Elena Pisonero será la nueva presidenta de Hispasat tras el acuerdo entre SEPI y Abertis

Trece años después de ser casi ministra, la economista Elena Pisonero vuelve a la primera línea de actividad pública, aunque de manera indirecta. Será como presidenta de Hispasat, según han confirmado a este diario fuentes oficiales, la compañía de satélites donde el Gobierno controla un 25,6% del capital a través las sociedades estatales INTA, SEPI y CDTI. Sustituirá en el cargo a otra mujer, Petra Mateos, apadrinada por el exministro José Bono, que abandonó el cargo la semana pasada después de estar al frente durante el periodo comprendido entre las dos últimas legislaturas.

A pesar de la existencia de varios candidatos y de novedades recientes en el accionariado de Hispasat, el ministro Cristóbal Montoro, responsable jerárquico sobre la SEPI desde la cartera de Hacienda, se ha decantado por una vieja conocida como Elena Pisonero, que desde 2005 trabajaba en la consultora KPMG, donde es socia y adjunta al presidente. Mucho antes, sin embargo, formó parte como asesora del grupo parlamentario del equipo económico del Partido Popular que hizo oposición desde comienzos de los 90 bajo el liderazgo de José María Aznar, antes de conquistar el poder por primera vez en 1996.  

La carrera política de Elena Pisonero ha estado siempre vinculada al entonces todopoderoso vicepresidente económico Rodrigo Rato. Sin embargo, su entrada en la esfera popular se debe a la confianza de Cristóbal Montoro, su verdadero mentor, con el que coincidió durante dos años (1990-1992) en el Instituto de Estudios Económicos, desde donde saltó a la arena de la política. Jefa de asesoría y directora del gabinete de Rato durante los dos primeros años de gobierno, promocionó luego a secretaria de Estado de Comercio y Turismo y se quedó a las puertas de ser ministra de Agricultura en 1999.

A partir de su frustrado nombramiento, ministra por unas horas, Pisonero fue perdiendo peso dentro del aparato económico del PP. En la segunda legislatura popular ocupó escaño como diputada y fue designada como embajadora permanente de España ante la OCDE, el mismo retiro que ocupó, por ejemplo, la ministra Cristina Narbona tras dejar el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. A partir de 2004, tras el cambio de poder político, la nueva presidenta de Hispasat reanudó su carrera como consultora y docente, aunque no dejó de estar vinculada a entidades de ámbito público como el Real Instituto Elcano o Caja Madrid.

La llegada de Elena Pisonero a la presidencia de Hispasat coincide en el tiempo con otros cambios relevantes en la órbita de la compañía de satélites, que tiene como nuevo accionista de referencia a Abertis (48%). La penúltima novedad tiene que ver con Hisdesat, la filial militar controlada por Hispasat, donde su consejero delegado, Roberto López, que accedió al puesto de primer ejecutivo por designación de José Bono, de cuyo gabinete en el Ministerio de Defensa formó parte, fue cesado en el cargo ayer martes, sólo unos días después de que Petra Mateos abandonara la presidencia de la matriz.

Una vez resuelto el relevo al frente de Hispasat, el siguiente paso puede afectar a Hisdesat, para la que suena como posible sucesor Miguel Ángel Panduro, actual consejero delegado de la ingeniería pública Isdefe. Sin embargo, cualquier decisión sobre la filial militar está en el aire, ya que el Gobierno baraja la posibilidad de desprenderse en favor de Abertis de su participación en Hispasat, donde también es accionista la francesa Eutelsat (23%), y concentrar en Hisdesat, presidida por el teniente general Juan Antonio del Castillo por designación del PSOE tras perder las elecciones, todo el negocio más sensible.

En cualquier caso, la propia Hispasat guarda un complicado equilibrio de poderes a tres bandas, ahora con Abertis como accionista de referencia tras adquirir la participación de Telefónica. La operadora controlada por La Caixa y ACS cuenta desde el año pasado con el puesto de consejero delegado de la compañía de satélites, motivo por el que aún más su opinión se ha hecho oír a la hora de decidir el sustituto de Petra Mateos, misión para la que también han sonado otros nombres vinculados con la compañía catalana, como Ernesto Mata o Luis Sánchez Merlo (Astra).