La banca se hace de oro con las comisiones de los bonos patrióticos de la Generalitat

La banca está haciendo su agosto con la colocación de bonos patrióticos de la Generalitat. La deuda subsoberana se está convirtiendo en un balón de oxígeno para el margen financiero de la banca que participa. Concretamente, cobra una comisión del 2%.

Debido a esta bicoca, los bancos han colaborado muy activamente por su propio interés y la nueva emisión ha sido un éxito. Tanto que la Generalitat la ha ampliado.

CaixaBank, Catalunya Banc –de CatalunyaCaixa–, Banco Sabadell, Barclays, Caixa d’Enginyers, Deutsche Bank, BBVA, Unnim Banc, GVC Gaesco Valores, Cajamar, Ibercaja, Caixa Ontinyent, Caja 3 y Privat Bank son los bancos y entidades que han participado en esta colocación y los beneficiados por las condiciones de la misma.

La emisión de bonos era inicialmente de 2.055 millones, pero finalmente se ha ampliado hasta 2.369 millones ante la fuerte demanda de los clientes.

La comisión del 2% para las entidades fue fruto de una dura negociación con la banca, ya que el departamento de Economía de la Generalitat, que encabeza Andreu Mas-Colell, pretendía que el coste por la colocación fuera más bajo.

Sin embargo, las entidades financieras alegaron durante las conversaciones previas a la colocación que los bonos de la Generalitat eran un competidor a los productos que ellos mismos ofrecen en su particular guerra del pasivo. Y por tanto, según las fuentes financieras consultadas, los bancos acabaron imponiendo su tesis.

Refinanciación

La mayor parte de esta nueva emisión la Generalitat la utiliza para refinanciar la que vence a finales de este mes abril, con lo que de hecho está refinanciando la deuda ya emitida. Los clientes pueden escoger entre bonos a un año, que ofrecen una rentabilidad del 4,5% y hasta el 5% si el cliente escoge un vencimiento a dos años.

Según fuentes oficiales de la Generalitat, el 35% de los suscriptores de nuevos bonos de la administración catalana ha escogido la modalidad a dos años.

La emisión de bonos para particulares ha sido una ventana para muchas comunidades autónomas que han optado por esta alternativa para suplir las emisiones para inversores institucionales que ahora ya no encuentran salida al haberse cerrado el mercado de deuda subsoberana.