España devuelve otros 2.000 M del rescate por adelantado (y le quedan 32.000 más)

España quiere quitarse cuanto antes de encima el rescate financiero. Un total de 41.300 millones tuvo que tomar prestados del resto de países de la eurozona durante lo peor de lo crisis. Y, aunque los intereses son bajos y la recuperación económica del país causa admiración, España sigue estando en deuda con sus socios.

Este jueves, el Gobierno español ha podido aprovechar una de las escasas oportunidades que da el fondo de rescate permanente de la eurozona para que se le devuelva dinero por adelantado. Ha sido un pago —el sexto anticipado— de 2.000 millones, con el que el país ha devuelto ya 9.600 millones de lo que tomó prestado. La deuda pendiente se reduce, pero aún se eleva a 31.700 millones. Pero, al menos, el país refuerza su imagen de fortaleza entre sus socios.

"El historial de España de reembolsos anticipados al ESM muestra sus buenas condiciones de acceso al mercado y su cómoda posición de liquidez. España es claramente una historia de éxito en la superación de la reciente crisis”, ha afirmado Klaus Regling, director gerente del fondo de rescate, el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE).

TE PUEDE INTERESAR

A la Eurozona no le preocupa que la crisis catalana impida a España el pago del rescate

María Tejero Martín

En un momento en que la eurozona se plantea si debe convertir al MEDE en un verdadero Fondo Monetario Europeo, Regling ha aprovechado también la ocasión para poner en valor la labor realizada por el MEDE durante los años duros de la crisis. “Me alegro de que haya jugado un papel tan útil”, ha afirmado el alemán.

España recurrió en 2012 a un préstamo de la eurozona tras constatar el agujero negro que se había abierto en su sector bancario y el riesgo de que las tensiones de los mercados, que limitaron su acceso a liquidez, le hicieran perder pie. Entre finales de 2012 y 2013 fue recibiendo en diferentes pagos el dinero de sus socios, a cambio del cumplimiento estricto de una serie de condiciones que iban más allá del saneamiento del sector financiero.

Este “amplio programa de reformas”, tutelado por el MEDE, la Comisión Europea y el Banco Central Europeo, es lo que permitió la pronta recuperación de la economía española, a ojos de Regling y buena parte de sus colegas. Durante los últimos dos ejercicios, España ha alcanzado cifras de crecimiento mayores que la media de sus colegas europeos. Sin embargo, aún arrastra consecuencias de la crisis, como la elevada tasa de desempleo, una abultada deuda pública, un déficit aún por encima de la media europea y un mayor índice de pobreza, entre otras.