Société Générale vende un 5% de Iberdrola y certifica la 'derrota' de ACS
Société Générale ha cerrado el círculo de la operación de rescate de ACS por su deficitaria inversión en Iberdrola. El banco francés, que el pasado viernes
Société Générale ha cerrado el círculo de la operación de rescate de ACS por su deficitaria inversión en Iberdrola. El banco francés, que el pasado viernes refinanció el 8,25% de la eléctrica en manos de la constructora, ha colocado ahora un 5% del capital de la empresa energética a distintos fondos de inversión. De esta manera, Florentino Pérez pierde los derechos políticos y económicos sobre su participación en la compañía vasca
Fuentes financieras confirmaron la transacción llevada a cabo por Société Générale, que hace una semana sorprendió al ofrecerse como banco salvador de ACS. La entidad gala aceptó quedarse con un préstamo de 1.600 millones de euros vinculado al 8,25% de Iberdrola, una deuda que la constructora controlada por los March y los Albertos tenía anteriormente con BBVA y Bankia.
La renovación se produjo porque los dos bancos nacionales estaban exigiendo a ACS más garantías debido a la caída de la acción de Iberdrola, ya que la línea de financiación tenía asociados los conocidos margin calls, o cláusulas por las que el deudor tiene que aportar más activos –acciones o dinero- si el subyacente del préstamo cae por debajo de determinados precios.
Société Générale, un banco con profundas relaciones comerciales con ACS, le propuso quedarse con el riesgo del préstamo y eliminar los margin calls para que la constructora pudiera mantener su participación en Iberdrola sin tener que depender de la evolución en bolsa de la eléctrica. A cambio de salvarle el cuello, el banco se quedó con el 8,25% del grupo dirigido por Ignacio Sánchez Galán en pignoración del crédito. Pero la operación, muy confusa, hasta el punto de que la CNMV exigió tres hechos relevantes a ACS, escondía una segunda parte.
Esa parte es la venta de un 5% de Iberdrola por parte de Société Générale a fondos institucionales. La transacción se ha hecho en mercados fuera de hora o no regulados por un importe cercano a los 900 millones de euros. La entidad francesa ha comunicado al organismo regulador que su posición en el empresa de servicios ha pasado del 8,25% inicial a un escaso 3,14%. Al mismo tiempo, se ha constituido un préstamo de valores por 349,40 millones de acciones de la eléctrica, un 5,84% del capital. Además, un banco no identificado se ha quedado con un 1,62% en ejecución de garantías.
Derechos políticos y económicos
Tras esta colocación, ACS pierde los derechos políticos y económicos sobre su teórico 8,25% de Iberdrola, los cuales podría recuperar si se lo pidiese a Société Générale. Si así fuese, el banco debería de comprar ese paquete en mercado. Sin embargo, fuentes financieras señalan que en realidad la venta de ese 5% tiene como sujeto final a la propia constructora, por lo que su posición real en el grupo energético es 'de facto' de apenas un 8%.
Un porcentaje que también hay que poner en cuarentena, ya que más de la mitad –un 5,4% del capital de Iberdrola- lo tiene de forma indirecta mediante un contrato de derivados cuyo titular es Natixis. Este otro banco francés ha refinanciado en numerosas ocasiones la deuda de ACS sobre ese paquete, comprado a finales de 2006. Las pérdidas actuales de Florentino Pérez sobre ese 5,4% son de 1.200 millones.
Como el anterior préstamo, el firmado con Natixis también tiene margin call, cuya cláusula anterior a la última refinanciación de febrero era de 4 euros por acción. La nueva, según algunas fuentes, está en 2,88 euros, por lo que si Iberdrola cayera más en bolsa ACS debería de aportar nuevas garantías.
La palabra de Deloitte
La situación financiera del holding de los March y de los Albertos es más que delicado, con una deuda de más de 10.000 millones de euros. La compañía ha hecho grandes esfuerzos por reducir su apalancamiento con una venta masiva de activos no estratégicos, como su negocio de puertos en España, autopistas en Chile, redes de transmisión en Brasil, su empresa de servicios en España (Clece) y varios parques eólicos. Pero aún así y pese a la integración con Hochtief, su generación de caja es insuficiente para pagar lo que debe.
Por ese motivo, Florentino Pérez se vio obligado el pasado mes de abril a vender un 3,7% de Iberdrola, con unas pérdidas brutas de 700 millones de euros. Ahora falta saber cómo contabilizará ACS el traspaso de otro 8,25% de la eléctrica a Société Générale. Deloitte, su auditor de cabecera, que hasta la fecha no le ha obligado a provisionar sus bruscas pérdidas en Iberdrola –más de 4.000 millones-, tiene la última palabra. De momento, en menos de siete meses, ACS ha pasado de tener un 18,5% de la eléctrica a un pírrico 8%, del que en realidad solo es dueño del 1%.
Société Générale ha cerrado el círculo de la operación de rescate de ACS por su deficitaria inversión en Iberdrola. El banco francés, que el pasado viernes refinanció el 8,25% de la eléctrica en manos de la constructora, ha colocado ahora un 5% del capital de la empresa energética a distintos fondos de inversión. De esta manera, Florentino Pérez pierde los derechos políticos y económicos sobre su participación en la compañía vasca