Es noticia
El BCE cree que España debería investigar la salida de depósitos del Popular
  1. Economía
¿información privilegiada?

El BCE cree que España debería investigar la salida de depósitos del Popular

La presidenta del Mecanismo Europeo de Supervisión ha agitado el fantasma del uso de “información privilegiada”, en relación con la sangría de depósitos

Foto:  la presidenta del Mecanismo Europeo de Supervisión (MUS), Danièle Nouy. (EFE)
la presidenta del Mecanismo Europeo de Supervisión (MUS), Danièle Nouy. (EFE)

Casi dos semanas después de la inesperada venta del Popular al Santander por un euro, la justicia española tiene trabajo por hacer. Al menos así lo cree la presidenta del Mecanismo Europeo de Supervisión (MUS), Danièle Nouy, quien ha agitado el fantasma del uso de “información privilegiada”, en relación con la sangría de depósitos que agravó los problemas de liquidez del Popular hasta ponerlo al borde del abismo.

“Ciertamente hay margen para que la justicia española investigue esos movimientos, con el objetivo de ver si (hubo) información privilegiada que ayudó a ciertas personas a intentar protegerse mejor que los pequeños depositantes”, ha afirmado Nouy durante una comparecencia ante la Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios del Parlamento Europeo.

Nouy reconoce que analizar una cosa así “no está en poder” del MUS, que forma parte del BCE y supervisa los mayores bancos de la eurozona. Pero cree que "es una cuestión para que la justicia española y quizás las autoridades de mercado investiguen y tomar medidas si fuese necesario”.

Dardo a Saracho

Durante su comparecencia, Nouy ha lanzado también un dardo a la antigua directiva del Popular, que presidía Emilio Saracho. Preguntada por cómo los motivos que empujaron al BCE a declarar a la entidad “en quiebra o riesgo de quiebra” en la noche del martes 6 al miércoles 7, la francesa ha asegurado que "a veces un banco tiene que desaparecer porque la directiva no ha tomado las decisiones correctas cuando debía hacerlo”. Y ha defendido en todo momento la actuación de los supervisores europeos, pese a las críticas que le han llovido desde las bancadas de la Eurocámara.

“En tres años hemos declarado solo un banco ‘en quiebra o riesgo de quiebra’ y pudo reabrir al día siguiente”, justifica la presidenta del Mecanismo Único de Supervisión. La francesa ha celebrado esta demostración práctica del buen funcionamiento de los nuevos instrumentos de la eurozona para hacer frente a crisis bancaria, pero no ha disipado ninguna de las sombras aún por esclarecer.

​Se aferra a la confidencialidad

La presidenta del MUS se ha aferrado a su cláusula de confidencialidad que va asociada a su cargo para evitar dar detalles que aclaren cómo es posible que el Popular se quedara sin colateral en tan solo dos días, sobre el motivo por el que no se utilizaron otros mecanismos para asegurar la liquidez del banco si se consideraba solvente, ni en qué situación se encontraba un banco que había aprobado los test de estrés del propio BCE.

“Seguramente había un problema de solvencia detrás”, ha asegurado el eurodiputado del PSOE Jonás Fernández, quien ha pedido también a Nouy que se haga público el informe de Deloitte que valoraba el agujero del Popular entre 2.000 y 8.500 millones de euros, lo que propició su venta por tan solo un euro al Santander.

¿Un precedente?

Nouy, que asegura que se hará un 'post-mortem' muy detallado de lo sucedido en torno al Popular, cree que por el momento la primera lección que se puede aprender de la resolución de la entidad es que se debe reforzar los poderes de los supervisores. Ni un atisbo de autocrítica, ni de explicación, 'au cointraire': mostró su esperanza en que si vuelve a darse una situación similar, se pueda volver a actuar en el mismo modo que se hizo con el Popular.

Y es que, cree, “es lo mejor que podemos hacer”, ya que se aseguró la continuidad de las operaciones del Popular a la mañana siguiente y ningún depositante perdió dinero. No solo eso, sino que Nouy afirma que se logró evitar que se tuviera que recurrir de nuevo a fondos públicos para rescatar un banco, sin causar tensiones en los mercados. Pese a Liberbank, por el que ha pasado de puntillas.

Casi dos semanas después de la inesperada venta del Popular al Santander por un euro, la justicia española tiene trabajo por hacer. Al menos así lo cree la presidenta del Mecanismo Europeo de Supervisión (MUS), Danièle Nouy, quien ha agitado el fantasma del uso de “información privilegiada”, en relación con la sangría de depósitos que agravó los problemas de liquidez del Popular hasta ponerlo al borde del abismo.

Banco Central Europeo (BCE) Emilio Saracho Banco Popular
El redactor recomienda