El 70% de los españoles cree que la situación económica será mejor o igual en 2016

La situación económica irá a mejor o, al menos, dejará de empeorar. Es lo que opinan siete de cada 10 españoles entrevistados para la encuesta ‘Expectativas económicas y felicidad en 2015’ realizada por DYM/WIN-GIA durante el mes de noviembre y con más de 60.000 entrevistas en 68 países (1.000 en España).

En concreto, el 44% de los entrevistados cree que la situación seguirá igual en 2016 y un 28% está convencido de que habrá una mayor prosperidad económica. Con respecto a 2012, estos últimos son los que más han aumentado, en hasta 21 puntos porcentuales. Es un porcentaje parecido a los que creen que el año será difícil (un 29%), pero este sector de la población ha caído en picado durante la última legislatura: en 2012, el pesimismo había sido la opción favorita para el 65% de los entrevistados.

Tanto entre los que trabajan como entre los desempleados, la porción mayor (40%) está convencida de que la situación económica de España seguirá exactamente igual. Donde se nota un mayor optimismo es entre los más jóvenes, de entre 18 y 24 años. Aquellos que, según el CIS, son los que votarían sobre todo a PSOE y Podemos. Los de más de 65 años, caldero de votos para el PP de acuerdo con el CIS, son los más proclives a la hora de indicar un nuevo año de dificultad económica.

Grecia, las peores perspectivas

Los españoles se sitúan así por encima de la media europea, donde solo el 14% cree que la situación será de prosperidad económica y un 30% tiene miedo a nuevas dificultades. Unos datos lastrados por un grupo de países que encabezan el 'ranking' del pesimismo mundial. Se trata de Suecia, Austria, Grecia, Italia y Bélgica, donde menos de 10 de cada 100 personas creen que 2016 será de prosperidad económica. En Atenas es donde más negro ven su futuro: el 70% (un récord a nivel global) opina que el nuevo año será de dificultad.

Europa se sitúa así como el continente con la media más alta de personas que creen en otro año más de penuria económica. Un escenario totalmente diferente al de Asia y África subsahariana, donde se concentra la esperanza hacia un crecimiento económico. Agrupados, los países de estas zonas son los que registran la media más alta de perspectiva de prosperidad económica, un 60% y un 45% respectivamente.