Las verdaderas bonificaciones fiscales a la maternidad: Castilla y León da 8.000 euros

La semana pasada Cristóbal Montoro se metió solito en un lío al anunciar una nueva subvención (impuesto negativo) a las madres trabajadores que unos minutos más tarde reconoció que ya estaba en vigor. No obstante, los portavoces de Hacienda señalaron después que sí se plantean incrementar esta ayuda o extenderla a otros colectivos, aunque no hay nada decidido. Más allá de estas contradicciones, las ayudas fiscales a la maternidad dependen totalmente de cada comunidad autónoma. Y ahí se lleva la palma Castilla y León, donde el nacimiento del primer hijo puede suponer ayudas de hasta 5.800 euros sumando las estatales y las autonómicas.

El impuesto negativo del que hablaba montoro es la paga de los 100 euros mensuales (1.200 euros al año) por hijo menor de tres años para las madres trabajadoras (registradas en la Seguridad Social). Se trata de un impuesto negativo porque Hacienda devuelve esa cantidad aunque la contribuyente no haya sufrido una retención por esa cuantía; las deducciones normales nunca devuelven más d elo que el fisco ha ingresado. Además, la otra ayuda de la que disfrutan las madres en todo el territorio nacional es la elevación del mínimo personal y familiar exento del IRPF: en 1.836 euros anuales por el primer hijo; en 2.040 por el segundo; en 3.672 por el tercero; y en 4.182 por el cuarto y siguientes. Cuando el niño sea menor de tres años, el mínimo que corresponda se incrementará en 2.244 euros más.

Esto es lo único que es igual para todas las madres españolas. a partir de ahí, existe una enorme heterogeneidad de deducciones autonómicas dentro del "carajal" fiscal que denuncia S. McCoy y con el que pretende acabar la comisión de expertos presidida por Manuel Lagares. En función de dónde nazca el bebé, la madre (y el padre) pueden tener unas ayudas ridículas o muy golosas. Eso sí, todas las comunidades imponen numerosas restricciones para aplicarse estos beneficios, de forma que sólo benefician en general a las rentas más bajas.

La mejor región española para tener hijos es Castilla y León, con mucha diferencia. Para empezar, la comunidad con mayores problemas de despoblamiento tiene una deducción por nacimiento de 710 euros si se trata del primer hijo, 1.475 euros si se trata del segundo, y 2.351 si se trata del tercero o sucesivos, muy por encima de las que aplica el resto de comunidades. Además, estas cantidades se incrementan en un 50% si se trata de parto o adopción múltiple. Además, ofrece una deducción de 750 euros por "disfrute del período de suspensión del contrato de trabajo o de interrupción de la actividad por paternidad o del permiso de paternidad".

Y ahí no acaba la cosa. Si la madre tiene que contratar una persona para el cuidado del niño menor de cuatro años (canguro), puede desgravarse el 30% del gasto con un máximo de 322 euros; y si lo lleva a una guardería, la comunidad le deduce el 100% hasta 1.320 euros. Esto significa, sin llegar a un caso extremo, que una pareja que tenga su primer hijo y lo lleve a la guardería podrá desgravarse 710 euros por nacimiento, 750 por paternidad y 1.320 por la guardería, es decir, 2.780 euros. Si a eso le sumamos los 1.200 euros de la bonificación estatal de las madres trabajadoras, los 1.836 de incremento del mínimo personal o familiar y los 2.244 de incremento adicional al ser menor de tres años, supera los 8.000 euros. Cantidad que se incrementa notablemente si se trata del segundo o tercer hijo.

Extremadura, la peor comunidad para ser madre

En el lado contrario de Castilla y León encontramos a Extremadura, también gobernada por el PP. Las madres extremeñas sólo tienen derecho a dos deducciones: una de 300 euros por parto múltiple -si es parto individual no se desgravan nada- y otra bastante ridícula de 15 euros para material escolar.

