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S&P deja la calificación de España sin cambios porque no se fía del año electoral
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mantiene el rating en bbb y perspectiva estable

S&P deja la calificación de España sin cambios porque no se fía del año electoral

La agencia mejora su previsión de crecimiento para la economía española, pero también anticipa "desviaciones" sobre los "ambiosos" objetivos de déficit público para 2015 y 2016

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Sí... pero no. Standard & Poor's (S&P), una de las tres principales agencias de calificación del mundo junto con Moody's y Fitch, valora positivamente la evolución de la economía española y hasta elevas sus previsiones de crecimiento, pero considera que siguen existiendo riesgos sobre la situación fiscal y exterior. Y poniendo los pros y los contras en la balanza, ha resuelto dejar las cosas como estaban. Es decir, ha mantenido la calificación en BBB -un aprobado- con perspectiva estable. Vamos, que ni siquiera ha mejorado esta última etiqueta a una perspectiva positiva, algo con lo que sí se contaba.

La firma estadounidense considera que "las reformas aprobadas desde 2010 han situado a España en una posición favorable" para beneficiarse del viento de cola que sopla en toda Europa, manifestado en la caída del petróleo, la depreciación del euro y el programa de expansión cuantitativa (QE) del Banco Central Europeo (BCE). A partir de esta premisa, eleva sus previsiones para la economía española para el periodo 2015-2017 del 1,9 al 2,2%. Y deja la puerta abierta anuevas mejorasen el futuro.

Sin embargo, la consolidación de la recuperación económica no le basta a la agencia, que también manifiesta recelos. Principalmente en un frente: el político. "Creemos que las incertidumbres acerca del potencial cambio de las políticas macroeconómicas y fiscales siguen presentes en un año de elecciones regionales y generales", afirma.

El molesto ruido político

Pero va más allá. Primero, porque no tiene claro que las reformas emprendidas se mantengan: "Una incertidumbre significativa que vemos es la capacidad de los próximos gobiernos parapreservar el sólido historial de reformas que fomentan la competitividad, y el impacto que un posible cambio de política en el futuro podría tener sobrela principal debilidad de España, su tasa de desempleo desestacionalizada", situada en el 23,2%.

Y segundo, porque no cree que, en el contexto electoral, se vayan a cumplir los objetivos de déficit. "Teniendo en cuenta el intenso calendario electoral de este año, así como la posibilidad de un proceso de consolidación presupuestaria más gradual, proyectamos que el gobierno se desviará de sus ambiciosos objetivos para 2015 y 2016 del 4,2% y 2,8% del PIB, respectivamente", avisa.

Otras debilidades que menciona son que "la deuda de las empresas y los hogares sigue siendo alta", la posición deudora neta -"una de las más altas entre los soberanos calificados por S&P"- y la "amplia evidencia de la dualidad en el mercado laboral".

S&P fue la primera agencia en rebajar el rating español a comienzos de la crisis. En enero de 2009 lo redujo en un peldaño, de AAA hasta AA+. A esa rebaja le siguieron cinco más hasta 2012, que llevaron la calificación a BBB-, apenas un peldaño por encima del suspenso o bono basura, que es el que distingue a los emisores de deuda menos solventes. Ya en mayo de 2014 empezó a volver sobre sus pasos y consolidó a España dentro de la categoría de grado de inversión -en la que estánlos emisoresmás creíbles- al mejorarla nota crediticia en un escalón, hasta BBB.Es decir, donde la ha mantenido ahora.

Sí... pero no. Standard & Poor's (S&P), una de las tres principales agencias de calificación del mundo junto con Moody's y Fitch, valora positivamente la evolución de la economía española y hasta elevas sus previsiones de crecimiento, pero considera que siguen existiendo riesgos sobre la situación fiscal y exterior. Y poniendo los pros y los contras en la balanza, ha resuelto dejar las cosas como estaban. Es decir, ha mantenido la calificación en BBB -un aprobado- con perspectiva estable. Vamos, que ni siquiera ha mejorado esta última etiqueta a una perspectiva positiva, algo con lo que sí se contaba.

Rating Recuperación económica Déficit público