La caída del peso argentino se come 2.000 millones de euros de las empresas españolas

"Es el momento de hablar del plan de normalización cambiaria, o lo que se conoce en la jerga como el 'fin del cepo cambiario'. No deberíamos detenernos mucho", anticipó el pasado lunes Federico Sturzenegger durante su primer discurso como gobernador del Banco Central de la República Argentina (BCRA). No exageraba. Apenas 48 horas después, el nuevo Gobierno argentino de Mauricio Macri ponía fin a las restricciones en el uso de las divisas que el país venía aplicando desde finales de 2011.

Con esta medida, Argentina se liberaba de sus ataduras cambiarias y, por extensión, liberaba también las de su divisa, el peso. Tal como se esperaba, esta liberación desembocó en una notable depreciación de la divisa argentina, que abandonó así la intervenida situación previa para reflejar una más real. En concreto, el peso se desplomó este jueves un 27% contra el dólar, hasta los 13,3 pesos por dólar, y un 26% contra el euro, hasta los 14,4 pesos. A la inversa, el euro se apreció un 34,5%, aunque en un primer momento llegó a hacerlo más de un 40% y hasta superó provisionalmente los 15 pesos. Nunca antes, desde el nacimiento de la divisa europea en 1999, había alcanzado un cambio tan alto contra la moneda argentina.

Duro impacto de entrada...

Esta brusca reacción de la divisa causó un escalofríoen las empresas españolas presentes en Argentina, entre las que figuran varias de las principales cotizadas. Con el peso comprando muchos menos euros, los ingresos procedentes de los negocios argentinos sufrirán un tajo notable. "Las empresas españolas sufrirán un 'shock' importante de entrada", afirma Juan Carlos Martínez Lázaro, profesor de Economía del Instituto de Empresa.

Con las cifras de 2014 y las que las compañías cotizadas han ido publicando en 2015, las empresas españolas obtienen una cifra de negocio de entre 6.500 y 7.000 millones de euros en Argentina. Tras la caída de la divisa argentina de este jueves, que según los expertos ha conducido a un cambio que se mantendrá en el corto plazo, los ingresos en pesos que logren las empresas españolas podrían menguar en una cifra comprendida entre los 1.700 y los 2.000 millones de euros cuando se pasen a la divisa europea.

En este sentido, Telefónica ya sufrió un claro anticipo en 2014. A comienzos del año pasado, Argentina devaluó con fuerza el peso, una medida que se sintió hasta finales del ejercicio. Cuando acabó 2014, el peso estaba un 12,5% más bajo contra el euro que un año antes. Como consecuencia, y pese a que las ventas y los ingresos en pesos repuntaron, su traslado a euros reflejó una merma del 16% o más de 600 millones de euros. Y lo mismo ocurrió con el resultado operativo antes de amortizaciones (oibda), que se redujo en cerca de 200 millones de euros.

Ese descenso provocó que las ventas de la operadora de telecomunicaciones en Argentina se limitaran a 3.000 millones de euros, el 6% del total del grupo, con un resultado operativo antes de amortizaciones de 805 millones, el 5,2% del logrado por la empresa. En los nueve primeros meses de 2015 ya ha alcanzado esas cifras, puesto que Argentina proporcionó unos ingresos por valor de 2.932 millones de euros -el 8,3% del total- y un oibda de 782 millones -el 7%-. Ahora habrá qué comprobar el impacto final de la fuerte depreciación del peso en las cifras anuales.

La cadena de supermercados DIA también cuenta con una fuerte presencia en el país. En 2014, Argentina fue el origen del 14,6% de las ventas brutas, con 1.374 millones, cifras que ya han sido superadas en el acumulado de los tres primeros trimestres de 2015, puesto que han crecido hasta los 1.408 millones, el 18% del total.

Prosegur también se ve claramente afectada. Las ventas del área Argentina, en la que la empresa de seguridad incluye a Uruguay y Paraguay, representaron en 2015 el 18,4% del total, con 695 millones de euros, y en los nueve primeros meses de 2015 ya han crecido hasta los 723 millones de euros, casi el 25%.

Proporcionalmente, la compañía de juegos Codere es la que más intereses tiene en el país. En 2014, obtuvo casi 500 millones de euros en ingresos en Argentina, el 35% del total. En 2015, este porcentaje se acerca ya al 40%.

En el caso de los grandes bancos, su presencia en el país es inferior a la de otros países de la región, como Brasil o México. Para el Banco Santander, Argentina representó el origen del 4% del beneficio del grupo en 2014, con 298 millones de euros. En el caso de BBVA, también fue de 298 millones, que representaron el 11% del total.

... esperanza a medio plazo

Eso sí, más allá del duro impacto inicial, el fin del 'cepo' puede abrir una ventana de esperanza para los intereses españoles en Argentina. "Esta decisión acaba con una auténtica anomalía y representa la piedra angular a partir de la cual el Gobierno de Macri tendrá que acometer las reformas que precisa el país", sostiene Martínez Lázaro. Y añade: "Si Macri logra estabilizar la economía, y una vez superado el impacto inicial de la depreciación de la moneda, a medio plazo sería una oportunidad para las empresas españolas".