Calviño augura otro mes negro del empleo y cree que el Gobierno "no puede hacer más"
"El impacto económico puede ser mucho más significativo si las medidas se tienen que alargar en el tiempo", dijo la vicepresidenta económica
Nadia Calviño, vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra de Economía, admitió que "lo normal" es que el dato de empleo de abril sea "igual de malo" que el de marzo, pero defendió la batería de medidas acordadas por el Ejecutivo desde el inicio de la crisis sanitaria del Covid-19. "Tenemos la sensación desde el Gobierno de que no se puede hacer más", dijo Calviño.
"Lo normal es que abril sea igual de malo. A nadie tiene que sorprender los malos datos de afiliación a la seguridad social y el número de personas afectadas por los ERTE", declaró la vicepresidenta en un entrevista en El Objetivo de LaSexta. "Todas las medidas las hemos puesto en marcha con el objetivo de mantener al máximo posible el tejido productivo y el empleo. Pero a nadie tiene que sorprender un impacto muy negativo en el mercado laboral".
"Estamos en el momento más duro desde el punto de vista epidemiológico y también económico y social. Para evitarlo, tenemos que tratar que la situación excepcional dure lo menos posible. Estamos tomando unas medidas para tratar de mantener al máximo la actividad y el empleo. Eso es lo que podemos hacer en este momento y luego pasar cuanto antes a esa fase de desescalada para que el tejido productivo pueda reactivarse".
Otro mecanismo en el que trabaja el Gobierno para amortiguar el impacto de la crisis en los trabajadores es un ingreso mínimo vital. Calviño se sumó al ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, que considera que no debe ser solo algo temporal. "Estamos trabajando para que se quede ya para siempre. Que sea un elemento ectrutural y permanente", dijo la vicepresidenta.
Calviño explicó que durante esa semana se tomará una decisión sobre qué hacer después de Semana Santa. El endurecimiento del confinamiento decretado por el Gobierno, y que obligó al cierre de sectores no esenciales de la economía, terminará el 9 de abril. Tras el próximo fin de semana, la situación puede ser diferente. "Iremos viendo cómo van los distintos indicadores, veremos las conlcusiones de los expertos y si después de Semana Santa ya podemos pasar a la fase de desescalamiento o hay que tomar medidas adicionales".
Esa fase desescalamiento, señaló la vicepresidenta, es clave para acelerar la recuperación económica. "Todos los analistas preven esa recuperación en V, pero hay que ser tremendamente prudentes. El impacto económico puede ser mucho más significativo si las medidas se tienen que alargar en el tiempo. Es importante atajar la crisis sanitaria para pasar a una fase en la que progresivamente podamos ir activando aquellos sectores hibernados", explicó.
En la entrevista, Calviño afirmó que España no tiene un problema de acceso a la financiación y que se está trabajando en la utilización del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE). También defendió la necesidad de algún mecanismo de mutualización de la deuda que permita a los países más afectados por el Covid-19 hacer frente al aumento del gasto. "Va a haber un aumento del déficit y de la deuda (...) Hay que dar una respuesta europea. Mutualizar la deuda, se llame eurobonos, coronabonos, lo que sea. Mientras llega eso, estamos avanzando para ver cómo pdoemos hablitar instrumentos que nos proporcionen la liquidez lo antes posible".
Nadia Calviño, vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra de Economía, admitió que "lo normal" es que el dato de empleo de abril sea "igual de malo" que el de marzo, pero defendió la batería de medidas acordadas por el Ejecutivo desde el inicio de la crisis sanitaria del Covid-19. "Tenemos la sensación desde el Gobierno de que no se puede hacer más", dijo Calviño.