EEUU se desmarca de la guerra de divisas: Geithner apuesta por un dólar fuerte y no ayudará a su devaluación

Para Estados Unidos, un dólar más débil puede tener en estos momentos interés nacional. De esta manera, se escribe un nuevo capítulo en la guerra del mercado de divisas que está llevando a los países a procurar la devaluación de sus respectivas monedas para salir de la crisis económica vía competitividad y mejorar sus exportaciones.

Así, el billete verde ha caído más de un 7% desde el pasado 27 de agosto cuando el presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, aseguró que estaban dispuestos a flexibilizar la política monetaria del país. Una medida que debería ser bien recibida por el secretario del Tesoro de EEUU, Timothy Geithner, ya que puede ser una forma de reforzar el proceso de recuperación.

"En un momento en el que las presiones deflacionarias se han convertido en el mayor peligro, el crecimiento es inferior al esperado y Estados Unidos quiere impulsar sus exportaciones, porqué no van a querer un dólar débil", ha asegurado el presidente de Goldman Sachs, Jim O'Neill en una entrevista que recoge Bloomberg.com. "La respuesta viene cuando ello se convierte en un problema para los mercados financieros. Hasta entonces, se trata de una estrategia sencilla".

Pero ayer el secretario del Tesoro defendía todo lo contrario. Según explicó en un encuentro que tuvo lugar en California, la prioridad del Gobierno es mantener la confianza en un dólar fuerte y aseguró que la administración no participaría en la devaluación de la moneda.

No obstante, un dólar más débil puede ayudar a la economía en la fabricación de productos más competitivos en los mercados extranjeros y, por consiguiente, el aumento de los ingresos de las multinacionales estadounidenses. No es de extrañar, por tanto, las fuertes presiones a las que están sometiendo a sus principales competidores, China, para que de una vez por todas su gobierno permita la revalorización del yuan.

Y es que en este sentido, empresas como Costco Wholesale Corp. o Deere & Co. han destacado que la debilidad del billete verde podría impulsar su beneficio más allá de las fronteras estadounidenses. Además, su caída en los últimos meses ha permitido a los mercados tomar impulso y llevar al Dow Jones de Industriales por encima de los 11.000 puntos por primera vez desde el mes de mayo, reforzando así la confianza de los consumidores y del sector empresarial.

Pero esta situación puede convertirse en un arma de doble filo. Se corre el riesgo de que la caída del precio del dólar se descontrole impulsando el aumento del coste de vida a largo plazo y llevando a los inversores a eludir la deuda estadounidense.