,5 %) para alcanzar su mayor intensidad en abril (32,6 %) y después suavizarse al 23,3 % en mayo, el 12,2 % en junio y el 7,1 % en julio, de acuerdo con el informe de Ventas, empleo y salarios en las grandes empresas publicado este miércoles por la Agencia Tributaria.

La pérdida de cifra de negocios de los siete primeros meses estuvo lastrada tanto por las ventas interiores como por las dirigidas al exterior, que cedieron un 14,1 %, con mayor intensidad en las dirigidas a terceros países (16,8 %) que las destinadas a socios comunitarios (11 %).

En cuanto a las ventas interiores, cayeron un 12 % en los siete primeros meses del año, lastradas por los servicios (12,2 %) y la industria (12,1 %), así como, en menor medida, por la construcción (11,3 %) y la agricultura (7,9 %).

Por actividades, destaca el comportamiento a la baja de la hostelería y restauración (51,5 %), los servicios culturales y recreativos (34,5 %), el comercio minorista de vehículos (26,9 %), la fabricación de material de transporte (29,7 %) o la industria textil, de la confección y del calzado (26,5 %). Hasta julio, las importaciones de las grandes empresas bajaron un 12,7 %.

Por lo que respecta al empleo, el número de perceptores de rendimientos del trabajo, un indicador fiscal que se aproxima al empleo asalariado, descendió un 6,2 % en julio, una bajada inferior a las de abril, mayo y junio, que superaron el 8 %, pero que sitúa la caída acumulada en los siete primeros meses del año en el 5,5 %.

El rendimiento bruto medio obtenido por estos trabajadores se mantuvo en el 0,2 % en julio, al igual que en junio, tras tres meses a la baja, si bien la Agencia Tributaria puntualiza que esos descensos se debían al efecto de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE).