Asturias reta a Rajoy y aprueba los presupuestos con el impuesto a la banca

El Gobierno asturiano ha decidido hacer caso omiso al planteamiento del Ejecutivo de Mariano Rajoy sobre la tasa a los bancos y mantiene este impuesto en el presupuesto aprobado ayer por el Consejo de Gobierno del Principado y que cuenta con el visto bueno de Izquierda Unida, que es quien apadrina el gravamen, y de UPyD, que logra introducir aspectos generales de control del gasto, una de sus principales reivindicaciones. Los presupuestos podrían estar sustanciados el próximo 28 de diciembre, ya que serán tramitados por el procedimiento de urgencia, a pesar de las protestas de la oposición de centro derecha.

IU había avisado el día después de que el Gobierno del Estado mantuviera una tasa 0 para los bancos, que si no se incluía el impuesto a las entidades financieras no daría su plácet a las cuentas autonómicas. Al PSOE le sobró tiempo para adherirse a la propuesta y el único diputado del partido de Rosa Díez remoloneó hasta el final, pero cambió su apoyo por mejoras en el ahorro institucional. Ya había advertido también que no repudiaría el impuesto a la banca si aparecía sobrevenido, aunque a la formación magenta no le gustara. Con este tributo, el Ejecutivo autonómico estima que conseguirá unos ingresos adicionales en torno a los 30 millones de euros.

En este contexto, el Gobierno socialista de Javier Fernández optó por la rebeldía y por introducir el gravamen a las entidades financieras en el proyecto presupuestario, aduciendo que es atribución de las comunidades autónomas este tipo impositivo y rechazando la "injerencia" de Cristóbal Montoro en  las competencias de los gobiernos regionales. Ayer mismo, la consejera de Hacienda, Dolores Carcedo, a la hora de explicar el proyecto presupuestario, manifestó que la Administración asturiana iría hasta el final para defender su política fiscal, incluida la apelación al máximo tribunal para defender sus derechos, teniendo en cuenta que el Tribunal Constitucional ya había validado la tasa bancaria de la Junta de Extremadura.

Los socialistas se autocomplacen de la consecución de un presupuesto difícil de lograr por la existencia en el pacto de dos fuerzas casi antagónicas. Pero a UPyD le ha dado la oportunidad de presentar enmiendas parciales en aquellos aspectos en los que podría enriquecerse el texto, sin que IU se escandalizara demasiado y el partido de Rosa Díez estampó su firma en el acuerdo. Además, todos los avalistas del proyecto resaltan su carácter social, ya que más del 65% de los gastos estarán destinados a servicios públicos, con subidas porcentuales importantes en capítulos destinados a sanidad, dependencia o servicios sociales, algunas de las partidas más queridas tradicionalmente por la izquierda.

El montante total del presupuesto autonómico supera los 3.800 millones de euros, un 1% menos que el anterior y casi 6 puntos por debajo de las cuentas prorrogadas en tiempo del Gobierno de Foro Asturias. Para cubrir los gastos derivados de la deuda del Principado se destinan 245 millones de euros. Desde la Administración regional se subrayó ayer el hecho de que Asturias es, junto al País Vasco, una comunidad con superávit en sus cuentas desde el pasado enero hasta el mes de setiembre, lo que le permite afrontar el balance de sus cuentas en una posición muy sosegada.

Todos los firmantes del acuerdo presupuestario destacan que, aunque las cuentas recogen el carácter restrictivo de la actual situación económica, el dinero destinado al gasto social sobrepasa las previsiones iniciales y se sitúa en torno al 67% de los capítulos destinados al gasto, lo que evitará restricciones en las partidas relacionadas con el salario social y los efectos de la dependencia.

Especial interés han tenido los tres grupos que suscriben el acuerdo en destacar el hecho de que, por primera vez, se constituya una red pública de escuelas de entre 0 a 3 años, que absorbería a aquellos centros de titularidad municipal ahora en funcionamiento, lo que es destacado como un elemento de reforzamiento de la escuela pública en unos momentos en los que sufre el deterioro de algunas políticas llevadas a cabo en comunidades gobernadas por el Partido Popular.

En el centro derecha, independientemente de las críticas al contenido del proyecto presupuestario, chirría el procedimiento de urgencia utilizado para que las cuentas estén aprobadas en el Parlamento el 28 de diciembre. Partido Popular, pero especialmente Foro Asturias, la formación de Francisco Álvarez-Cascos, han criticado con dureza el escaso lapso de tiempo entre su acceso al 'pendrive' con todos los datos presupuestarios, a la primera comparecencia del Gobierno para explicarlos: "cuatro días, cuando lo normal hasta la fecha era preservar entre 9 a 11 días para poder hacerse una idea del presupuesto". Foro Asturias no descarta presentar un recurso judicial que tenga como objetivo ampliar este plazo.