Inverco pide a Montoro que los fondos de pensiones puedan rescatarse a los 10 años

La reforma fiscal está en capilla –aunque es probable que no se aprueben los distintos proyectos de ley que la desarrollan hasta el 1 de agosto–; pero lo que es seguro es que Hacienda cuenta ya con las propuestas que le han hecho llegar los sectores más afectados. Entre ellos, la patronal Inverco, que reclama una política fiscal más agresiva en favor de los fondos de inversión y de pensiones.

Sus recetas se resumen en estos puntos.

1. Incorporación a los planes de pensiones de ventanas de liquidez en el largo plazo, con tributación

La patronal Inverco reconoce en su escrito que uno de los problemas que han impedido el despegue de los planes y fondos de pensiones es su escasa liquidez. O, dicho de otra forma, las contingencias previstas por la ley (fallecimiento, incapacidad o jubilación) son menores que las reales, de ahí que se proponga ampliar esta casuística.

En su opinión, esta falta de liquidez “desincentiva” la realización de aportaciones a los fondos de pensiones, sobre todo por parte de los trabajadores de menor edad. El resultado es que las aportaciones se “sacrifican” en favor de otras formas de ahorro no finalistas más líquidas. Lo que se propone en este caso es establecer la posibilidad de rescatar en un plazo de diez años las aportaciones realizadas. Una medida que, según Inverco, “no tendría ningún impacto fiscal, más bien lo contrario al anticiparse la recaudación”.

Su argumento es que los derechos consolidados rescatados estarían sujetos al mismo tratamiento fiscal que las prestaciones percibidas en caso de acaecimiento de las contingencias cubiertas o de los actuales supuestos excepcionales de liquidez. El rescate tributaría como renta del trabajo y se integrarían en la base imponible general no sólo las aportaciones, sino que también los rendimientos cotizarían al tipo marginal del contribuyente.

Desde la propia patronal se reconoce que las probabilidades de salir adelante con éxito su propuesta son escasas, toda vez que desde el Ministerio les han adelantado en reuniones privadas que el anteproyecto de ley no sufrirá modificaciones relevantes, y en ningún caso en este asunto.

2. Extensión de la figura del “Plan de Ahorro a Largo Plazo” a los Fondos de Inversión.

El anteproyecto remitido por el Gobierno crea una nueva figura para fomentar el ahorro denominada Plan de Ahorro a Largo Plazo, que se nutrirá, fundamentalmente, de seguros individuales y depósitos de ahorro. Y lo que quiere Inverco es incorporar en esta categoría a los fondos de inversión de ahorro a largo plazo que funcionan desde hace casi 20 años. Su argumento es que cumplen el requisito de garantizar como mínimo el 85% de la cantidad aportada. De hecho, asegura, “este tipo de fondos son instrumentos muy adecuados a la finalidad perseguida, toda vez que, además de cumplir el requisito de la garantía, tienen un gran atractivo para los ahorradores”.

3. Ampliación de los límites de las aportaciones a planes de pensiones, tanto generales como a favor del cónyuge

Como se recordará, el anteproyecto del Gobierno reduce a 8.000 euros al año (con el límite del 30% de los rendimientos del trabajo y actividades económicas) el límite máximo de reducción de aportaciones a planes de pensiones, frente a los actuales 10.000 euros (o 30% de los citados rendimientos), o 12.500 (o 50% de los citados rendimientos) en caso de contribuyentes de 50 años o más. Y lo que propone Inverco es mantener los límites actuales o, “al menos”, ampliarlos a quienes tengan más de 50 años.

Según sus datos, las aportaciones superiores a los 8.000 euros suponen alrededor del 7% de las aportaciones totales (4.200 millones de euros en 2013), lo que representa cerca de 300 millones de euros, por estar concentradas en los contribuyentes de más edad, que también son los de mayor nivel de renta.

4. Mejora del tratamiento de las prestaciones, recuperando la reducción del 30% (antes 40%) en las prestaciones de planes de pensiones

El documento de Inverco recuerda que la reforma de 2006 eliminó la reducción del 40% aplicable a las prestaciones de planes de pensiones percibidas en forma de capital y derivadas de aportaciones con una antigüedad superior a dos años, estableciendo un régimen transitorio. Y la patronal se queja de que el anteproyecto “no sólo no reinstaura esta reducción”, sino que limita temporalmente la posibilidad de aplicar dicho régimen.

En este caso, lo que se plantea simple y llanamente es recuperar la reducción aplicable a las prestaciones de planes de pensiones cuando se cobran en forma de capital. Igualmente,se propone un tratamiento diferenciado de la parte de la prestación correspondiente a aportaciones y a rendimientos. Las primeras tributarían al tipo marginal y los segundos al tipo general del ahorro.

Junto a las propuestas enviadas a Hacienda para que las incluya en la reforma fiscal, también se piden algunas aclaraciones sobre el contenido del anteproyecto de ley. Y en este sentido, se pide al Gobierno que deje “clara” la no aplicación a los accionistas y partícipes del régimen de transparencia fiscal establecido en este artículo cuando inviertan en Instituciones de Inversión Colectiva domiciliadas en otros países de la Unión Europea.