Es noticia
Claves para canalizar su ahorro de cara a la jubilación
  1. Economía
LAS PENSIONES PÚBLICAS, EN ENTREDICHO

Claves para canalizar su ahorro de cara a la jubilación

La sostenibilidad del sistema público de pensiones está en entredicho. Prácticamente todos los expertos dan por hecho que en el futuro la pensión que da el

Foto: Claves para canalizar su ahorro de cara a la jubilación
Claves para canalizar su ahorro de cara a la jubilación

La sostenibilidad del sistema público de pensiones está en entredicho. Prácticamente todos los expertos dan por hecho que en el futuro la pensión que da el Estado va a ser muy inferior a la que proporciona actualmente-a día de hoy la tasa de sustitución en España es de las más altas de Europa, con un pensión de entre el 70% y el 85% del último sueldo-. Ante esta situación, contar con un producto de ahorro privado para poder mantener el nivel de vida en la jubilación es cada vez más necesario.

Sin embargo, la crisis económica, la volatilidad de los mercados y la precariedad que atraviesan muchas familias complica el acceso estos productos. A ello hay que añadir el desconocimiento sobre planificación financiera, que dificulta la toma de decisiones de inversión. En este sentido, cabe señalar algunos aspectos que son claves a la hora de comenzar a ahorrar.

Según la guía La Planificación financiera para la jubilación elaborada por Aviva y AfI, estos son algunos de los puntos fundamentales:

1)      Hay que analizar el horizonte temporal existente hasta la jubilación. Si se comienza a ahorrar a edades tempranas, el  esfuerzo económico será menor.

2)      Analizar el nivel de ingresos y gastos (como la hipoteca) que serán los que determinen la capacidad de ahorro que se tenga.

3)      Plantearse el nivel de vida que se desea mantener una vez jubilado y calcular el ahorro necesario. Para ello, además de los asesores financieros, existen en el mercado aplicaciones que permiten calcular este importe.

No obstante, en este sentido, los expertos coinciden en señalar que, al igual que sucede en otros países, el Estado comunicara de manera anual, la cuantía de la pensión pública que recibiría cada trabajador si se mantuvieran las condiciones actuales hasta su retiro laboral, facilitaría el cálculo de los ingresos adicionales que necesita cada individuo para mantener su nivel de vida y, además, según apunta José Antonio Herce, socio directo de AFI, “sería clave para concienciar a los ciudadanos”.

4)      Una vez conocido el ahorro necesario, hay que elegir el producto adecuado para canalizarlo, pero para ello hay que tener en cuenta de nuevo numerosas variables.

En primer lugar, el perfil de riesgo, que evoluciona  a más conservador con la edad del partícipe. Asimismo, hay tener en cuenta el binomio rentabilidad-riesgo, ya que para obtener retornos mayores hay que sufrir normalmente una mayor volatilidad. Por ello, los expertos recomiendan que se invierta en bolsa cuando el horizonte temporal es largo y en activos más conservadores a medida que se acerca la edad de jubilación.

Otro aspecto que no se puede obviar es la liquidez –muchos productos destinados a complementar la pensión son ilíquidos y, por tanto, el importe invertido no se podrá rescatar sin penalización salvo en determinadas contingencias cubiertas por la ley-.

Las comisiones y gastos también hay que estudiarlas. Si éstos son muy elevados podrían provocar un recorte significativo de la rentabilidad.

Y, por último, la fiscalidad. Los distintos productos de ahorro para la jubilación contemplan diferentes tributaciones, algunos permiten diferir el pago de impuesto de la cuantía invertida hasta el momento del rescate (planes de pensiones individuales). Hay otros que permiten gestionar la tributación asociada a las prestaciones en función de la forma de cobro y duración elegida.

Por último, una vez que se han acometido las inversiones, hay que revisarlas periódicamente e ir adaptándola a las nuevas condiciones tanto personales como del mercado.

La sostenibilidad del sistema público de pensiones está en entredicho. Prácticamente todos los expertos dan por hecho que en el futuro la pensión que da el Estado va a ser muy inferior a la que proporciona actualmente-a día de hoy la tasa de sustitución en España es de las más altas de Europa, con un pensión de entre el 70% y el 85% del último sueldo-. Ante esta situación, contar con un producto de ahorro privado para poder mantener el nivel de vida en la jubilación es cada vez más necesario.