Rato concedió contratos a su socio Castellanos por valor de hasta 16,4 millones de euros

El exvicepresidente del Gobierno y exdirector gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI) Rodrigo Rato autorizó desde su puesto en la presidencia de Bankia partidas de gasto para el banco de inversión de su socio y amigo Jaime Castellanos por valor de hasta 16,4 millones de euros. La información ha sido aportada por el propio Castellanos al juzgado de la Audiencia Nacional que investiga la fusión de Bankia y su posterior salida a bolsa, a raíz de una querella presentada por Unión, Progreso y Democracia (UPyD).

Castellanos, presidente de Lazard en España, declaró como testigo en la causa hace dos semanas para aclarar la vinculación de su banco de negocios con las operaciones que acabaron provocando el colapso de Bankia. Después de todo, Lazard fue la firma escogida por los responsables de Caja Madrid para guiar el proceso de fusión que dio lugar a Bankia, dirigir la escisión del banco malo de la entidad y coordinar la operación de su salida a bolsa mediante una oferta pública de acciones (OPV).

Existen seis presupuestos de Lazard aprobados por consejos de administración presididos por Rato, que ascienden a 16.480.000 euros

Se da la circunstancia de que Rato, uno de los 33 exconsejeros de Bankia imputados en la causa, trabajó en Lazard bajo las órdenes de Castellanos antes de asumir la presidencia de Caja Madrid en enero de 2010. Además, durante los ocho meses de instrucción también han aparecido vinculaciones empresariales entre Rato y Castellanos. Los dos han reconocido al juez que dirige el caso, Fernando Andreu, que hasta el pasado diciembre compartían una sociedad anónima y que son socios de una comunidad de bienes que tiene un local en propiedad en un centro comercial de Alcorcón, que está alquilado a un supermercado de la cadena Mercadona.

Control de las facturas

Ante la sospecha de que la buena relación entre Rato y Castellanos se hubiera traducido en más encargos de Bankia a Lazard, el juez Andreu exigió al presidente del banco de inversión que presentara en la Audiencia Nacional todos los informes realizados por su firma para la entidad nacionalizada, acompañados de las facturas correspondientes. Castellanos cumplió este requerimiento el pasado jueves.

En la documentación aportada, a la que ha tenido acceso este diario, figuran seis presupuestos de Lazard aprobados por consejos de administración presididos por Rato. En total ascienden hasta los 16.480.000 euros y fueron tramitados entre junio de 2010 y abril de 2012 con objetivos diversos. El primero de ellos fue ratificado por los consejeros de Caja Madrid el 10 de junio de 2010 y tenía  la realización de labores de asesoramiento para la caja de ahorros. Asciende a 2.180.000 euros.  

El segundo encargo, correspondiente a un servicio ofrecido por Lazard a BFA, fue autorizado el 6 de mayo de 2011. Está escrito en inglés porque contó con la participación de la matriz franco-estadounidense del banco. En este caso, el cometido era asesorar a Bankia sobre su salida a bolsa. Lazard tasó este servicio en 2,5 millones de euros (1,5 millones como fijo y otro millón como variable). 

El tercer presupuesto entregado por Castellanos en la Audiencia Nacional tiene fecha del 6 de febrero de 2012. En este caso, Bankia contrató a Lazard para labores de asesoramiento en su política de dividendos, solvencia y rating de crédito. Por este servicio, el banco de negocios reclamó 1,5 millones de euros como fijo. 

El cuarto incluye como concepto el asesoramiento de Lazard a Bankia en la desinversión de fondos de capital riesgo y tiene fijado como tope una cuantía de un  millón de euros. Fue aprobado por el Consejo de Administración de Bankia el 3 de abril de 2012, sólo un mes antes de la salida de Rato.

Hasta los últimos instantes

Rodrigo Rato aún tuvo tiempo de conceder más partidas de gasto para su antigua empresa. De hecho, el 11 de abril de 2012 aprobó la más importante de todas ellas, el encargo a Lazard de 10,6 millones de euros para que el banco de inversión buscara potenciales socios para una fusión desesperada con Bankia.

El juez Andreu tendrá ahora que analizar esta documentación para averiguar si las cantidades liberadas por los consejeros imputados se ajustan a los precios de mercado

Rato autorizó el sexto contrato con Lazard sólo dos semanas antes de su salida de la entidad, el 7 de mayo de 2012. En concreto, el Consejo de Administración de Bankia admitió el 26 de abril desembolsar 300.000 euros en un servicio de asesoramiento de Lazard en relación a su estructura apropiada de capital en el Sistema Institucional de Protección (SIP).  

Castellanos ha aportado un séptimo contrato por valor de 1.540.000 euros -12 pagos mensuales de 12.000 euros, un millón de comisión y otros 300.000 euros adicionales- que fue aprobado por el consejo de administración de Caja Madrid en octubre de 2009, durante la presidencia de Miguel Blesa. Esta partida financió el asesoramiento de Lazard en la venta de la filial de energías renovables de Caja Madrid a Electricidad de Portugal (EDP). Sumando también este contrato, entre 2009 y 2012 Caja Madrid y Bankia autorizaron pagos a Lazard que sumaban en total los 18 millones de euros.  

La mitad no llegó a abonarse

De esta cantidad, sólo la mitad fue finalmente abonada por la entidad nacionalizada, al no cumplirse todas las condiciones que se habían fijado en los contratos para el pago de las cantidades en variable. Así se desprende de las facturas enviadas por Lazard a Bankia en relación a estos servicios, que también han sido presentadas por Castellanos en la Audiencia Nacional. El amigo y socio de Rato ha aportado una lista de 24 cargos que suman 9.229.624 euros.

El juez Andreu tendrá ahora que analizar esta documentación para averiguar si las cantidades liberadas por los consejeros imputados se ajustan a los precios de mercado y, también, si tras la sospechosa contratación recurrente de Lazard por parte de Caja Madrid y Bankia, con Rato al frente de estas entidades, se esconde algo más que una relación meramente profesional entre el exdirigente del Partido Popular y Castellanos.