El banco malo paga un 2% de comisión a las cajas nacionalizadas por vender sus pisos

Nuevo choque entre el banco malo (Sareb) y las cuatro entidades nacionalizadas que han tenido que ceder sus activos a este vehículo. Esta vez se trata de las comisiones que ofrece a estas entidades para que hagan de agentes inmobiliarios y vendan los pisos que han traspasado a Sareb (que eran suyos hasta diciembre). Según fuentes conocedoras de la situación, la sociedad que preside Belén Romana ofrece sólo entre el 2% y el 2,5%, algo que consideran "ridículo" las entidades y que estuvo a punto de impedir la firma del contrato de traspaso antes del 31 de diciembre. Se salvó el escollo en el último momento con un acuerdo para renegociar las comisiones antes del 15 de febrero.

Como adelantó El Confidencial en septiembre, las entidades nacionalizadas seguirán gestionando los activos traspasados hasta que el banco malo cuente con una estructura suficiente para ello (e incluso después), con los argumentos de que nadie conoce mejor los activos, puesto que eran suyos, y la potencia que les otorgan sus redes de oficinas. A cambio de esta tarea, BFA-Bankia, CatalunyaCaixa, NovaGalicia y Banco de Valencia exigían cobrar una comisiónde éxito, puesto que los ingresos ya no van a su cuenta de resultados y no tienen ningún otro incentivo para comercializarlos. En consecuencia, se considera razonable darles una compensación con la que aminorar las pérdidas que han sufrido con el traspaso de sus inmuebles a un precio bastante inferior al que tienen registrado en sus balances.

El problema llegó al poner negro sobre blanco esas comisiones. Según las fuentes consultadas, Sareb propuso unas comisiones que el sector considera "bajísimas". Concretamente, ofreció un 2% por venta de inmuebles. También ofreció comisiones por gestión de activos inmobiliarios -gastos, impuestos, mantenimiento...-, gestión de crédito promotor 'sano' y recobro del moroso -donde estas entidades tienen la ventaja de que conocen mejor que nadie a los deudores-, cuyo porcentaje varía en función de una extensa tipología de activos.

"Por esa comisión a las entidades no les merece la pena casi ni levantar la persiana", según una de las fuentes consultadas, que recuerda que las cajas tienen que movilizar a sus empleados, enseñar los pisos, negociar, firmar contratos y, sobre todo, retribuir a la red y a los servicios centrales. "Con un 2% no hay ni para empezar y las ventas serían deficitarias", añade.

Sareb estuvo a punto de retrasarse

Esto provocó que las entidades se rebelaran contra Sareb y se negaran a firmar el acuerdo para el traspaso de los activos, un documento de más de 100 páginas con todas las condiciones para la operación, en uno de cuyos anexos se incluyen estas comisiones. La negativa provocó escenas de nervios en Economía y el Banco de España, puesto que la cesión de los activos tenía que realizarse antes del 31 de diciembre por imposición del Memorándum de Entendimiento (MoU) con Bruselas y este enfrentamiento ponía en peligro toda la operación.

Conscientes de que incumplir el MoU no beneficiaba a nadie, las cuatro entidades se avinieron a una solución salomónica: aceptaban firmar el contrato para respetar la fecha tope, pero a cambio Sareb reconocía que las comisiones eran muy bajas y se comprometía a renegociarlas -para subirlas- en un momento posterior, una vez salvado el match ball. Para ello, las partes se han dado de plazo hasta el 15 de febrero.

Sareb ya había provocado las iras de estas cuatro entidades -y de las del Grupo 2, que traspasarán próximamente sus créditos e inmuebles- al ofrecerles como pago de sus activos unos bonos sin apenas rentabilidad y que, además, sufrirán un recorte al descontarse en el BCE para obtener liquidez.