La etiqueta de Mango se 'quema' en el último incendio mortal en un taller de Bangladesh

Bangladesh ha sufrido el tercer incendio en seis meses en talleres textiles que fabrican prendas para multinacionales. Entre ellas, varias españolas que ven cómo su marca y su reputación quedan 'manchadas'. Baste con señalar los casi doscientos fallecidos y un millar de heridos que este miércoles fueron presa de las llamas en Daca, la capital del país asiático. 

Entre los restos del edificio de ocho plantas que se derrumbó por el fuego aparecieron prendas de Mango, la compañía catalana propiedad de Isak Andic. Fuentes oficiales de la multinacional han confirmado que su marca estaba entre los cascotes del centro de producción, si bien han explicado que los talleres que allí estaban instalados no fabricaban todavía para la empresa española.

El vicepresidente de la Asociación Bangladeshí de Fabricantes y Exportadores del Sector Textil, S.M. Mannan, aseguró que unas 3.400 personas trabajaban en el edificio, según recoge el periódico local New Age.Los bomberos, la policía y personal militar han rescatado a varios cientos de personas de entre los escombros, mientras continúan las labores de auxilio en busca de supervivientes.

Una explicación que recuerda a la que Inditex dio en febrero cuando etiquetas de Berskha y Lefties aparecieron entre los restos de una fábrica incendiada en Bangladesh. En aquel suceso en la factoría de Smart Dhaka Export Garments fallecieron siete personas, a las que el grupo gallego indemnizó, pese a asegurar que ese centro de producción era propiedad de una tercera compañía que no estaba autorizada, según fuentes del grupo español.

Según el acuerdo negociado por el sindicato internacional Industriall Global Union, la familia de cada fallecido recibirá 13.300 dólares, además de una partida para hacer frente a la educación de sus niños. Los trabajadores heridos, así como los que perdieron sus puestos de trabajo, recibirán una media de 50 dólares al mes. Inditex optó por romper las relaciones con dos de sus proveedores (Womover y Center), que habían desviado la mercancía a ese taller. 

En noviembre de 2012, otro hecho luctuoso en los suburbios de Daca acabó con la vida de 112 personas. Compañías como C&A, Kik y El Corte Inglés se comprometieron a indemnizar a estas víctimas y a otras 120 heridas con 4,3 millones de euros, en un encuentro en Ginebra (Suiza) que organizó el citado sindicato internacional. Por el contrario, otros grupos como Walmart, Sears/Kmart, Dickies o Disney, entre otras, no asistieron a la reunión y rechazaron el pago de toda indemnización a las víctimas. 

El taller barato de la Unión Europea

En el incendio de ayer trabajaban talleres que pertenecían a las compañías Phantom Apparels Ltd, New Wave Style Ltd, New Wave Bottoms Ltd y New Wave Brothers Ltd, que manufacturan prendas de vestir para  Benetton, Wal-mart, y Disney, entre otras firmas occidentales.

El director de la Policía Industrial, Mostafizur Rahmán, acusó a los propietarios de las fábricas de ignorar las grietas que aparecieron en el edificio el martes. "La Policía Industrial pidió a los dueños de las fábricas que paralizasen las operaciones tras descubrirse grietas ayer", dijo Rahmán. "Pero ignoraron nuestras directivas y decidieron abrir sus unidades hoy", continuó el policía. Trabajadores que resultaron heridos en el accidente acusaron a los responsables de las fábricas de obligarlos a trabajar.

Bangladesh es uno de los países más pobres del mundo, con un PIB per cápita de 2.000 dólares. Según datos del informe Worldwide Sourcing 2013 del salón Zoom by Fatex, entre enero y septiembre de 2012 las importaciones textiles de Bangladesh de la Unión Europea se elevaron un 9%. Bangladesh, que alcanza el 13% de las importaciones totales textiles de la UE, ha superado a Turquía como principal proveedor de la Unión Europea. El salario mínimo es el más bajo del mundo: 3.000 takas o unos 30 euros al mes.