Entre estos dos extremos, aparecen el resto de comunidades. Andalucía ofrece una desgravación de 50 euros por hijo menor de tres años o parto múltiple, y otra de 100 euros para las familias monoparentales. En Aragón sólo da derecho a deducción el tercer hijo o siguientes, de 500 euros (ampliable a 600 para las rentas más bajas). Además, cubre el 100% del coste de los libros de texto hasta 100 euros en tributación conjunta (50 en individual). Asturias es bastante más generosa: existe una deducción de 505 euros para partos múltiples, otra de 303 euros para las familias monoparentales y otra para las familias numerosas: 505 euros para las de categoría general y 1.010 para las de categoría especial.

Baleares es otro ejemplo de nulo impulso a la natalidad: sólo da una deducción por libros de texto, de hasta 200 euros en tributación conjunta y 100 en individual. El otro archipiélago, Canarias, cuenta con un catñalogo mucho más amplio: hay una degravación de nacimiento de 200 euros, que se eleva a 400 si es el tercer hijo o siguientes; también cubre el 15% de los gastos de guardería hasta 400 euros y aplica otra desgravación por familia numerosa de 200 euros (categoría general) o 400 (especial). En Cantabria sólo existe una deducción de 100 euros por cada hijo menor de dos años.

Castilla-La Mancha ofrece 100 euros por nacimiento (que se elevan a 500 si es parto múltiple), otra por familia numerosa de 200 o 400 euros en función de la categoría, y una tercera por libros de texto de hasta 100 euros. En Cataluña sólo existe la deducción por nacimiento, aunque más generosa: 300 euros. Es la misma cantidad que permite desgravar Galicia (se eleva a 360 si es parto múltiple), aunque en esta comunidad también existe la deducción por familia numerosa, de 250 ó 400 euros, y la de canguro o guardería, que cubre el 305 del coste hasta un máximo de 200 euros.

Madrid, Navarra y Valencia, bastante generosas

La Comunidad de Madrid es otra de las que más incentiva la natalidad: la deducción por nacimiento es de 600 euros si se trata del primer hijo, 750 si es el segundo, y 900 si se trata del tercer hijo o sucesivos. Además, en caso de partos o adopciones múltiples, estas cantidades se incrementan en 600 euros por cada hijo. Además, tiene otra desgravación para familias con dos hijos e ingresos inferiores a 24.000 euros, equivalente al 10% de la cuota autonómica del IRPF. En Murcia sólo hay deducción por guardería para menores de tres años, que cubre el 15% de gasto hasta 660 euros; si el niño está entre tres y cinco años, hay otra adicional de guardería o colegio también de 660 euros pero sólo para familias monoparentales.

En La Rioja, las madres pueden deducirse 150 euros por el segundo hijo y 180 por el tercero y sucesivos. Valencia es otra de las comunidades más generosas respecto a la natalidad: 270 euros por nacimiento (224 euros más por parto múltiple); entre 300 y 660 euros por familia numerosa; y un 15% con un máximo de 270 euros por gastos de guardería. Pero además, bonifica otros conceptos que no aparecen en el resto de regiones. Así, tiene una deducción de 418 euros para madres trabajadoras con hijos de entre tres y cinco años; otra para amas o amos de casa de 153 euros; otra similar a la de Madrid, del 10% de la cuota autonómica para familias con dos hijos con ingresos inferiores a 24.000 euros; y otra más de 100 euros para material escolar si la madre está desempleada.

Finalmente, quedan las dos comunidades de régimen foral. En Navarra, lo que existe es un mínimo exento más elevado que en las comunidades de régimen común: 3.850 euros para el primer hijo si es menos de tres años y 1.650 euros si es mayor; cantidades que se elevan a 3.950 ó 1.750 euros si es el segundo hijo, 4.700 ó 2.500 si es el tercero, y 5.550 ó 3.350 si es el cuarto. En Euskadi, existe una deducción por nacimiento de 570 euros para el primero, de 705 para el segundo, de 1.192 para el tercero y de 1.408 para el cuarto.