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Trump estalla contra China y ordena a las firmas estadounidenses que salgan del país
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Tras anunciar Pekín nuevos aranceles

Trump estalla contra China y ordena a las firmas estadounidenses que salgan del país

La tensión entre ambas potencias ha alcanzado su punto máximo. En Twitter, el presidente de EEUU ha arremetido contra Xi Jinping acusando de "robar dinero año tras año"

Foto: Donald Trump y Xi Jinping, presidentes de EEUU y China, en una cumbre. (Reuters)
Donald Trump y Xi Jinping, presidentes de EEUU y China, en una cumbre. (Reuters)

La tensión comercial entre China y Estados Unidos ha alcanzado sus niveles más altos este viernes. Cuando parecía que ambas potencias trataban de dar pasos para descongelar las relaciones, el anuncio de nuevos aranceles por parte de Pekín ha desatado la ira de Donald Trump, que ha arremetido contra el gigante asiático.

En una serie de mensajes en su perfil personal de Twitter, Trump ha asegurado que EEUU ha "perdido, de forma estúpida, trillones de dólares con China a lo largo de los años" y ha acusado a su rival comercial de "robar nuestra propiedad intelectual a unos niveles de miles de millones anuales".

"No voy a permitir que eso ocurra", decía, apuntando a que "no necesitamos a China y, francamente, sería justo decir que estaremos mejor sin ellos". En sus mensajes encadenados, Trump ha "ordenado a las empresas estadounidenses que busquen una alternativa a China" y que salgan del país para "llevar las empresas a casa y hacer los productos en Estados Unidos".

Del mismo modo, ha anunciado que responderá a los aranceles de China "hoy mismo" y se ha vanagloriado de que "la economía estadounidense es mucho más grande que la de China gracias a nuestras ganancias en los últimos dos años y medio. ¡Y seguiremos así!

Powell, eclipsado en Jackson Hole

Justo antes de que se desatara la tormenta tuitera de Trump, el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, pronunciaba su discurso en la reunión de banqueros centrales que se está celebrando en Jackson Hole. El cuestionado dirigente de la Fed ha criticado a Trump, pero sus palabras han quedado en la sombra ante el estallido del comandante en jefe.

placeholder Jerome Powell, en primer plano, paseando por Jackson Hole. (Reuters)
Jerome Powell, en primer plano, paseando por Jackson Hole. (Reuters)

Powell ha defendido su política monetaria y ha señalado que "la inflación parece estar acercándose a nuestro objetivo del 2%" con "la economía en un momento favorable, pero que se enfrenta a riesgos importantes".

Pese a que no ha hecho una mención directa, el máximo dirigente de la Fed ha mantenido siempre una crítica constante a Donald Trump. "Tenemos mucha experiencia en abordar los típicos eventos macroeconómicos, pero incorporar la incertidumbre comercial en nuestro modelo es un reto nuevo".

"Estamos examinando las medidas de política monetaria que se han tomado tanto en tiempos de tranquilidad como de crisis", explicaba Powell en su discurso, señalando que "nos estamos planteando si deberíamos extender el repertorio".

También se ha referido a los indicadores económicos que llevan tiempo avisando de la cercanía de una eventual crisis financiera. "Hemos visto una mayor evidencia de ralentización global y estamos monitoreando su impacto en la economía", reconocía.

Powell no se ha librado de las presiones de Trump ni durante su discurso. A la vez que el líder de la Fed se dirigía a sus colegas en Jackson Hole, su presidente se preguntaba en Twitter "quien es nuestro mayor enemigo, ¿Xi Jinping o Jay Powell?"

China impone aranceles

China no quiere saber nada de una tregua en la guerra comercial. Los acercamientos y los movimientos para destensar la situación protagonizados por Donald Trump han sido ignorados por Pekín, que ha anunciado aranceles a productos por valor de 75.000 millones de dólares, casi 68.000 millones de euros, a los productos fabricados en Estados Unidos.

El golpe es especialmente duro con el sector automovilístico, del que depende buena parte de la industria en el Medio Este del país, ya que el Ejecutivo de Xi Jinping ha establecido una carga del 25% sobre las importaciones de vehículos.

Foto: Un puerto de exportaciones. (Reuters)

De poco o nada han servido las conversaciones al más alto nivel que han mantenido las delegaciones comerciales de ambos países o la decisión de Trump de dar 90 días más a Huawei para salir del país. China no quiere saber nada de acercamientos, o al menos eso parece a tenor de esta decisión.

La mayoría de estos nuevos impuestos entrarán en vigor el 1 de septiembre, mientras que el resto se harán efectivos el 15 de diciembre. El calendario es calcado al que anunció Trump antes de retrasar los aranceles sobre productos tecnológicos o juguetes para no perjudicar el consumo interno en la potente campaña navideña.

placeholder Donald Trump. (Reuters)
Donald Trump. (Reuters)

El momento del anuncio tampoco es casualidad. El comunicado del Ministerio de Comercio chino ha llegado unas horas antes del discurso Powell, en la reunión de banqueros centrales en Jackson Hole, y también unos días antes de la cumbre del G7 en la localidad francesa de Biarritz.

Las bolsas de Europa y Estados Unidos ya están notando esta decisión. El Eurostoxx 600, índice que aglutina valores de todo el Viejo Continente, caía a rojos después de abrir la sesión con ganancias, mientras que los futuros de Wall Street se internaban en terreno negativo. Los fabricantes de coches estadounidenses son los más perjudicados, con General Motors, Tesla y Ford en retroceso. El Dow Jones de Industriales, el principal indicador, ha caído 622,60 puntos, un 2,37%, y cerrando la última sesión de la semana en 25.630,52; en tanto, el S&P cayó un 2,59 % y el Nasdaq, donde cotizan los grupos tecnológicos más importantes, se deslizó un 3%

Foto: Donald Trump, presidente de EEUU. (Reuters)

Parecía que las aguas estaban más calmadas después de la conversación telefónica que el pasado 13 de agosto mantuvieron el vicepresidente chino, Liu He, y los responsables de Comercio y el Tesoro de EEUU, Robert Lighthizer y Steve Mnuchin, que derivó en una minitregua ofrecida por Trump.

Ambas delegaciones tienen agendada una nueva llamada en los próximos días. Además, un equipo negociador chino tiene previsto viajar a Estados Unidos para mantener un encuentro cara a cara con la delegación comercial estadounidense.

La tensión comercial entre China y Estados Unidos ha alcanzado sus niveles más altos este viernes. Cuando parecía que ambas potencias trataban de dar pasos para descongelar las relaciones, el anuncio de nuevos aranceles por parte de Pekín ha desatado la ira de Donald Trump, que ha arremetido contra el gigante asiático.

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