Los salarios en España acumulan tres trimestres consecutivos de caídas

El salario por hora efectiva de trabajo en España acumula ya tres trimestres consecutivos en negativo. La recuperación de la economía y la intensa creación de empleo no se traslada a la retribución de los empleados y tampoco se consigue un empleo de calidad, por lo que los indicadores del mercado laboral llevan ya un año flaqueando. En concreto, el salario por hora cayó un 0,1% en el segundo trimestre del año (datos corregidos de estacionalidad y calendario) respecto al mismo periodo del año anterior. Un descenso que sigue a la caída del 0,2% en el primer trimestre y al descenso del 0,5% en los tres últimos meses de 2016, en pleno repunte de la inflación. En concreto, el salario neto por hora de trabajo en el segundo trimestre fue de 14,75 euros, lo que significa que desde finales de 2015 ha caído un 0,5%.

El escenario es peor si se toma el salario por trabajador en lugar del indicador de salario por hora, ya que la contratación a tiempo parcial o las horas perdidas mejoran esta última referencia. El salario por trabajador (ajustado de estacionalidad y calendario) cayó en el segundo trimestre un 0,2% interanual y acumula ya un año completo en negativo. En concreto, la retribución neta fue de 1.896 euros por trabajador y mes, lo que significa que en un año y medio el salario por trabajador ha caído un 0,6%, según los datos publicados por el INE.

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Este descenso en los indicadores de salarios es el primero que se produce en esta fase de recuperación iniciada a finales de 2013 y coincide con una fase de repunte de la inflación y en un momento de intensa creación de empleo. La subida de los precios acelera la pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores, lo que hace que no perciban todos los efectos de la recuperación. Por su parte, la caída del salario en una fase de intensa creación de empleo muestra que los nuevos puestos de trabajo son de baja calidad, lo que tira de la media de los salarios hacia abajo. A esto se une la ruptura de la negociación colectiva a nivel estatal, que impidió establecer una senda de referencia para el resto de convenios laborales y que provoca que las subidas salariales pactadas estén por debajo de la inflación.

La caída del salario por hora en una fase de intensa creación de empleo muestra que los nuevos puestos de trabajo son de baja calidad

Si se une la rebaja de los salarios, con las distintas bonificaciones y reducciones a la contratación y otras ayudas, el resultado es que las empresas llevan un año y medio completo reduciendo los costes laborales totales por trabajador. En este indicador no sólo está recogido el salario neto, sino también el resto de costes que asume el empleador, por lo que incluye el pago de cotizaciones e impuestos. En el segundo trimestre del año, el coste laboral por trabajador cayó un 0,2% interanual (corregido de estacionalidad y calendario), y lleva en negativo desde el primer trimestre de 2016. Esta contención salarial ha ayudado a la intensa creación de empleo que ha vivido España en los últimos años, pero con un coste alto y es que la recuperación no termina de llegar a los asalariados.

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Por comunidades autónomas, el coste laboral por trabajador subió más en Navarra, con un avance del 3,4%; seguido de Baleares, con un 2,5% y la Comunidad Valenciana, con un 2%. Por su parte, las principales caídas se produjeron en Castilla y León, con un descenso del 4,1%; Murcia, un 2,7% y Cantabria, un 2,1%. Los costes laborales más altos volvieron a concentrarse en la Comunidad de Madrid, donde superó una vez más los 3.000 euros mensuales por trabajador, seguido de País Vasco, con 2.920 euros y de Cataluña, con 2.773 euros. Muy lejos de Extremadura, región donde los costes laborales son más bajos, con 2.117 euros mensuales por trabajador.